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Conocimiento y actitudes sobre neuromitos en docentes de tres regiones de Ecuador

 

Knowledge and attitudes about neuromyths in teachers from three regions of Ecuador

 

Conhecimento e atitudes sobre neuromitos em professores de tr�s regi�es do Equador

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: diego.zapata.b99@gmail.com

 

Ciencias de la Educaci�n

Art�culo de Investigaci�n

 

 

* Recibido: 05 de marzo de 2024 *Aceptado: 28 de abril de 2024 * Publicado: �31 de mayo de 2024

 

        I.            Mag�ster por la Universidad del Pac�fico, Ecuador.

      II.            Mag�ster en la Universidad de Salamanca, Ecuador.

   III.            Mag�ster por la Universidad Internacional del Ecuador, Ecuador.

 

Resumen

Este estudio examina los conocimientos y actitudes de docentes en Ecuador respecto a los neuromitos en la educaci�n, enfoc�ndose en la influencia de estos mitos en las pr�cticas pedag�gicas y su prevalencia entre los educadores. Utilizando un cuestionario basado en el modelo de Dekker et al. (2012) para evaluar creencias sobre el cerebro y su influencia en el aprendizaje, y otro de Rato et al. (2011) para entender las actitudes hacia la neurociencia en la educaci�n, se encuestaron a 391 docentes activos en regiones urbanas y rurales de las �reas costa, sierra y oriente de Ecuador. Los resultados revelan una aceptaci�n significativa de neuromitos, con variaciones en el entendimiento sobre aspectos como el desarrollo cerebral, nutrici�n, ejercicio, y educaci�n. A pesar de un reconocimiento generalizado de la importancia de pr�cticas saludables para el rendimiento cerebral, persisten conceptos err�neos, especialmente en torno a los estilos de aprendizaje y el uso del cerebro. Esto subraya una necesidad urgente de educaci�n continua para desmontar neuromitos y promover un entendimiento m�s riguroso del cerebro en contextos educativos.

Palabras clave: Neuromitos; Neuroeducaci�n; Pr�cticas pedag�gicas; docencia.

 

Abstract

This study examines the knowledge and attitudes of teachers in Ecuador regarding neuromyths in education, focusing on the influence of these myths on pedagogical practices and their prevalence among educators. Using a questionnaire based on the model of Dekker et al. (2012) to evaluate beliefs about the brain and its influence on learning, and another by Rato et al. (2011) to understand attitudes towards neuroscience in education, 391 active teachers in urban and rural regions of the coastal, mountainous and eastern areas of Ecuador were surveyed. The results reveal a significant acceptance of neuromyths, with variations in the understanding of aspects such as brain development, nutrition, exercise, and education. Despite widespread recognition of the importance of healthy practices for brain performance, misconceptions persist, especially around learning styles and brain use. This underscores an urgent need for continuing education to debunk neuromyths and promote a more rigorous understanding of the brain in educational contexts.

Keywords: Neuromyths; Neuroeducation; pedagogical practices; teaching.

 

 

Resumo

Este estudo examina o conhecimento e as atitudes dos professores no Equador em rela��o aos neuromitos na educa��o, concentrando-se na influ�ncia desses mitos nas pr�ticas pedag�gicas e na sua preval�ncia entre os educadores. Utilizando um question�rio baseado no modelo de Dekker et al. (2012) para avaliar cren�as sobre o c�rebro e sua influ�ncia na aprendizagem, e outro de Rato et al. (2011) para compreender as atitudes em rela��o � neuroci�ncia na educa��o, foram entrevistados 391 professores ativos em regi�es urbanas e rurais das �reas costeiras, montanhosas e orientais do Equador. Os resultados revelam uma aceita��o significativa dos neuromitos, com varia��es na compreens�o de aspectos como desenvolvimento cerebral, nutri��o, exerc�cio e educa��o. Apesar do reconhecimento generalizado da import�ncia de pr�ticas saud�veis ​​para o desempenho cerebral, persistem conceitos errados, especialmente em torno dos estilos de aprendizagem e da utiliza��o do c�rebro. Isto sublinha a necessidade urgente de educa��o continuada para desmascarar os neuromitos e promover uma compreens�o mais rigorosa do c�rebro em contextos educacionais.

