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Niveles de intimidad de la bio�tica aplicada a la pr�ctica cl�nica en el Ecuador

 

Levels of intimacy of bioethics applied to practice clinic in Ecuador

 

N�veis de intimidade da bio�tica aplicada � pr�tica

cl�nica no Equador

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: gs.salgado@uta.edu.ec

 

Ciencias de la Educaci�n ���

Art�culo de Investigaci�n

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* Recibido: 23 de julio de 2023 *Aceptado: 25 de agosto de 2023 * Publicado: �09 de septiembre de 2023

 

 

1. Universidad T�cnica de Ambato, Ecuador.

 

Resumen

La siguiente investigaci�n tiene como objetivo analizar la aplicabilidad de la bi�tica en las pr�cticas cl�nicas de ecuador siendo parte importante estudiar la formaci�n que recibe el profesional de la salud desde sus inicios en la universidad; para lo cual se realiz� una revisi�n bibliogr�fica de algunos temas de gran relevancia para el desarrollo de este articulo y que fueron de apoyo para dar las respectivas conclusiones. Asimismo, se utiliz� una investigaci�n de tipo no experimental, descriptivo de corte transversal, siendo la muestra todo el personal del hospital, as� como un grupo de pacientes de 40 personas con diferentes patolog�as. Adema, se tom� en cuenta el criterio de inclusi�n donde los pacientes fueron seleccionados seg�n la edad, siendo solo los mayores a 50 a�os y adem�s el personal de salud que estuvo de acuerdo en participar en la investigaci�n.

Palabras Clave: Bio�tica; Formaci�n educativa; Formaci�n profesional; Pr�ctica cl�nica.

 

Abstract

The following research aims to analyze the applicability of biotics in clinical practices in Ecuador, an important part being to study the training that health professionals receive since their beginnings at the university; For which a bibliographic review was carried out on some topics of great relevance for the development of this article and that were supportive in giving the respective conclusions. Likewise, a non-experimental, descriptive, cross-sectional research was used, with the sample being all hospital staff, as well as a group of patients of 40 people with different pathologies. Additionally, the inclusion criterion was taken into account where patients were selected according to age, with only those over 50 years of age and also health personnel who agreed to participate in the research.

Keywords: Bioethics; educational training; Vocational training; Clinical practice.

 

Resumo

A seguinte pesquisa tem como objetivo analisar a aplicabilidade da bi�tica na pr�tica cl�nica no Equador, sendo uma parte importante estudar a forma��o que os profissionais de sa�de recebem desde o seu in�cio na universidade; Para o qual foi realizada uma revis�o bibliogr�fica sobre alguns temas de grande relev�ncia para o desenvolvimento deste artigo e que serviram de apoio na obten��o das respetivas conclus�es. Da mesma forma, foi utilizada uma pesquisa n�o experimental, descritiva e transversal, tendo como amostra todos os funcion�rios do hospital, bem como um grupo de pacientes de 40 pessoas com diferentes patologias. Al�m disso, foi levado em considera��o o crit�rio de inclus�o onde os pacientes foram selecionados de acordo com a idade, sendo apenas considerados os maiores de 50 anos e tamb�m os profissionais de sa�de que aceitaram participar da pesquisa.

Palavras-chave: Bio�tica; Treinamento educacional; Forma��o profissional; Pr�tica cl�nica.

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Introducci�n

Actualmente a nivel mundial se puede afirmar que la medicina, conforme a su naturaleza, es un esfuerzo moral del profesional de la medicina, donde todas las actividades del m�dico est�n encaminadas al tratamiento de las personas, teniendo como objetivo ayudar a devolver la salud a los pacientes, curar sus dolencias y prevenir enfermedades.

Es por ello que se puede hablar de la bio�tica de la cual es una norma muy conocida y que con frecuencia se asocia con los principales dilemas �ticos en ecuador, tales como la eutanasia, el aborto y la reproducci�n asistida entre otros. En este sentido, se puede decir que la inserci�n de la bio�tica en los planes de estudio de todos los programas de formaci�n de trabajadores de la salud es ineludible, ya que se considera una disciplina que se ha integrado recientemente a la pr�ctica m�dica y debe ser adoptada por m�dicos generales, m�dicos de familia y especialistas.

En este orden de ideas se puede decir que es imprescindible entender sus fundamentos, logrando diferentes corrientes pedag�gicas, adem�s de aportar informaci�n y conocimiento desde un aspecto interdisciplinaria sobre temas que ata�en a la pr�ctica m�dica, por lo que los problemas de la pr�ctica m�dica se vuelven cada vez m�s frecuentes.

