La evaluación formativa en entornos virtuales en los estudiantes del nivel secundaria – 2021

        

Formative assessment in virtual environments in high school students – 2021

 

Avaliação formativa em ambientes virtuais em alunos do ensino médio – 2021

   

	Luz Marina Baca-Hinostroza I marina.baca@gmail.com    https://orcid.org/0000-0001-7517-517X
	José Eduardo Maguiña-Vizcarra II jose.maguiña@gmail.com https://orcid.org/0000-0003-4951-3934

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: marina.baca@gmail.com        

 

 

Ciencias de la Educación  

Artículo de Investigación

                                                                         

*Recibido: 04 de enero de 2022 *Aceptado: 25 de enero de 2022 * Publicado: 18 de febrero de 2022

 

 

1. Universidad Cesar Vallejo, Perú
2. Universidad Cesar Vallejo, Perú

 

Resumen

La presente investigación tiene como objetivo realizar una revisión teórica sobre la evaluación formativa y su importancia en los entornos virtuales en el contexto de pandemia causado por el virus Covid-19 en el Perú que trajo el cierre de escuelas y el aislamiento social obligatorio decretado por el gobierno peruano.

La metodología empleada se centra en la investigación documental de artículos científicos actualizados de revistas indexadas y otras fuentes teóricas.

El presente articulo tuvo como resultado que la evaluación formativa es toda practica de evaluación permanente, que ayuda a mejorar el aprendizaje en el estudiante contrastándolo con una evaluación que las califique o certifique.

De igual manera, se determinó que la evaluación formativa en entornos virtual son procedimientos que implica la participación activa de los docentes y estudiantes en un contexto virtual con las orientaciones pertinente sobre el uso de la tecnología.

Por lo que, el trabajo buscar enfatizar y llegar a una reflexión sobre la evaluación formativa en entornos virtuales en la educación básica regular en los estudiantes del nivel secundaria del año 2021.

Palabras clave: evaluación formativa; entornos virtuales; retroalimentación; acompañamiento y planificación.

 

Abstract

The objective of this research is to carry out a theoretical review on formative assessment and its importance in virtual environments in the context of a pandemic caused by the Covid-19 virus in Peru, which brought the closure of schools and the mandatory social isolation decreed by the Peruvian government.

The methodology used is focused on documentary research of updated scientific articles from indexed journals and other theoretical sources.

This article had as a result that formative evaluation is all permanent evaluation practice, which helps to improve student learning by contrasting it with an evaluation that qualifies or certifies them.

Similarly, it was determined that formative assessment in virtual environments are procedures that involve the active participation of teachers and students in a virtual context with the pertinent guidelines on the use of technology.

Therefore, the work seeks to emphasize and reach a reflection on formative evaluation in virtual environments in regular basic education in secondary level students in 2021.

Keywords: formative assessment; virtual environments; feedback; support and planning.

 

Resumo

O objetivo desta pesquisa é realizar uma revisão teórica sobre avaliação formativa e sua importância em ambientes virtuais no contexto da pandemia causada pelo vírus Covid-19 no Peru, que trouxe o fechamento de escolas e o isolamento social obrigatório decretado por o governo peruano.

A metodologia utilizada centra-se na pesquisa documental de artigos científicos atualizados de periódicos indexados e outras fontes teóricas.

O presente artigo teve como resultado que a avaliação formativa é qualquer prática avaliativa permanente, que ajuda a melhorar a aprendizagem dos alunos, contrastando-a com uma avaliação que os qualifica ou certifica.

Da mesma forma, foi determinado que a avaliação formativa em ambientes virtuais são procedimentos que envolvem a participação ativa de professores e alunos em um contexto virtual com orientações relevantes sobre o uso da tecnologia.

Portanto, o trabalho busca enfatizar e alcançar uma reflexão sobre avaliação formativa em ambientes virtuais na educação básica regular em alunos do ensino médio em 2021.

Palavras-chave: avaliação formativa; ambientes virtuais; comentários; acompanhamento e planejamento.