Palavras-chave: Neuromitos; Neuroeduca��o; pr�ticas pedag�gicas; ensino.

 

Introducci�n

Para el contexto de la presente investigaci�n los neuromitos pueden ser entendidos como aquellos errores que se derivan de una lectura, comprensi�n o cita err�nea de la informaci�n sobre el cerebro y sus funciones en el �mbito de la neuroeducaci�n. Es decir, que por lo general, son creencias err�neas, pero ampliamente aceptadas que contribuyen a pr�cticas que se pueden catalogar como �pseudocient�ficas� en entornos educativos, y todo ello fruto de una mala comprensi�n de la neurociencia (Ulusoy et al., 2023).

Por ejemplo, algunos de los neuromitos m�s generalizados suelen ser: la creencia de que las personas solo utilizan el �10%�, u otro porcentaje similar, de su cerebro; la noci�n de "cerebro izquierdo y derecho"; y los estilos de aprendizaje (Misheva, 2020).

As�, los neuromitos pueden limitar el acceso equitativo a una educaci�n de calidad a ra�z de una serie de inconvenientes: ya sea por las pr�cticas docentes equivocadas, el uso ineficientes de �recursos en sistemas educativos que podr�an estar basando estrategias basadas en neuromitos, repercusiones en los estudiantes en una mala formaci�n a partir de estos y la falta de pensamiento cr�tico son algunos factores que explican el problema de ellos en los entornos educativos (Racionero-Plaza et al., 2023).

Entre las causas que se podr�an explicar sobre la popularidad de los neuromitos puede atribuirse a las diferencias entre la neurociencia y la ciencia de la educaci�n, la inaccesibilidad de los estudios neurocient�ficos para los educadores, la confianza en los informes de los medios de comunicaci�n o las interpretaciones de la pseudociencia, y el atractivo y la facilidad de aplicar explicaciones que parecen estar basadas en pruebas neurocient�ficas. Y tambi�n la presentaci�n de la investigaci�n neurocient�fica por parte de los medios de comunicaci�n a menudo pasa por alto la informaci�n relevante y proporciona informaci�n irrelevante con car�cter de marketing, lo que contribuye a la creaci�n de neuromitos (Shalom, 2022).

Es por ello, tal como lo plantea Howard-Jones (2012), que entre los factores dirimentes para la permanecia de los neuromitos son las condiciones culturales: �como las diferencias en la terminolog�a y el lenguaje utilizados por neurocient�ficos y educadores, pueden estar implicadas en los procesos que transforman el conocimiento cient�fico en ideas autopropagables y enga�osas�.(Howard-Jones, 2014, p. 818). Por ello, al considerar dicho aspecto cultural como uno de los factores centrales hace que el problema en cuesti�n se encuentra en la falta de comprensi�n profunda sobre c�mo estos mitos se perpet�an entre educadores y cu�l es el impacto real a largo plazo en los procesos de aprendizaje de los estudiantes. Aunque se reconoce que los neuromitos pueden llevar a pr�cticas pedag�gicas ineficaces, existe una necesidad de investigaciones m�s detalladas que examinen espec�ficamente c�mo estas creencias afectan. Y a ra�z de ello es que el presente estudio busca entender dichos factores a partir del entendimiento de dos aspectos importantes en torno a los neuromitos: conocimiento y actitudes, en la evaluaci�n de docentes de tres regiones de Ecuador.

 

Metodolog�a

Participantes

Se encuest� a docentes de 391 docentes de diversos centros educativos, en las regiones costa, sierra y oriente de Ecuador. Estos se encontraban trabajando activamente en centros educativos de zonas urbanas y rurales. A algunos de ellos se los contact� de manera virtual para la realizaci�n de las encuestas y a otros de manera presencial en sus lugares de trabajo.