La bio�tica cl�nica es el estudio interdisciplinario orientado a la toma de decisiones �ticas de los problemas planteados a los diferentes sistemas �ticos. ¹

Como �tica aplicada se centra en los actos de las personas que tienen el objetivo de curar o guarecer. Desde una perspectiva profesional busca esclarecer las consecuencias de las acciones que ocurren en la interacci�n entre pacientes, profesionales y el sistema sanitario. Desde su aparici�n en los a�os sesenta la bio�tica cl�nica ha contribuido a aproximar los principios y normas generales de la �tica a la realidad de las consultas. Para estudiar las decisiones se analiza cada caso, se tiene en cuenta el sistema moral en el que acontece el problema y se utiliza el razonamiento argumentativo. ²

Una de las caracter�sticas que define a los sistemas sanitarios actuales es la diversidad de marcos asistenciales. Son ejemplos el hospital, la atenci�n primaria o los servicios sociosanitarios. Aunque los principios y las normas de la �tica biom�dica son generales, cada marco asistencial tiene unas caracter�sticas propias que caracterizan las relaciones interpersonales entre profesionales y pacientes. Asimismo, cada uno tiene unos objetivos asistenciales que determinan la intervenci�n sanitaria se realiza. ³

 

Metodolog�a:

Los principios de la bio�tica

La reflexi�n bio�tica se ha desarrollado a trav�s de diferentes modelos ³, pero el que m�s �xito ha tenido es el denominado principialista, por estar basado en la definici�n de varios principios que enmarcar�an el contenido fundamental de dicha reflexi�n. La National Commission for the Protection of Human Subjects of Biomedical and Behavioral Research, constituida por mandato del Presidente de los Estados Unidos para estudiar las cuestiones �ticas relacionadas con la investigaci�n biom�dica, publica en 1978 el conocido Informe Belmont. ¹⁸

En una aproximaci�n general, el contenido conceptual de cada uno de los principios ser�a el siguiente:

• Respeto a la autonom�a de las personas: concepto de gran tradici�n pol�tica y filos�fica en Occidente, supone la asunci�n del derecho de los sujetos morales a decidir desde sus propios valores y creencias personales acerca de cualquier intervenci�n que se vaya a realizar sobre su persona. Beauchamp y Childress centran m�s el concepto en torno a las decisiones aut�nomas de las personas, al considerar que no todas las decisiones que toma una persona competente re�nen las condiciones para poder ser consideradas aut�nomas, y que hay situaciones en que una persona considerada incompetente puede participar con un determinado nivel de autonom�a en la toma de decisiones. La concreci�n m�s evidente de este principio es la figura del consentimiento informado, necesario para cualquier intervenci�n, y que va m�s all� de la mera firma previa de un impreso antes de la misma. ¹⁹
• No maleficencia: se trata del principio b�sico de todo sistema moral. Se formula en t�rminos negativos, como prohibici�n de producir, intencionada o imprudentemente, da�o a otros, con un mayor nivel de exigencia que el de la obligaci�n a proporcionar un bien (la no-maleficencia, por ejemplo, obliga hacia todas las personas por igual, mientras que la beneficencia puede tener distintos niveles de obligaci�n: la que existe entre individuos sin relaci�n previa, la que hay entre padres e hijos, la que existe entre profesionales y aquellos a quienes prestan sus servicios, etc.). El contenido del principio de no-maleficencia suele estar amparado por prescripciones penales. ¹⁹
• Beneficencia: se trata del n�cleo constitutivo de la pr�ctica m�dica, la consecuci�n de un beneficio, en t�rminos de salud, para quienes acuden solicitando asistencia sanitaria. No s�lo presenta en s� mismo la problem�tica de definir el bien, lo que es bueno, y de qui�n lo define, sino que su evidente relaci�n con el anterior principio, el de no-maleficencia, hace que se deban valorar en cada caso los equilibrios entre beneficios y riesgos potenciales ante cualquier intervenci�n biom�dica. ²⁰
• Justicia: la conciencia de que todos los seres humanos son iguales en dignidad y derechos hace que, en cada intervenci�n sanitaria, debamos tener claro que ante situaciones iguales actuaremos de una forma similar, y lo haremos de forma diferente ante situaciones distintas, manteniendo siempre abiertas las posiblidades de los dem�s seres humanos. La dificultad proviene de la elecci�n de los criterios de justicia, es decir, de aquellos que guiar�n la valoraci�n de las distintas situaciones (m�rito, capacidad, necesidad, etc.) y la distribuci�n de los diferentes recursos de que dispongamos. En general, en la asistencia sanitaria, y al menos en nuestro entorno europeo, se da m�s importancia al criterio de necesidad, y los recursos sanitarios se entienden dirigidos hacia quienes necesitan de ellos. Los criterios de eficiencia y equidad entrar�n en juego ante la realidad de la limitaci�n de cualquier tipo de recursos. ²⁰