 

Introducción

En diciembre de 2019, se detectó unos nuevos casos de neumonía en la ciudad de Wuham, provincia de Hubei en China ocasionados por un nuevo virus, el cual se le denominó Covid-19.

Dicha enfermedad fue detectada en el territorio peruano el 5 de marzo de 2020 cuando se registró el primer caso de Covid-19, por lo que, se generó zozobra e incertidumbre por la propagación de un nuevo virus desconocido a la fecha, ante ello el Ministerio de Salud ha emitido alertas epidemiológicas y normas que establecen el tratamiento médico para rebatir dicha enfermedad.

Ante esta situación, el estado peruano declaró el Estado de Emergencia Sanitaria en el Perú mediante el Decreto Supremo Nº 008-2020-SA el cual sigue siendo prorrogado debido al avance de la pandemia, además dictó una serie de medidas de prevención y control.

De igual manera, mediante el Decreto Supremo Nº 044-2020-PCM del 16 de marzo de 2020, se estableció el aislamiento social obligatorio (cuarentena) y restringió el ejercicio de los derechos a los ciudadanos con la finalidad de ser protegidos.  

En este escenario, las Instituciones Educativas interrumpieron sus labores educativas dando paso a una educación a distancia, hecho que posibilitó la creación del programa Aprendo en Casa. Minedu, (2020) que implementó el desarrollo de la modalidad remota, promoviendo la transmisión de franjas educativas utilizando de la radio, televisión, plataformas web y redes sociales. Dicho escenario evidenció la falta de conectividad en las escuelas, la insuficiente disponibilidad de dispositivos electrónicos, la falta de energía eléctrica, la dificultad en el tener acceso a los medios de comunicación tecnológicos como la televisión y/ la radio, la limitada formación de los docentes en el uso de las tecnologías de la comunicación y de la información (TIC), y la falta de diálogo intercultural en los procesos de aprendizaje lo que ha ocasionado el escaso interés de los estudiantes generando la deserción escolar y la desconexión temporal de los estudiantes.

De igual manera, dicho contexto generó la deserción de muchos estudiantes de las instituciones educativas debido a la carencia de instrumentos tecnológicos en las clases virtuales, así como la escasa conectividad, al igual que la ausencia de estrategias de enseñanza aprendizaje pertinentes a este entorno virtual y la implementación de entornos virtuales de aprendizaje.

Este proceso de aprendizaje que se está dando en un entorno cambiante y retador que hace imprescindible que los estudiantes aprendan a aprender para manejarse con éxito en este mundo en constante transformación que exige estudiantes creativos, reflexivos y críticos que sepan solucionar problemas cada vez más complejos como el uso de la tecnología para aprender y desarrollar sus competencias digitales.

Los docentes se están siendo obligados a transformar sus métodos de enseñanza tradicional para reajustarlos a modelos virtuales vigentes, adaptándose a esta nueva modalidad de enseñanza de forma abrupta y con pocos conocimientos sobre el manejo pertinente de las TIC. El uso del WhatsApp, los mensajes de voz y de texto mayoritariamente y el uso de plataformas como el ZOOM, Classroom y el MEET en menor cuantía son la característica del trabajo docente en este contexto virtual de trabajo remoto tanto para la mediación como para la retroalimentación de los estudiantes. Sumado a esto tenemos la falta de conocimiento de los docentes y estudiantes sobre el uso de las herramientas tecnológicas para el desarrollo de las actividades que fueron planificadas.

La creación de “Aprendo en casa”, proporciona a los estudiantes del Perú el acceso a información, materiales y recursos educativos conforme a las directivas señaladas por el Ministerio de Educación. Dicha estrategia puso a disposición de los docentes y estudiantes herramientas digitales de fácil manejo que no están siendo utilizadas por falta de conocimiento. Con estas medidas se pretende asegurar que el servicio educativo virtual se desarrolle según lo establecido por el Currículo Nacional de la Educación Básica (CNEB), para cada ciclo, grado y área curricular.