 

Instrumentos

En primer lugar, para la evaluaci�n de los conocimientos sobre neuromitos se utiliz� como base el cuestionario desarrollado por Dekker et al., (2012), el cual ha sido ampliamente usado en otros estudios similares (D�az-V�liz y Kunakov-P�rez, 2023; Jim�nez P�rez y Calzadilla-P�rez, 2021; Rodr�guez Fuentes et al., 2024). Este cuestionario consta de 32 afirmaciones sobre el cerebro y su influencia en el aprendizaje. Se incluyen, por una parte, 15 afirmaciones sobre nueromitos en el �mbito educativo y 17 sobre afirmaciones en general sobre el cerebro, todas ellas se incluyen de manera aleatoria en el cuestionario aplicado. As� frente a cada una de las afirmaciones estas se eval�an como: correctas, incorrectas o no sabe/no contesta. Y en relaci�n con el total de respuestas incorrectas se puede establecer un porcentaje de creencias en neuromitos, y viceversa, a mayor respuestas correctas menos creencia en ellos.

Y por su parte para la evaluaci�n de las actitudes se utiliz� el cuestionario planteado por Rato et al., (2011) el cual tiene como prop�sito comprender c�mo perciben los profesores el papel de la Neurociencia en la Educaci�n y con ello poder identificar posibles expectativas distorsionadas sobre esta. Se organiza en dos secciones la eval�an cuanta importancia atribuyen los encuestados a la comprensi�n de las funciones cerebrales a partir de 8 afirmaciones con opciones de respuesta: Nada importante, Muy importante y No lo s�. La segunda secci�n pregunta sobre �Qu� hace falta para lograr una relaci�n fruct�fera entre neurociencia y educaci�n? A partir de 13 afirmaciones las cuales poseen las opciones de respuesta: De acuerdo, En desacuerdo, No lo se.

 

Resultados

 

Tabla 1. Perfil sociodemogr�fico

 

Los resultados indican que la sierra es la regi�n con la mayor representaci�n de docentes en la muestra, lo que sugiere que una gran parte de la actividad educativa y docente podr�a estar concentrada en esta regi�n. La costa tiene una representaci�n significativa, pero muy inferior a la Sierra, y el Oriente tiene la menor representaci�n.

Los docentes encuestados muestran una amplia distribuci�n de edades, con una concentraci�n significativa en el rango de 30 a 59 a�os (85.56%). Los rangos de edad m�s j�venes (20 a 29 a�os) y m�s mayores (m�s de 69 a�os) est�n poco representados. El promedio de edad se ubic� en los 45.3 a�os.

La distribuci�n de g�nero muestra una ligera mayor�a de Femenino (53.33%) sobre Masculino (46.67%), reflejando una participaci�n relativamente equilibrada de ambos g�neros en la docencia.

Hay una distribuci�n bastante uniforme en los a�os de docencia, con una ligera mayor concentraci�n en los rangos de 0 a 19 a�os (56.67%). Los docentes con m�s de 39 a�os de docencia (2.22%) son los menos representados. Por su parte el promedio de a�os de docencia fue de 17.8 a�os sugiere que, en promedio, los docentes tienen una experiencia considerable en la educaci�n.

 

Tabla 2. Resultados globales del cuestionario de Dekker

Nota: Los grupos y sus porcentajes reflejan una visi�n general de las opiniones de los encuestados sobre distintos temas relacionados con el cerebro y el aprendizaje de acuerdo con las preguntas del cuestionario de Dekker et al.

 

El an�lisis de los resultados agrupados por temas revela percepciones variadas entre los encuestados sobre el cerebro y su funcionamiento, enfatizando un reconocimiento generalizado de la importancia de la nutrici�n, el ejercicio, y pr�cticas educativas en el rendimiento y desarrollo cerebral. Mientras que hay una divisi�n casi equitativa en las creencias relacionadas con el desarrollo cerebral, indicando una mezcla de comprensi�n y malentendidos sobre c�mo funciona y cambia el cerebro a lo largo de la vida, existe un fuerte consenso sobre los beneficios del ejercicio f�sico y mental, as� como de una nutrici�n adecuada para la salud y el rendimiento cerebral. Este consenso subraya una conciencia p�blica sobre la interconexi�n entre el cuerpo y la mente, y refleja la creciente aceptaci�n de la evidencia cient�fica que subraya la importancia de un estilo de vida saludable para el mantenimiento de una funci�n cerebral �ptima.