 

La bio�tica en la actualidad

La bio�tica encuentra aplicaci�n en muchas disciplinas y cuestiones humanas. Desde los debates sobre los l�mites de la vida, como el aborto o la eutanasia, a la maternidad subrogada, la asignaci�n de �rganos para trasplantes o el derecho a rechazar la atenci�n m�dica por motivos religiosos. ⁴

La bio�tica es una ciencia que cada vez tiene mayor importancia en la salud y en la formaci�n de profesionales de esta �rea para generar cambios en las actitudes y comportamientos. Tambi�n ayuda en la reflexi�n sobre aquellas circunstancias m�dicas que tiene implicaciones morales y legales. En Ecuador, en el a�o 2013 se cre� la Comisi�n Nacional de Bio�tica en Salud �CNBS� con la finalidad de crear, dise�ar y organizar la bio�tica de la salud y asesorar en aspectos relacionados con la dignidad, derechos, integridad, seguridad y bienestar de las personas y comunidades. ⁵

Por otro lado, en la actualidad existe la Sociedad Ecuatoriana de Bio�tica � SEB � fue fundada en Quito en 2003 como una organizaci�n sin fines de lucro.  Su creaci�n fue motivada por el deseo e inter�s de diversos actores de las organizaciones de la sociedad civil de proporcionar un lugar para el di�logo y el multiculturalismo y poder abordar los conflictos que enfrenta la humanidad como la globalizaci�n, el desarrollo de la investigaci�n m�dico-biol�gica, la biotecnolog�a y el procesamiento de datos, as� como la preocupaci�n por los abusos de los derechos humanos, la destrucci�n de nuestro planeta, los conflictos que ponen en peligro la supervivencia de todas las especies, el desarrollo sostenible, la justicia social, la igualdad y la protecci�n de todas las formas de vida.

La Bio�tica nace como una necesidad urgente de prescribir y normar criterios para problemas generados por el vertiginoso avance de la ciencia y la t�cnica, la urgencia de los problemas bio�ticos ata�en a todos los seres humanos en una sociedad posmodernista que ha permitido que proliferen opciones insuficientemente fundadas y con argumentos d�biles que restringen su validez, anteponiendo en �ltima instancia la relatividad moral o predominando la toma de decisiones con altas cuotas de incertidumbre. ⁷

La bio�tica es una herramienta para la calidad y el respeto de las personas, logrando adem�s mantener la diversidad cultural, aplicando el conocimiento y la �tica en el sistema de salud de ecuador.

En base a este t�pico es importante realizar esta investigaci�n en un hospital de ecuador para estudiar el �nfasis y el reconocimiento del personal de salud hacia los pacientes, considerando que son personas aut�nomas, de las cuales tiene derecho a saber, a expresar opiniones, a tomar decisiones y a participar.

Las personas no s�lo merecen una preparaci�n basada en el conocimiento cient�fico seg�n el progreso tecnol�gico, sino que adem�s debe desarrollar sensibilidad al dolor y un humanismo genuino interesado en el sufrimiento de los pacientes del hospital especializado San Juan de Dios, quito.

Dicho Hospital Especializado en Psiquiatr�a y Cuidados Paliativos, brinda atenci�n a personas con patolog�a mental en los servicios de Psiquiatr�a, Psicogeriatr�a, adicciones y cuidados del paciente al final de la vida, ofreciendo asistencia integral, humanizada y de calidad, inspirados en principios evang�licos y en el carisma de San Juan de Dios, para dar respuesta eficiente a las necesidades y expectativas de nuestros clientes.

Los aportes te�rico-pr�cticos y resultados de esta investigaci�n permitir�n generar conocimientos para practicar y brindar atenci�n a los pacientes, de los cuales deben ser guiados por el cuidado del personal m�dico de esta instituci�n, siendo respetuosos, desarrollando valores fortalecidos y principios �ticos que logren mantener el respeto y la seguridad de los pacientes y sus familias.