La implementación del CNEB utilizando las TIC, demanda de un conjunto de competencias que tanto los docentes y estudiantes deben adquirir para aprovechar de manera pertinente y óptima las herramientas tecnológicas. Asimismo, los estudiantes deben contar con equipos con conectividad, aprender con metodologías activas y manejar entornos virtuales de aprendizaje (EVA) para promover su aprendizaje de manera colaborativa a partir de procesos de interacción y comunicación multidireccional entre los docentes y estudiantes.

En este contexto de entornos virtuales, resulta clave la evaluación formativa, pues gracias a ella se realiza una evaluación permanente con la intención de aportar una mejora en el aprendizaje, y, a la vez brinda una información relevante que retroalimenta al docente y al estudiante con la finalidad que se adapte a los requerimientos del aprendizaje.

En la actualidad, la evaluación formativa se considera como una necesidad primordial para el desarrollo del logro de las competencias en los estudiantes (Fraile et al., 2019); por lo que es primordial repensar la forma en que se evalúa en entornos virtuales ya que no solo se toma en consideración los resultados numéricos (Andrade & Brookhart, 2019) sino como el estudiante avanza a lo largo de su aprendizaje. En consecuencia, los docentes asumen un compromiso para crecer en su praxis educativa (García R. & otros, 2016)

Por lo que, en el presente trabajo de investigación se efectuó una revisión de la literatura que aborde sobre la evaluación formativa en entornos virtuales en el 2021, analizando aspectos de la enseñanza en este nuevo contexto y las dificultades para una educación remota de calidad.

 

Objetivo

Analizar las teorías creadas desde el año 2016 al 2021 sobre evaluación formativa en entornos virtuales en los estudiantes del nivel secundaria – 2021.

 

Metodología

La presente investigación se realizó una recopilación y análisis de documentos confiables y que se encuentran relacionados con el tema de investigación; a la vez, se incluyó libros, artículos de revistas científicas y tesis doctorales en los que brinda un tratamiento respecto a la evaluación formativa en entornos virtuales en los estudiantes del nivel secundaria-2021.

La metodología empleada fue una revisión de la literatura descriptiva, con búsqueda en la base de datos online como Scopus, Concytec, Scholar, Ebsco, Academic Onefile, Scientia, Redalyc, Scielo; con la finalidad de tener una idea más clara sobre la evaluación formativa en el contexto a distancia en las instituciones educativas ya que constituye un gran reto para los docentes y los estudiantes durante su desempeño.

La información recopilada se estableció a 10 años, pero también se tomó en cuenta propuestas de años anteriores por considerarla información relevante para la elaboración del presente artículo.

 

Resultados

a.             Evaluación Formativa

A través del tiempo, el término de evaluación era considerado como un sinónimo de resultados cuantitativos sin considerar el proceso del nivel de desarrollo de sus competencias.

En el Perú el Ministerio de Educación (2017) mediante el CNEB propone el enfoque formativo para evaluar los logros de aprendizaje de los estudiantes, haciendo énfasis en su progreso a través de las evidencias en un periodo determinado.

El enfoque formativo del aprendizaje se orienta a recopilar información importante que valora el avance de los aprendizajes de los estudiantes considerándolo como factor importante la retroalimentación que permite el acompañamiento continuo durante el desarrollo de sus actividades planificadas.

Según Pérez, Julián y López (citado por Fraile & otro, 2013) manifiesta que la evaluación formativa debe reconocer los diferentes estilos de aprendizajes de los estudiantes, guiarlos hacia el logro del desarrollo de sus competencias e involucrarse durante el proceso.

Los autores Black, Harrison, Lee, Marshall, y Wiliam (Mense, 2017), definen a la evaluación formativa como una evaluación para el aprendizaje, donde el docente reflexione sobre su praxis educativa y los estudiantes se involucren en un contexto evaluativo no solo para que clasifique o certifique si no para la mejora de su aprendizaje mediante la retroalimentación reflexiva.