Sin embargo, el an�lisis tambi�n destaca un �rea de oportunidad para mejorar la educaci�n y disipar mitos persistentes sobre el aprendizaje y el desarrollo cerebral, particularmente en lo que respecta a estilos de aprendizaje y el potencial de recuperaci�n cerebral post-lesi�n. La fuerte creencia en los estilos de aprendizaje preferidos, a pesar de la falta de evidencia cient�fica s�lida que respalde esta noci�n, sugiere la necesidad de una mayor educaci�n y comunicaci�n de conceptos neuropsicol�gicos en un contexto accesible y comprensible para el p�blico general.

 

Tabla 3. Resultados globales del cuestionario de Rato

Nota: Los porcentajes reflejan la frecuencia relativa con la que los encuestados eligieron cada categor�a de respuesta para una pregunta dada, proporcionando una visi�n cuantitativa de las prioridades y �reas de incertidumbre o desacuerdo entre ellos.

 

Estos resultados revelen una distinci�n clara entre las percepciones de importancia en varios aspectos de la educaci�n y el apoyo estudiantil. La unanimidad en valorar como "Muy importante" el dise�o de programas educativos, la aplicaci�n de estrategias did�cticas, y el apoyo a estudiantes con discapacidades, tanto cognitivas como f�sicas/sensoriales y emocionales, destaca una conciencia colectiva sobre la necesidad de adaptar la educaci�n a diversas necesidades estudiantiles. Esta unanimidad subraya el reconocimiento de que una educaci�n inclusiva y bien estructurada es fundamental para el desarrollo acad�mico y personal de los estudiantes.

Por otro lado, las respuestas muestran una notable variabilidad en la percepci�n sobre la integraci�n de la neurociencia en la educaci�n, la formaci�n continua de profesores, y la difusi�n de programas como Brain Gym. La mezcla de respuestas "De acuerdo" y "No lo s�" en estas �reas sugiere una incertidumbre o falta de familiaridad con la aplicaci�n pr�ctica de la neurociencia en entornos educativos, as� como la eficacia de ciertos programas y estrategias. Esto indica una oportunidad para mejorar la comunicaci�n y el entendimiento entre los campos de la neurociencia y la educaci�n, fomentando un di�logo m�s productivo que pueda enriquecer las pr�cticas educativas con base en evidencia cient�fica y aclarar el valor de la formaci�n continua para los educadores.

 

Discusi�n

El estudio sobre los conocimientos y actitudes de los profesores de Ecuador acerca de los neuromitos revel� resultados notables que ponen de relieve la importancia de abordar estos conceptos err�neos en las pr�cticas educativas. Un hallazgo significativo es el reconocimiento general de la importancia de la nutrici�n, el ejercicio y las pr�cticas educativas para mejorar el rendimiento y el desarrollo cerebral (Thomas et al., 2019). Sin embargo, tambi�n hay una divisi�n casi igual en las creencias relacionadas con el desarrollo del cerebro, lo que indica una mezcla de comprensi�n y conceptos err�neos sobre c�mo funciona y evoluciona el cerebro a lo largo de la vida (Bruer, 1997).

Existe un fuerte consenso sobre los beneficios del ejercicio f�sico y mental, as� como de una nutrici�n adecuada, para la salud y el rendimiento del cerebro (Howard-Jones, 2014). Esto refleja una creciente aceptaci�n de las pruebas cient�ficas que subrayan la importancia de un estilo de vida saludable para una funci�n cerebral �ptima (Carey, 2015). La investigaci�n de Howard-Jones (2014) respalda este hallazgo, argumentando que los conocimientos neurocient�ficos pueden contribuir al desarrollo de estrategias de ense�anza m�s eficaces al proporcionar una visi�n de c�mo los estudiantes aprenden y procesan la informaci�n.

En cuanto a las pr�cticas educativas, el estudio encontr� unanimidad en valorar como "Muy importante" el dise�o de los programas educativos, la aplicaci�n de estrategias de ense�anza y el apoyo a los alumnos con discapacidad tal como tambi�n se ejemplifica en la investigaci�n de Prat et al. (2015). Este consenso subraya la conciencia colectiva de la necesidad de adaptar la educaci�n a las diversas necesidades de los estudiantes, haciendo hincapi� en el reconocimiento de que la educaci�n inclusiva y bien estructurada es crucial para el desarrollo acad�mico y personal de los estudiantes (Clement y Lovat, 2012).