 

La salud como instituci�n

Laura Nash (1990) sugiere que todos los directivos comparten ciertos valores: la honestidad, el respeto por lo dem�s y por uno mismo, la familia, el �xito, la formalidad, la equidad y la lealtad. Otros posibles valores son la compasi�n, la abnegaci�n (poner a los dem�s por delante de uno mismo, la humildad, la fe (creer que existe algo bueno y por lo que merece la pena luchar), la esperanza (mantener vivo el deseo del bien y la esperanza en el futuro), la prudencia (tomarse un tiempo para reflexionar sobre las propias acciones y su resultado m�s probable), la templanza (autodominio y moderaci�n en todas las cosas), el valor (o coraje, para hacer lo que crees que debes hacer), la cortes�a, la paciencia, la fidelidad a la palabra dada, el respeto por los derechos de los dem�s y la obediencia de la ley. Muchos de estos valores quedan resumidos en el juramento hipocr�tico que deben realizar todos los nuevos doctores: Ante todo, no hacer da�o conscientemente. ⁸

Por tanto, las instituciones de salud tienen una raz�n de ser y de funcionar, donde la salud humana es el principal objetivo y que adem�s constituye una de las condiciones b�sicas de la calidad de vida de los seres humanos y sus sociedades, sin ir m�s all� de las normas morales. En este sentido, los principales problemas de la organizaci�n de los servicios de salud en los hospitales, desde una perspectiva �tica, se pueden decir que la cobertura limitada significa que las necesidades de salud de la poblaci�n no pueden satisfacerse plenamente en t�rminos de accesibilidad, integralidad y calidad. Consider�ndose que la asignaci�n y el uso de los recursos son insuficientes e injustos, lo que genera mucho desperdicio.

El papel de la administraci�n y de la econom�a de la salud no es gastar menos en ello, sino gastar mejor, es decir, obtener los mayores beneficios sociales con menores costos. La responsabilidad �tica de la instituci�n de salud es procurar la calidad en sus servicios, para ofrecerla a quienes los necesiten; donde uno de los factores mayores y decisivos es la actuaci�n �tica de cient�ficos, administradores, t�cnicos y auxiliares. Al actuar cada funcionario, sea cual fuere su importancia y posici�n en el organigrama respectivo, debe tener la convicci�n de que sirve a personas cuya dignidad debe reconocer, cuyos derechos debe respetar y que son la finalidad de su trabajo. Los profesionales de la salud desempe�an un relevante y doble papel: ser guardianes del uso de los recursos y lograr que los pacientes reciban una atenci�n integral y calificada, al mismo tiempo deben considerar el respeto por las personas que est�n a su alrededor (en calidad de enfermos, parientes de �stos, trabajadores de todo rango a sus �rdenes) y la juiciosa aplicaci�n de la autonom�a, la nomal eficencia y la forma individual de la justicia. ⁹

La �tica, la econom�a y la medicina pueden ayudar a comprender y resolver los conflictos de inter�s que pudieran surgir entre m�dicos, pacientes y sociedad en cuanto a aplicaci�n de procedimientos cl�nicos. El directivo debe tratar de ofrecer el mayor grado de bienestar posible a partir de los recursos disponibles y �ste es un objetivo �tico, por cuanto se infiere que es �tico ser eficiente. En toda empresa la �tica es el arte del �xito a 'largo plazo, que supone de una parte el bien propio (en la instituci�n, la eficacia), pero s�lo con respecto a los dem�s (deontolog�a): �tica Empresarial = Eficacia + Deontolog�a, el respeto a los dem�s implica, el respeto a la ley y a los principios b�sicos de la moral universal. ¹⁰

 

Ense�anza de la bi�tica

Uno de los grandes retos que debe enfrentar la ense�anza de la bio�tica es identificar a los alumnos y a los profesionales vinculados a la atenci�n m�dica que sean capaces de generar cambios en actitudes y comportamientos, para ello es indispensable ¹¹:

• Privilegiar la mentalidad cient�fica en la que se basa la bio�tica y las reglas que han emanado de ella, anteponiendo siempre la esencia del servicio sobre los intereses personales y econ�micos del m�dico.
• Valorar la importancia de la bio�tica y dedicarle el tiempo necesario para actualizar los conocimientos requeridos de �tica o bio�tica y su aplicaci�n en las materias cl�nicas.
• Considerar la bio�tica como una materia que fundamenta el conocimiento y el aprendizaje de materias b�sicas como anatom�a, bioqu�mica e histolog�a, por mencionar algunas.
• Reconocer las diferentes corrientes de pensamiento y adoptar la m�s conveniente en la pr�ctica m�dica diaria. ¹¹

Otras actitudes positivas que deben reconocerse son:

• Concientizar el sentido social de la profesi�n, teniendo claras las diferencias para el acceso y el ejercicio profesional m�dico en las diversas instituciones y en los distintos estratos socioecon�micos.
• Identificar y contrarrestar los problemas de la comercializaci�n de la profesi�n.
• Tener curiosidad intelectual en el aprendizaje con una actitud abierta para adentrarse en los conceptos y aplicaci�n de la bio�tica.
• Reconocer los valores que enaltezcan, en el paciente y en la profesi�n, el sentido human�stico al que est� enfocada la bio�tica.
• Reconocer en cada paciente un caso en forma individual, lo anterior de acuerdo con los conceptos de la medicina personalizada. ¹¹

 

La cultura bio�tica y sus valores

En cuanto a la manera de trasmitir la cultura bio�tica y sus valores, podemos decir que a nuestro parecer es esencial acompa�ar a los estudiantes, internos o residentes en la pr�ctica diaria, lo que permite que el aprendizaje se adquiera en los casos cl�nicos cotidianos, pues facilita descubrir la actitud de los pacientes y da la oportunidad a los equipos formados por diferentes grupos de m�dicos de analizar los posibles m�todos de resoluci�n. Insistimos en que esto debe practicarse en casos reales en reuniones colegiadas con conocimientos cient�ficos cl�nicos, gracias a los cuales la bio�tica es una materia aplicable que despierta el inter�s en estudiantes y m�dicos en formaci�n, al mismo tiempo que les permite conocer sus limitaciones y posibilidades.¹²

Para un aprendizaje �ptimo de los alumnos en la pr�ctica de esta materia el cambio de actitud de los profesores es crucial, pues son ellos quienes poseen los conocimientos para fortalecer su ense�anza.¹³

Participar en la formaci�n de m�dicos y en la ense�anza de materias cl�nicas no excluye al docente de fomentar en sus alumnos la voluntad de aplicar los valores �ticos, algunos de �stos son comunes para todos, tomando en cuenta una sociedad democr�tica como en la que vivimos hoy en d�a, pero otros valores tienen que ver directamente con el cuidado de la vida y la salud. En lo que respecta a la bio�tica, es posible evaluar el aprendizaje relacionado a contenidos, pero medir el cambio de actitud se vuelve m�s complicado y m�s dif�cil a�n es garantizar la adquisici�n de valores aplicados de manera reflexiva, por lo que el examen de este aprendizaje no es otro que la vida profesional que hace el trabajo del docente m�s grande y comprometedor.¹⁴

 

Importancia de la �tica cl�nica para el profesional de la salud

Los problemas de �tica cl�nica se han incrementado exponencialmente en las �ltimas d�cadas.17,1 En la pr�ctica cl�nica actual es habitual que existan conflictos �ticos, porque entran en juego los valores de los sanitarios, de los pacientes, de sus allegados, los valores de las instituciones o los de la sociedad. Este aumento de los conflictos �ticos en medicina es una consecuencia inevitable de vivir en sociedades plurales y tolerantes con la diversidad de valores. Por tanto, los problemas de �tica cl�nica son frecuentes por la idiosincrasia de la medicina cl�nica actual, en la que las decisiones no son unidireccionales y los conflictos de valores son comunes. ¹⁵

Si un paciente, por ejemplo, no est� de acuerdo con la decisi�n de su m�dico, el profesional est� ante un conflicto �tico. Adem�s del problema cl�nico, se encuentra con un conflicto de valores que tambi�n tiene que resolver. Se enfrentan �cuidar al paciente� con la �libertad para decidir� del propio paciente. Al problema cl�nico, se a�ade este conflicto �tico. ¹⁶

En un art�culo publicado sobre los conflictos �ticos intrahospitalarios que tienen m�s importancia para los cl�nicos en el entorno espa�ol, figuran entre los primeros lugares aspectos �ticos como los problemas de informaci�n o confidencialidad, la toma de decisiones con pacientes incapaces, el consentimiento informado, los problemas socio-sanitarios, los problemas por desacuerdo con el ingreso o el alta del paciente, los conflictos con los familiares o las diferencias con el paciente sobre su tratamiento (no aceptaci�n del tratamiento o solicitudes no ajustadas a lexartis).¹⁷

