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Rasgos de personalidad en personas con tatuajes de 20 a 30 a�os de edad en la ciudad de Quito en el a�o 2023

 

Personality traits in people with tattoos from 20 to 30 years of age in the city of Quito in the year 2023

 

Tra�os de personalidade em pessoas com tatuagens de 20 a 30 anos na cidade de Quito no ano de 2023

 

		Paulina Estefan�a Campos-Ruiz III pcamposr@est.ups.edu.ec https://orcid.org/0009-0009-2098-6974 ����

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: sproanoe@est.ups.edu.ec

 

 

Ciencias T�cnica y Aplicadas ���

Art�culo de Investigaci�n

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* Recibido: 10 de junio de 2023 *Aceptado: 18 de julio de 2023 * Publicado: �17 de agosto de 2023

 

1. Estudiante de la Universidad Polit�cnica Salesiana, Quito, Ecuador.
2. Docente de la Universidad Polit�cnica Salesiana, Doctorando en Psicolog�a, MSc Psicolog�a Forense, Psic�logo Cl�nico, Quito, Ecuador.
3. Estudiante de la Universidad Polit�cnica Salesiana, Quito, Ecuador.������ �

Resumen

El presente trabajo de investigaci�n centr� su objeto de estudio en los rasgos de personalidad predominantes en las personas que tienen tatuajes, desde la perspectiva del modelo integrativo focalizado en la personalidad, considerando a la personalidad como un resultado de varios factores que intervienen en la vida de cada persona, siendo el tatuaje nuestro objetivo en este caso. La poblaci�n participante fue un total de 50 j�venes de entre 20 y 30 a�os que viven en la ciudad de Quito. La metodolog�a utilizada fue cuantitativa y descriptiva, ya que se realiz� la recolecci�n de datos mediante el test SEAPsI. El test SEAPsI cuenta con cien preguntas, divididas en diez secciones con diez preguntas cada una, estas secciones corresponden a cada tipo de personalidad reflejado en los resultados. Se obtuvo una predominancia de los rasgos anac�stico (48%) e histrionico (48%), siendo una prevalencia del rasgo histrionico en las mujeres con un 40% y anac�stico en los varones, tambi�n con un 40%. El estudio presente busco establecer una investigaci�n que pueda abrir futuros estudios dirigidos a la personalidad relacionada al tatuaje.

Palabras clave: rasgos de personalidad; tatuaje; modelo integrativo.

 

Abstract

The present research work focused its object of study on the predominant personality traits in people who have tattoos, from the perspective of the integrative model focused on personality, considering personality as a result of several factors that intervene in the life of each person, being the tattoo our objective in this case. The participating population was a total of 50 young people between the ages of 20 and 30 who live in the city of Quito. The methodology used was quantitative and descriptive, since data collection was carried out using the SEAPsI test. The SEAPsI test has one hundred questions, divided into ten sections with ten questions each, these sections correspond to each type of personality reflected in the results. A predominance of the anacastic (48%) and histrionic (48%) traits was obtained, with a prevalence of the histrionic trait in women with 40% and anacastic in men, also with 40%. The present study seeks to establish an investigation that can open future studies directed to the personality related to the tattoo.

Keywords: personality traits; tattoo; integrative model.

 

Resumo

O presente trabalho de investiga��o centrou o seu objeto de estudo nos tra�os de personalidade predominantes nas pessoas que possuem tatuagens, na perspetiva do modelo integrativo centrado na personalidade, considerando a personalidade como resultado de v�rios fatores que interv�m na vida de cada pessoa, sendo o tattoo nosso objetivo neste caso. A popula��o participante foi um total de 50 jovens entre 20 e 30 anos que vivem na cidade de Quito. A metodologia utilizada foi quantitativa e descritiva, pois a coleta de dados foi realizada por meio do teste SEAPsI. O teste SEAPsI possui cem quest�es, divididas em dez se��es com dez quest�es cada, estas se��es correspondem a cada tipo de personalidade refletida nos resultados. Obteve-se predom�nio dos tra�os anac�sticos (48%) e histri�nicos (48%), com preval�ncia do tra�o histri�nico nas mulheres com 40% e anac�stico nos homens, tamb�m com 40%. O presente estudo busca estabelecer uma investiga��o que possa abrir estudos futuros direcionados � personalidade relacionada � tatuagem.

Palavras-chave: tra�os de personalidade; tatuagem; modelo integrativo.