McMillan (2007) define a la evaluación formativa como la retroalimentación que se le brinda al estudiante para ver los logros y dificultades que puedan tener, motivándolos a involucrarse activamente en el proceso enseñanza aprendizaje 

La evaluación formativa es la reflexión que realiza el docente en su praxis educativa para buscar estrategias didácticas que le va a permitir orientar al estudiante durante el proceso enseñanza aprendizaje en la mejora continua del desarrollo de sus actividades planificadas generándoles su autonomía (Agencia de Calidad de la Educación, 2016). Por lo que, las evidencias recopiladas en este proceso, demuestran los avances o dificultades que pueden tener los estudiantes en el logro de sus aprendizajes para elaborar una retroalimentación reflexiva involucrándolo al estudiante y al docente como protagonista de su propio aprendizaje.

La interacción de los pares educativo genera que la evaluación formativa este sujeto a cambios permanentes (Díaz Barriga, 2002), ello conlleva a identificar nuevas oportunidades en el aprendizaje dando mayor énfasis en el proceso que el resultado y evaluar si la planificación se realizó conforme a lo establecido previamente.

Huertas (2016) explicó que planificar significa analizar la situación y descubrir una solución antes de la actuar, teniendo en cuanta las ventajas y desventajas del contexto de los estudiantes.

En consecuencia, la planificación tiene un papel importante porque en ella se precisa acciones, metas y objetivos a desarrollarse en el proceso educativo generando que los estudiantes y docentes se involucren y así permitir el logro de las metas propuestas.

Según Nieda, (1987), Black & Wiliam (citados en Happuis, 2009) y Popham (2013), consideran siete características de la evaluación formativa, siendo una de ellas el proceso de planificación y continuo, ya que se practica una serie de acciones que permiten conocer el estado del aprendizaje del estudiante, un ejemplo de ellas son los exámenes.

La segunda y tercera es el carácter integral y compartida de la evaluación formativa implica no solo conocer los conceptos claves sino también tener una actitud crítica y responsabilizándose de su propio progreso en donde reconozca y valore sus esfuerzos contribuyendo a su autoestima e independencia del estudiante.

Ser el regulador del proceso educativo y utilizar adecuadamente las evidencias obtenidas son las cuarta y quinta características de la evaluación formativa; pues se orienta a descubrir el avance de los objetivos y realiza diversas actividades para determinar el nivel actual del aprendizaje y así dilucidar las interrogantes y corregirlas en el momento. 

Finalmente, la retroalimentación y la participación proveen una visión descriptiva para orientar al estudiante y fomentar las habilidades y la autoevaluación con sus pares.

Por tanto, las características de la evaluación formativa nos permiten brindar soporte emocional permanente como la retroalimentación y acompañamiento continuo a los estudiantes para incentivar el desarrollo de la creatividad y habilidad en los estudiantes y así permitir en ellos la autoevaluación generando un pensamiento crítico para la resolución de problemas y emisión de opiniones propias.

El proceso enseñanza – aprendizaje se compone de tres etapas, la primera es la inicial en la cual se parte de un diagnóstico para determinar el nivel de aprendizaje de los estudiantes para establecer los objetivos y metas a ejecutarse.

En el segundo momento, se utiliza estrategias educativas para resolver las dificultades o problemas que tienen los estudiantes durante el desarrollo de las actividades planificadas.

Finalmente, se observa si el estudiante logro el desarrollo de sus competencias de acuerdo a lo planificado.

En consecuencia, la evaluación formativa en cada una de las etapas es orientar a los estudiantes para que alcance sus objetivos a mediano y largo plazo, y los docentes constantemente animan a los estudiantes a participar activamente en su propio aprendizaje.

Según la academia, existen 2 tipos de evaluación: la sumativa y la formativa (Gagné, 1970; Bloom & Otro, 1975; Broadfoot, 1993; Black & Williams, 1998; Rosalesl, 1998; Dochy, Segers & Sluijsmans, 1999).

La primera de ella se relaciona con una evaluación tradicional y se ejecuta al final de un ciclo académico teniendo como enfoque un modelo cuantitativo al realizar la medición del desempeño del estudiante en la cual el docente solo recopila para obtenerlos.

Por el contrario, la evaluación formativa se relaciona directamente a una evaluación de procesos y seguimiento en mejora de los aprendizajes de los estudiantes con un enfoque cualitativo (Broadfoot, 1993; Rosales, 1998; Black & William, 1998).