 

Materiales y m�todos

La presente investigaci�n fue de tipo no experimental, descriptivo de corte transversal, siendo la muestra todo el personal del hospital, as� como un grupo de pacientes de 40 personas con diferentes patolog�as. Asimismo, se tom� en cuenta el criterio de inclusi�n donde los pacientes fueron seleccionados seg�n la edad, siendo solo los mayores a 50 a�os y adem�s el personal de salud que estuvo de acuerdo en participar en la investigaci�n.

En funci�n a esto se genera una tabla del staff m�dico del hospital

 

 

Tabla 1 Staff de m�dicos del hospital

Especialistas	Cantidad
Psiquiatr�a	3
Geriatr�a	2
Medicina Interna	1
Psicolog�a	5
Nutricionista	1
Psicorehabilitaci�n	2
Terapia f�sica y respiratoria	3
Terapia ocupacional	2

Gr�fico 1 Staff de m�dicos del hospital

 

 

Seg�n los resultados de este grafico se puede decir que el �rea de mayor cantidad de especialistas es sin duda psicolog�a con un 25%, seguido de psiquiatr�a y terapia y respiratoria con un 16% , esto se debe a que las aportaciones de la psicolog�a son m�ltiples y variadas para el paciente, dado que la psicolog�a estudia la conducta de las personas en su conjunto, las utilidades que se derivan del conocimiento adquirido por esta ciencia se pueden aplicar a muchos campos, asimismo estas �rea son de gran ayuda al personal m�dico en general de este hospital, considerando la importancia de la �obtenci�n de conocimientos sobre procesos como la percepci�n, la memoria o el razonamiento, que influyen en cualquier tipo de comportamiento humano.

De acuerdo con la Asociaci�n Americana de Psicolog�a (APA), la psicolog�a es una ciencia que estudia el comportamiento y los procesos mentales de las personas. Y, por su parte, los psic�logos son especialistas que, por su capacidad y conocimientos, trabajan con psiquiatras, soci�logos, empresarios, docentes y muchos otros profesionales m�s^{. 21}

 

Caracter�sticas de conocimiento y pr�ctica de los profesionales con respecto a bio�tica.

Grafica 2: Distribuci�n del personal de salud de acuerdo a los conocimientos y pr�cticas de los profesionales con respecto a bio�tica.

 

 

El 24% del personal entrevistado expresa no haber realizado alg�n curso, taller de bio�tica durante sus pr�cticas profesionales, mientras que el 8% indica nunca haber realizado una pr�ctica sobre este tema, por otro lado, el 32% informo que durante sus estudios universitarios no recibi� ninguna informaci�n de este tema tan importante, mientras que por el contrario el 18% si logro recibir dicha informaci�n. En consecuencia, se puede decir que la ense�anza de la bio�tica en el personal m�dico es viable, desde la interdisciplinariedad, en la construcci�n del pensamiento cr�tico, logrando reivindicar los valores humanos y la valoraci�n de oportunidades, generando as� acciones que direccionen metas sostenibles y sustentables en las diversas �reas del hospital.

 

Conclusi�n

La relevancia que tiene la bio�tica en el �rea de la salud como norma que muestra el reconocimiento acad�mico que obtuvo el especialista en medicina y que adem�s en la actualidad existen especializaciones, maestr�as y doctorados en bio�tica,� y que organizaciones nacionales han comenzado a conformar comit�s de bio�tica, concretamente en el campo m�dico; donde se han llevado a cabo congresos, jornadas, entre otros, a todos los niveles, que indican el inter�s mundial de la disciplina en todas las ramas de la ciencia, enfatizando su papel como br�jula en respuesta al desarrollo cient�fico y al cambio social.

En consecuencia, la bio�tica aporta instrumentos para abordar los avances tecnol�gicos, utilizarlos al servicio de la humanidad con fines humanitarios importantes y establecer est�ndares de investigaci�n cient�fica que enfaticen el uso de los recursos naturales en el desarrollo sostenible. En definitiva, esto se puede lograr a trav�s de profesionales con s�lida �tica y moral para formar personas, egresados ​​de instituciones universitarias con pensamiento bio�tico, para contribuir a la transformaci�n de la social.

 

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