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Introducci�n

La presente investigaci�n se desarroll� con el objetivo principal fue identificar los rasgos de personalidad de las personas tatuadas de entre 20 y 30 a�os en la ciudad de Quito en el a�o 2023. De la misma manera, se propuso desarrollar objetivos espec�ficos, en los cuales se contempla el an�lisis de variables mediadoras como es el caso de la personalidad en personas con tatuajes.

Se complet� la revisi�n bibliogr�fica correspondiente, considerando los aspectos m�s relevantes de la variable de investigaci�n principal. A su vez, se realiz� una descripci�n de las causas y consecuencias, modelos explicativos, nivel de prevalencia y definici�n de variables asociadas.

En segundo lugar, se procedi� a detallar los aspectos correspondientes a la metodolog�a, espec�ficamente los objetivos de la investigaci�n, tipo y dise�o de investigaci�n empleados se enuncian y describen los instrumentos de recolecci�n de informaci�n, y finalmente los aspectos �ticos.

En tercer lugar, se encuentran los resultados obtenidos, en los cuales se da cumplimiento a los objetivos. Se presentan los gr�ficos de cada uno de los instrumentos empleados. Finalmente, se desarrolla la discusi�n donde los resultados son contrastados con los obtenidos en otras investigaciones.

En �ltima instancia se presentan las conclusiones y recomendaciones necesarias para la realizaci�n de futuras investigaciones, tomando como base las dificultades experimentadas en la presente.

 

Personalidad

La personalidad determina varios factores que se manifiestan en la manera como se desenvuelve un ser humano en su entorno, con las dem�s personas y con su mundo interno, as� mismo, los contextos en los que se desarrolla una persona pueden ser desde su herencia gen�tica hasta el medio social en el que ha vivido, todos estos constituyentes ser�n tomados en cuenta en el estudio de la personalidad seg�n el enfoque que marcar� el camino de esta investigaci�n. Desde el enfoque integrativo se puede entender a la personalidad como �una estructura interna formada por factores biol�gicos, psicol�gicos y sociales que se encuentran en continua interacci�n; esta interacci�n hace que cada ser humano desarrolle distintas maneras de pensar, percibir, actuar, y de interaccionarse con los dem�s� (Rodas, 2015, p 25).

El desarrollo de la personalidad est� marcado por varias etapas en el individuo, partiendo desde los a�os m�s tempranos donde se forma, y a lo largo del ciclo de vida con las experiencias que se viven. esta a su vez presenta una organizaci�n y jerarquizaci�n de varios factores psicol�gicos, seg�n Dom�nguez, (1999) �Estos contenidos se distinguen por la estrecha unidad de elementos cognitivos y afectivos, caracter�stica que posibilita su participaci�n efectiva en el proceso de regulaci�n del comportamiento� (p. 48).

Las esferas que rodean el diario vivir de los seres humanos aportan de diferentes maneras a la personalidad del sujeto formado una unidad din�mica que converge de cada una de estos elementos mencionados, esta personalidad se manifiesta en las personas a trav�s de rasgos que predominan sobre otros y dan la particularidad de cada sujeto. �La definici�n de personalidad trasmite un sentido de coherencia y continuidad a las caracter�sticas del individuo� (Balarezo, 2015, p3).

La personalidad ha sido definida de diferentes maneras: para Allport (1937) es definida como �la integraci�n de todos los rasgos y caracter�sticas del individuo que determinan una forma de comportarse� (Monta�o, Palacios, Gantiva, 2009, p 81). En cambio, para Freud (1958) se define como � Las fuerzas psicol�gicas inconscientes que afectan en forma poderosa el comportamiento, estas se originan en las emociones de la ni�ez y su influencia contin�a durante toda la vida �(Rodas, 2015, p 7) Para Erickson (1968) �la personalidad se desarrolla de acuerdo con los pasos determinados en la preparaci�n del organismo humano para estar consciente de, interactuar con un radio amplio de individuos significativos e instituciones� (Rodas, 2015, p 7). Rogers (1983) relacionaba la personalidad con �la conducta que es exquisitamente racional, avanza con una complejidad sutil y ordena hacia las metas que el organismo intenta alcanza� (Rodas, 2015, p 7) En 1992, Herrera y Ram�rez definen a la personalidad como � combinaci�n de factores o rasgos biol�gicos, f�sicos, ps�quicos, y sociales que hacen a cada ser humano �nico e irrepetible y que determina su forma de ser y actuar� (Rodas, 2015, p 7) Estas definiciones sobre la personalidad han aterrizado en diferentes perspectivas te�ricas de las cuales se tratar� a continuaci�n.