Adem�s, el estudio destaca la importancia de la ense�anza individualizada y diferenciada para abordar las diversas necesidades de aprendizaje de los alumnos (Kirschner et al., 2006). Los profesores eficaces son aquellos que pueden adaptar sus m�todos de ense�anza para atender las necesidades �nicas de cada estudiante, en lugar de depender de un enfoque de talla �nica (Nancekivell et al., 2020). La investigaci�n de Hinchley y Levy (1988) respalda este hallazgo, argumentando que los profesores que pueden adaptar sus m�todos de ense�anza a las necesidades �nicas de los estudiantes son m�s eficaces en la promoci�n del aprendizaje.

En este sentido, el estudio destaca la importancia de abordar los neuromitos en las pr�cticas educativas, haciendo hincapi� en la necesidad de un desarrollo profesional continuo, la traducci�n cuidadosa de los hallazgos neurocient�ficos en contextos educativos y la necesidad de una instrucci�n individualizada y diferenciada para abordar las diversas necesidades de aprendizaje de los estudiantes.

 

Conclusiones

En el estudio que examina los conocimientos y actitudes de los educadores en relaci�n con los neuromitos en Ecuador, han surgido conclusiones significativas que ponen de relieve la urgencia de abordar esta cuesti�n en el �mbito educativo. La investigaci�n confirma la persistencia de los neuromitos entre los educadores, lo que plantea un desaf�o significativo para la implementaci�n de pr�cticas pedag�gicas basadas en la evidencia. Esta persistencia sugiere no s�lo una brecha entre la neurociencia y la educaci�n en t�rminos de transferencia y aplicaci�n de conocimientos, sino tambi�n la influencia de los medios de comunicaci�n y de fuentes no acad�micas en la formaci�n de las creencias de los educadores. Por lo tanto, es esencial desarrollar estrategias eficaces para difundir informaci�n neurocient�fica actualizada y precisa entre los educadores.

La elevada aceptaci�n de los neuromitos, tal y como revela el cuestionario de Dekker, indica la necesidad de reforzar la formaci�n inicial y continua del profesorado en �reas relacionadas con la neuroeducaci�n. Es crucial que los programas de formaci�n del profesorado incorporen m�dulos espec�ficos dirigidos a desmontar los neuromitos y a promover una comprensi�n rigurosa del cerebro humano y su relaci�n con los procesos de aprendizaje. La colaboraci�n interdisciplinar entre neurocient�ficos y educadores puede ser un enfoque fruct�fero para desarrollar recursos educativos que incorporen conocimientos neurocient�ficos aplicables en el aula.

Por otro lado, las actitudes positivas hacia la neurociencia, reveladas en el cuestionario de Rato, sugieren una disposici�n y apertura por parte de los educadores para integrar el conocimiento neurocient�fico en la pr�ctica pedag�gica. Sin embargo, la presencia de incertidumbre en ciertas �reas, como la aplicaci�n de estrategias de ense�anza basadas en la neurociencia, subraya la importancia de proporcionar a los educadores informaci�n clara, aplicable y basada en la evidencia. Este enfoque no s�lo ayudar�a a superar los neuromitos, sino que tambi�n potenciar�a el desarrollo profesional de los educadores y, en �ltima instancia, mejorar�a el rendimiento de los alumnos.

Por �ltimo, el estudio subraya la importancia de adoptar un enfoque cr�tico y reflexivo de la informaci�n relacionada con la neurociencia en el contexto educativo. La creaci�n de espacios de di�logo y el fomento de una cultura de investigaci�n y actualizaci�n continuas son elementos clave para el desarrollo de una educaci�n que aproveche de forma responsable y eficaz los avances del conocimiento sobre el cerebro. La colaboraci�n entre instituciones educativas y organizaciones de investigaci�n en neurociencias, as� como la promoci�n de un vocabulario compartido y de proyectos conjuntos, podr�an contribuir significativamente a este objetivo. En conclusi�n, el estudio arroja luz sobre la complejidad de los neuromitos y su impacto en la educaci�n, allanando el camino para una integraci�n consciente y cr�tica de la neurociencia en la ense�anza.

 

Referencias

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� 2024 por los autores. Este art�culo es de acceso abierto y distribuido seg�n los t�rminos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribuci�n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0)

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