La tradicional evaluación sumativa ha sido un problema para los estudiantes y docentes, pues lo más importante en ella es el paradigma cuantitativo pues se direcciona solo a resultados (Shepard, 2001); sin embargo, diversos autores consideran que la forma de evaluar tiene una influencia directa en la calidad de su aprendizaje (Biggs, 1999; 2000; Brown, 1999; Gibbs, 1999; Hyland, 2000; Sadler, 1983). Biggs (2000), Ecclestone & Prior (2003) y Sadler (1998), pues para que sea de calidad, los procesos de valuación y enseñanzas se relacionan y tiene un carácter formativo, posición secundada por Allien (1998) y Seidel & Walters (1997) al considerar que la evaluación es un proceso de investigación continua.

El desarrollo de habilidades cognoscitivas, metacognoscitivas (de reflexión sobre sus propios procesos de aprendizaje) y sociales logran que la evaluación formativa sea una herramienta de mejora continua, en la cual se da una interacción activa entre los entes educativos (Boud, 1991), por lo que, la participación de ellos es fundamental para propiciar un aprendizaje participativo, reflexivo, dinámico e interactivo (Stefani, 1998) en la cual ellos son autores de sus propios aprendizajes.

En este orden de ideas, la evaluación formativa permite que los estudiantes sean entes activos y participativos con sus pares en la cual interactúan durante el desarrollo de sus actividades (Heritage, 2007 citado por Moreno 2016) permitiendo que sean gestores de sus aprendizajes y al mismo tiempo reflexionen sobre sus debilidades, dificultades y fortalezas generando confianza en sí mismos.

b.             La Evaluación Formativa en Entornos Virtuales

La educación virtual genera un nuevo escenario en donde no solo se acopla los medios tecnológicos al proceso educativo, sino que también se origina un nuevo paradigma entre el estudiante y el docente por la orientación que este último brinda.

La educación en entornos virtuales necesita de un ambiente implementado con los equipos digitales necesario en donde el estudiante pueda utilizarlos de manera pertinentes en su proceso educativo (Díaz, 2020). Por lo que, ello permite tener una nueva visión del contexto actual que representa una oportunidad de cambio (Villalaz & Medina, 2020).

Antes de la pandemia la educación virtual no era relevante en el aspecto pedagógico, la utilizaban de acuerdo a sus necesidades (Barrón, 2020). Pero en estos tiempos se convirtió en la única vía del trabajo educativo donde interactúan de manera sincrónica y asincrónica el docente y los estudiantes generando un espacio de aprendizaje.

La educación dio un giro Copérnico donde los entes educativos afrontaron el reto del cambio en el sistema educativo teniendo en cuenta la adaptación del currículo, la evaluación en entornos virtuales, el uso de las herramientas digitales frente a las necesidades de cada contexto educativo y social. (Morales & Medina, 2020).

En el 2020, a causa del Covid-19, la educación virtual tomó más importancia pues se consideró como una buena alternativa para continuar los estudios; sin embargo, tuvo diversos problemas para la adecuación por la falta de conectividad y obtención de medios para desarrollar las actividades correspondientes. También genero la no presencia física del docente en los ambientes educativos como parte importante del desarrollo emocional y pedagógico de los estudiantes (Intriago, et al., 2020).

La evaluación en entornos virtuales requiere de la utilización de instrumentos pertinentes para recoger información real del avance o retroceso del aprendizaje de los estudiantes para que el docente reflexione sobre su praxis educativa y realice la retroalimentación y el acompañamiento continuo. (Dorrego, 2016)

Frente a esta educación virtual se ha hecho imprescindible que los docentes se empoderen de los conocimientos tecnológicos, se actualicen y utilicen la diversidad de herramientas tecnológicas y digitales como las aulas virtuales gratuitas para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje y lograr aprendizaje significativo generando en ellos gestores de sus propios aprendizajes (Gutiérrez Porlon, 2014)

Es preocupante ver como la educación de los estudiantes no avanza debido a diversas desventajas, entre ellas el ahondamiento de las brechas digitales. En el que gran cantidad de estudiantes no tienen las herramientas adecuadas o deben compartirla con otros miembros de la familia.