 

Perspectivas te�ricas de la personalidad

Existen diversas teor�as de la personalidad que buscan explicar c�mo se desarrolla y se manifiesta la personalidad de un individuo. Algunas de estas teor�as se enfocan en aspectos biol�gicos y gen�ticos, mientras que otras se centran en factores ambientales y de aprendizaje. Tambi�n hay teor�as que se basan en la estructura de la mente y la forma en que se procesa la informaci�n. Cada teor�a ofrece una perspectiva �nica y valiosa para entender la complejidad de la personalidad humana.

 

Teor�a psicodin�mica de la personalidad

La teor�a psicoanal�tica se basa en la idea de que la personalidad est� influenciada por procesos inconscientes y conflictos internos. Correspondiente a la siguiente teor�a, la personalidad se compone de 3 partes: el yo, el supery� y el ello. El yo es la secci�n consciente y racional de la personalidad, el supery� es la secci�n moral y �tica, y ello es la secci�n instintiva y primitiva.

La teor�a psicoanal�tica tambi�n sostiene que la personalidad se desarrolla a trav�s de diferentes etapas, desde la infancia hasta la edad adulta, y que las experiencias tempranas pueden tener un impacto duradero en la personalidad de un individuo. Las cinco etapas psicosexuales son: 1. Etapa oral: desde el nacimiento hasta los 18 meses. "El ni�o obtiene placer a trav�s de succionar el pecho de la madre y masticar los alimentos meses m�s tardes" (Monta�o. 2009, p 88).

Los ni�os que obtienen buena gratificaci�n durante esta etapa tienden a ser adultos optimistas, cr�dulos y confiables, mientras que los que no son satisfactoriamente gratificados tienden a ser pesimistas, sarc�sticos, discutidores y hostiles. 2. Etapa anal: de los 18 meses a los 3 a�os aproximadamente. "En esta etapa el placer del ni�o est� concentrado en el ano y lo experimenta a partir de la expulsi�n y retenci�n de heces fecales". (Monta�o. 2009, p 88)

Los hijos de padres estrictos en el entrenamiento de control de esf�nteres tienden a ser autodestructivos, obstinados, mezquinos y excesivamente ordenados durante la edad adulta. 3. Etapa f�lica: de los 3 a los 6 a�os. "Es este el momento en que los ni�os empiezan a descubrir sus genitales, entonces se apegan mucho m�s al progenitor del sexo contrario mientras que experimentan sentimientos de rivalidad con el progenitor del mismo sexo" (Monta�o. 2009 . p 88).

Las personas que no reciben suficiente gratificaci�n durante esta etapa tienden a mostrarse como ego�stas, vanidosos, con baja autoestima, t�midos y con sentimientos de minusval�a durante la edad adulta. 4. Etapa de latencia: de los 6 hasta los 12 o 13 a�os. "En esta etapa el inter�s por el sexo disminuye y los ni�os pueden jugar con los otros ni�os del mismo sexo sin experimentar ninguna dificultad" (Monta�o. 2009. p 89).

 

Teor�a fenomenol�gica de la personalidad

Seg�n la teor�a fenomenol�gica de la personalidad, la personalidad se construye a trav�s de la experiencia y la interacci�n del individuo con su entorno. La motivaci�n del ser humano es positiva y busca alcanzar metas que tengan un componente ben�fico. La persona es responsable de sus propias acciones y de las consecuencias que le sobrevienen. Monta�o (2009) menciona que, �Carl Rogers, uno de los te�ricos importantes de esta comprensi�n de la personalidad, consider� que los seres humanos construyen su personalidad cuando se ponen al servicio de metas positivas� (p92).

La persona desde que nace viene con una serie de capacidades y potenciales los cuales tiene que seguir cultivando a trav�s de la adquisici�n de nuevas destrezas. La teor�a fenomenol�gica de la personalidad se enfoca en la motivaci�n positiva y en el desarrollo de la persona a lo largo de su vida.

 

Teor�a de los rasgos

La teor�a de los rasgos de la personalidad sostiene que la personalidad est� compuesta por una serie de rasgos o caracter�sticas que son relativamente estables y consistentes a lo largo del tiempo y en diferentes situaciones. Seg�n Monta�o (2009), "los rasgos son caracter�sticas relativamente estables que describen la forma en que una persona se comporta, piensa y siente" (p 93). La teor�a de los rasgos se enfoca en la identificaci�n y descripci�n de los rasgos que componen la personalidad de un individuo, y sugiere que los rasgos son relativamente estables y consistentes a lo largo del tiempo y en diferentes situaciones. Los rasgos pueden ser medidos y evaluados a trav�s de diferentes instrumentos, como cuestionarios y entrevistas.

 

Teor�a conductual de la personalidad

La teor�a conductual de la personalidad sostiene que la conducta de una persona es el resultado de las contingencias ambientales y del aprendizaje. Seg�n Monta�o (2009) �la personalidad se forma a trav�s de la adquisici�n de patrones de conducta que son reforzados o castigados por el ambiente� (p.96) En otras palabras, la personalidad se entiende como un conjunto de respuestas aprendidas a est�mulos espec�ficos del ambiente. La teor�a conductual de la personalidad se enfoca en la observaci�n y medici�n de la conducta observable, y no en procesos internos como los pensamientos o las emociones. Los te�ricos conductuales creen que la conducta puede ser modificada a trav�s del aprendizaje y la manipulaci�n del ambiente.

 

Teor�a cognitiva de la personalidad

La teor�a cognitiva no tiene una definici�n �nica de personalidad, pero en general se entiende que la personalidad es el resultado de la interacci�n entre los procesos cognitivos (como la percepci�n, la memoria, el pensamiento y la atenci�n) y las experiencias y situaciones que enfrenta una persona a lo largo de su vida. Seg�n Monta�o (2009) �la personalidad se construye a trav�s de la interpretaci�n que la persona hace de su entorno y de s� misma, y puede cambiar a medida que cambian las experiencias y las interpretaciones� (p 97).

Adem�s, la teor�a cognitiva destaca la importancia de los esquemas cognitivos, que son estructuras mentales que organizan la informaci�n y las experiencias, y que influyen en la forma en que la persona percibe, interpreta y recuerda la informaci�n. En resumen, para la teor�a cognitiva, la personalidad es un constructo complejo que se construye a trav�s de la interacci�n entre los procesos cognitivos y las experiencias de la persona.

 

 

Modelo integrativo focalizado en la personalidad

El enfoque integrativo en la teor�a de la personalidad busca integrar diferentes teor�as y enfoques existentes sobre la personalidad, con el objetivo de elaborar un modelo amplio y consensuado que permita comprender la complejidad de este constructo.

Este enfoque reconoce que la personalidad es un constructo complejo que se construye a trav�s de la interacci�n de m�ltiples factores, tanto internos como externos, y que se desarrolla a lo largo del tiempo. La personalidad en la teor�a integrativa se define como un conjunto de caracter�sticas psicol�gicas que influyen en la forma en que una persona percibe, piensa, siente y se comporta en diferentes situaciones. Estas caracter�sticas se construyen a trav�s de la interacci�n de m�ltiples factores, como la gen�tica, el ambiente, la cultura, la educaci�n, las experiencias y las interpretaciones que la persona hace de ellas. La teor�a integrativa de la personalidad propone la identificaci�n de los factores o facetas de las grandes dimensiones de la personalidad, y se enfoca en la identificaci�n de los rasgos que son comunes a todas las teor�as de la personalidad. Para (Balarezo, 2015) la personalidad es �una estructura interna formada por factores biol�gicos, psicol�gicos y sociales que se encuentran en continua interacci�n; esta hace que cada ser humano desarrolle distintas maneras de pensar, percibir, actuar y de interrelacionarse con los dem�s� (p. 178)

Esta teor�a reconoce la importancia de los factores internos y externos en la construcci�n de la personalidad, y destaca la importancia de considerar la evoluci�n de la persona a lo largo del tiempo.

La teor�a integrativa de la personalidad busca integrar diferentes teor�as y enfoques existentes sobre la personalidad, con el objetivo de elaborar un modelo amplio y consensuado que permita comprender la complejidad de este constructo. La personalidad en esta teor�a se define como un conjunto de caracter�sticas psicol�gicas que se construyen a trav�s de la interacci�n de m�ltiples factores, y se enfoca en la identificaci�n de los rasgos que son comunes a todas las teor�as de la personalidad.