El uso del WhatsApp para la mediación docente y para la retroalimentación no brinda a los estudiantes las oportunidades de desarrollar sus competencias y optimizar sus aprendizajes lo que le causa estrés sumado a la falta de interacción física con los docentes se constituyen como las principales causas para el incremento de estudiantes que abandonan el sistema educativo o se desconectan temporalmente.

En este contexto la evaluación se convierte en un elemento esencial para recoger información pertinente durante el proceso educativo donde los actores educativos se involucran para reflexionar sobre sus avances o dificultades que puedan tener los estudiantes y ver su mejora continua (Deroncele et al., 2020) 

Evaluar en la educación no presencial y remota el reto es más desafiante implica cambios y compromiso del docente utilizar estrategia didácticas o posturas que lo lleve a resolver problemas no solo pedagógico sino también para la vida (Moreno, 2016; Medina & Deroncele, 2020b)

Si el estudiante comprende sus avances que ha logrado a lo largo del proceso de aprendiza, se motivara para seguir con él, lo que genera no solo el cumplimiento de sus logros sino también el esfuerzo al momento de evaluarlos ya que este debe de ayudar al mismo estudiante para ir controlando su aprendizaje. 

Por tanto, la evaluación formativa en entornos virtuales es la clave para alcanzar las metas y objetivos del estudiante alentándole al cambio permanente sobre el conocimiento adquirido, ello conlleva a que dicha evaluación sea eficaz en el método o procedimiento implementado por el mismo docente.

Finalmente, el uso de entornos virtuales produce una transformación en las prácticas educativas donde la utilización de las Tics desempeña un papel primordial en el aprendizaje de los estudiantes.

 

Conclusiones

La evaluación formativa es un proceso continuo que permite recopilar información relevante de los avances de los aprendizajes de los estudiantes considerándolo como un factor importante la retroalimentación que permite realizar el acompañamiento continuo durante el desarrollo de las actividades previamente planificadas, al igual que el factor reflexivo del docente de su praxis educativa que admite el involucramiento del estudiante como protagonista de su propio aprendizaje.

La evaluación formativa se compone de tres etapas, siendo la primera ejecutada por el docente al realizar un diagnóstico real de sus estudiantes para analizar el nivel de aprendizaje se encuentra, para luego ejecutar lo planificado creando estrategias didácticas que le genera al estudiante un mayor intereses y motivación en desarrollar sus actividades juntamente con el docente participando activamente durante el proceso enseñanza aprendizaje, finalmente, se verifica en forma cualitativa si el estudiante logró desarrollar sus competencias.

Los tipos de evaluación son la sumativa y la formativa, siendo la primera se enfoca a resultados en un paradigma cuantitativa, mientras que la segunda se enfoca en lo cualitativo en la cual se evalúa el proceso de los aprendizajes de los estudiantes; en la actualidad, esta última es la más aceptada porque permite recoger información sobre los niveles de logros y dificultades que puedan tener los estudiantes para retroalimentarlo o acompañarlo permanentemente en el desarrollo de sus actividades.

La educación en entornos virtual permite la interacción entre el docente y los estudiantes en un ambiente virtual y digital haciendo uso de las TIC en la participación enfocados en la interacción con las nuevas tecnologías.

En el 2020, a causa del Covid-19 se dio un cambio de escenario pasando de las aulas presenciales a las virtuales, generando la curiosidad, interés y motivación en desarrollar sus actividades; sin embargo, en algunos casos hubo dificultad ante la carencia de conectividad y equipos apropiados para el desarrollo de las clases.

Dicha situación provocó el estrés y la deserción de los estudiantes ya que no pudieron alcanzar el nivel del logro de sus aprendizajes; por lo que, los docentes se vieron a adoptar nuevas formas de enseñanzas en un nuevo escenario como el uso del WhatsApp, aplicativos y programas tecnológicos, entre otros.

La evaluación en entornos virtuales el docente utiliza instrumentos adecuados y pertinentes para recoger información de los avances y las dificultades de los estudiantes para la mejora de los aprendizajes.

 

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