El modelo integrativo enfocado en la personalidad converge de una base epist�mica y te�rica del constructivismo moderado, una corriente que tiene una concepci�n de la persona como un ser integral con una personalidad compuesta de diferentes �mbitos a lo largo de su ciclo de vida, como menciona Balarezo (2015) �La percepci�n de cada individuo como ser humano con caracter�sticas propias, biol�gicas y sociales que estructuran su psiquismo� (p178).

De esta manera la personalidad desemboca de una serie de procesos que cada sujeto va atravesando en su trayecto de vida, desde su estructura f�sica hasta las experiencias sociales, incluyendo las manifestaciones psicol�gicas y cognitivas que atraviesan al sujeto. A pesar de ello, existen cualidades que son parecidas entre las personas. �Es por ello que toma como ejes b�sicos del comportamiento humano la cognici�n, la afectividad, la conducta y las relaciones interpersonales. Dado que estos componentes son generales para todos los sujetos, dichas caracter�sticas est�n presentes en todas las personalidades� (Rodas, 2015, p26).

 

Tatuaje

El tatuaje, al ser una modificaci�n corporal muy representativa y duradera en la piel, ha acompa�ado al ser humano en diferentes etapas de su existencia, seg�n (Mu�iz, M. 2019) �con los �ltimos hallazgos, los primeros tatuajes que existieron en la historia de la humanidad se sit�an en la �poca del neol�tico hace 5300 a�os� (p5). Lo que quiere decir que el tatuaje ha estado impregnado en las civilizaciones desde hace mucho tiempo atr�s, por lo tanto, tiene gran influencia en la composici�n psicosocial y cultural de gran parte de la humanidad.

El tatuaje es una pr�ctica que ha existido en diferentes culturas a lo largo de la historia. Se han encontrado evidencias de tatuajes en momias egipcias, en cuerpos congelados de la Edad del Hielo y en restos arqueol�gicos de culturas precolombinas. En algunas culturas, el tatuaje se utilizaba como un rito de iniciaci�n o como una forma de identificaci�n tribal. En otras, se consideraba un s�mbolo de estatus social o religioso. A lo largo del tiempo, el tatuaje ha evolucionado y se ha convertido en una forma de expresi�n art�stica y personal. En la actualidad, el tatuaje es una pr�ctica com�n en muchas partes del mundo y su popularidad sigue creciendo. Los dise�os y estilos son cada vez m�s variados y complejos, lo que refleja la creatividad e imaginaci�n de los artistas del tatuaje. Adem�s, el tatuaje se ha convertido en una forma de expresi�n personal para muchas personas, ya que les permite plasmar sus ideas, sentimientos o creencias en su piel. A pesar de que todav�a hay ciertos estigmas asociados al tatuaje en algunas culturas o entornos sociales, cada vez son m�s las personas que ven el tatuaje como una forma leg�tima y respetable de arte corporal.

Las motivaciones que pueda tener cada persona para realizarse un tatuaje pueden variar mucho dependiendo del contexto, mentalidad y significado sobre lo que es tatuarse, por lo que, la personalidad de cada individuo puede verse influenciada por esta manifestaci�n art�stica sobre la piel. Como menciona (Diaz, 2022) �Las sacerdotisas egipcias eran tatuadas para atraer protecci�n y fecundidad. La nobleza tracia se distingu�a a s� misma marcando su piel. Los griegos y los romanos marcaban a los esclavos como s�mbolo de posesi�n� (p 9).

Cabe mencionar que la significaci�n social del tatuaje, en cada ubicaci�n hist�rica, tambi�n ser� de car�cter distinto dependiendo el contexto que viva la sociedad. �Algunos estigmas que exist�an entonces se han ido disipando con el tiempo. No obstante, actualmente contin�an habiendo ciertos estereotipos relacionados con las personas que defienden y fomentan este tipo de arte� (Mu�iz, 2019).

El tatuaje es una forma de arte y expresi�n personal que ha evolucionado a lo largo del tiempo. Aunque en el pasado se consideraba un estigma social, hoy en d�a es una pr�ctica com�n entre los j�venes que buscan transmitir sus ideas y su forma de ver la vida a trav�s de su cuerpo. Los tatuajes pueden tener diferentes significados para cada persona, y son una forma poderosa de comunicaci�n visual y contextual. Seg�n (Priego, 2022)� la idea del uso del cuerpo humano como medio de expresi�n de experiencias y/o pensamientos personales� (p7).

A trav�s del tatuaje, las personas pueden expresar su individualidad y creatividad. Cada dise�o es �nico y personalizado, lo que permite a los individuos contar su propia historia a trav�s de su piel. Adem�s, el proceso de tatuarse puede ser terap�utico para algunas personas, ya que les permite conectarse con sus emociones y sentimientos m�s profundos.

A pesar de la creciente aceptaci�n social del tatuaje, todav�a hay cierta parte de la sociedad que lo rechaza. Por esta raz�n, es importante fomentar una cultura de respeto y aceptaci�n hacia los tatuajes y las personas que los llevan. Debemos aprender a apreciarlos como parte de la diversidad humana y entender que cada persona tiene derecho a elegir su discurso individual a trav�s del tatuaje.

El cuerpo humano puede considerarse un medio de comunicaci�n a trav�s del tatuaje. Esta pr�ctica nos permite representar qui�nes somos y transmitir nuestras ideas, juicios y formas de ver la vida. El tatuaje es una forma de arte y expresi�n personal que permite a las personas contar su propia historia a trav�s de su piel, y debemos fomentar una cultura de respeto y aceptaci�n hacia esta pr�ctica.

 

 

 

M�todo

La metodol�gica en la que se basa este trabajo de investigaci�n es cuantitativa ya que en una primera etapa de estudio de recolectan datos con base de medici�n num�rica y estad�stica para probar la hip�tesis. Como menciona Monje (2011) �orientada por conceptos emp�ricos medibles, derivados de los conceptos te�ricos con los que se construyen las hip�tesis conceptuales� (p13) Adem�s, es descriptiva ya que busca describir las caracter�sticas de una poblaci�n o un fen�meno, seg�n Guevara (2020) �Se encarga de puntualizar las caracter�sticas de la poblaci�n que est� estudiando� (p166), en este caso los rasgos de personalidad que predominan en las personas con tatuajes de 20 a 30 a�os en la ciudad de Quito.

Al ser una investigaci�n de tipo cuantitativa se espera recopilar los datos estad�sticos necesarios para determinar e interpretar conclusiones reales, con validez investigativa, por esta raz�n se establecer� una organizaci�n de los procesos de la investigaci�n. �Planear una investigaci�n consiste en proyectar el trabajo de acuerdo con una estructura l�gica de decisiones y con una estrategia que oriente la obtenci�n de respuestas adecuadas a los problemas de indagaci�n propuestos� (Monje, 2011, p19)

Luego del primer contacto con el grupo de participantes, donde se haga un acercamiento al tema, se solicitar� la colaboraci�n en la investigaci�n, la investigaci�n tendr� como fuente principal de recolecci�n de datos mediante la aplicaci�n del test SEAPsI. Un instrumento que consta de 100 preguntas en total y se puede aplicar a partir de los 15 a�os de edad. �El Cuestionario de Personalidad SEAPsI, es un instrumento de respuesta selectiva, contiene 10 tipos de personalidades, las mismas que contienen 10 �tems de alternativa de selecci�n. Las frases referidas son expresiones afectivas, cognitivas y comportamentales de cada tipo de personalidad� (Rodas, 2015, p32).

Este test est� dise�ado bajo la corriente del modelo integrativo focalizado en la personalidad, el cual entiende a la psicoterapia como �el m�todo de tratamiento de enfermedades mentales, desajustes emocionales y problemas ps�quicos, por medio de recursos psicol�gicos, sobre todo la palabra, en un marco interaccional positiva entre el paciente y psicoterapeuta� (Balarezo, 2010).

Los objetivos del test SEAPsI son: �Identificar rasgos predominantes en cada tipo de personalidad. Generar un perfil de rasgos de personalidad. Orientar modalidades de intervenci�n terap�utica a partir de la identificaci�n de rasgos. Manejar el cuestionario en el contexto terap�utico� (Rodas, 2015, p32).

El test determina la personalidad en dimensiones y subdimensiones; la dimensi�n afectiva, en esta se destacan la subdimensiones histri�nicas y ciclot�micas. �Las afectivas tienen como caracter�sticas esenciales, expresi�n f�cil de las emociones, acercamiento social c�moda, cogniciones y conductas invadidas por el afecto, extroversi�n con b�squeda de estimulaci�n externa, desinhibici�n y r�pida movilizaci�n de sus sentimientos y comportamientos� (Rodas, 2015, p33). La dimensi�n cognitiva, en esta dimensi�n se enfatizan las subdimensiones ananc�sticas y paranoides. �En los cognitivos prevalecen los juicios, razonamientos y la l�gica en su conducta y en la expresi�n afectiva, los contactos sociales son adherentes en sus cogniciones, afectos y comportamientos� (Rodas, 2015, p33). La dimensi�n comportamental, en esta dimensi�n se destacan las subdimensiones impulsivas y trastorno disocial de la personalidad. �Esta tendencia se expresa por la activaci�n conductual inmediata, sin reparo suficiente en los componentes cognitivos y afectivos. La acci�n en�rgica es su caracter�stica, la misma que aprehende las relaciones interpersonales, los afectos y las cogniciones� (Rodas, 2015, p33). La dimensi�n �d�ficit relacional�, en la cual se enfatizan las subdimensiones Dependientes, Evitativas y Trastorno esquizotipico de la personalidad. �Este grupo tiene una tendencia a la intimidad personal y al retraimiento social con dificultad de expresi�n afectiva externa. Su conducta suele ser meditada y escasa, la cognici�n se desvincula del otro y se retrae hacia s� mismo� (Rodas, 2015, p 33).

La investigaci�n al estudiar un tema que puede resultar sensible en el momento de expresar rasgos de su personalidad y vivencias por parte de los participantes se debe trabajar con mesura y tacto, se debe tomar en cuenta los est�ndares �ticos que rondan la sensibilidad y la informaci�n que comparten los actores principales. Se trabajar� con un consentimiento informado donde los participantes entiendan la libertad que tienen en su participaci�n y la responsabilidad que conlleva con la colaboraci�n en la obtenci�n de informaci�n. En este documento se considera la confidencialidad con la que se trabaja ya que el estudio tiene fines puramente acad�micos que no comprometan la integridad de los participantes. Adem�s, se recalca el sentido de anonimato de la investigaci�n ya que no tiene relevancia la informaci�n personal de los participantes. Tambi�n se menciona el an�lisis de riesgos vs beneficios, donde se trata de equilibrar los posibles resultados de la investigaci�n en donde los participantes vean una respuesta que tenga alguna influencia en sus conocimientos, estilos de vida o percepci�n del tema. De esta manera se establece un trabajo cient�fico respetando los derechos de cada persona implicada en el estudio, como menciona Sandoval (2012) �Respeto por las personas, Beneficencia y Justicia. Estos principios se plantearon para orientar y garantizar que siempre se tenga en cuenta el bienestar de los participantes� (p. 75)

El test que se aplic� cuenta con validez y confiabilidad en su actualizaci�n, respaldada por expertos en el campo. Se ha determinado que la confiabilidad del test es del 0.80, lo que indica que los resultados son consistentes y confiables en su aplicaci�n. El test fue revisado por Silvia Mancheno Dur�n, el cuestionario fue modificado en Quito en 2017.

 

Resultados

En el gr�fico 1 se presenta la distribuci�n del g�nero de los participantes en el estudio, diferenciando entre masculino y femenino. Se puede observar claramente que hay una disparidad en la representaci�n de g�nero, con un mayor n�mero de participantes masculinos, siendo 35 de los 50 participantes hombres, y los 15 participantes restantes son mujeres. Esta diferencia de g�nero puede indicar una tendencia del 70% masculino y el 30% femenino.

 

Gr�fico 1. G�nero de los participantes

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el gr�fico 2 se representa la distribuci�n del estado civil de los participantes. Se puede observar que la mayor�a de los participantes se encuentran en la categor�a de soltero con un 90%, seguida de cerca por la categor�a de uni�n libre con un 8%. Por otro lado, la proporci�n de participantes divorciados es considerablemente menor con un 2%. Estos resultados sugieren que la muestra estudiada est� compuesta principalmente por individuos solteros o en una relaci�n de uni�n libre, con un participante con un divorcio y ning�n participante casado o viudo.

 

Gr�fico 2. Estado civil

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el gr�fico 3 presenta la distribuci�n del grado de formaci�n acad�mica de los participantes en diferentes categor�as. Se observa que el mayor n�mero de participantes se encuentra en el grupo de licenciatura o tecnolog�a, es decir, 34 de los 50 participantes tienen este nivel educativo. A continuaci�n, se encuentra el grupo de bachillerato, que cuenta con 14 participantes. Por otro lado, los grupos de educaci�n secundaria y maestr�a muestran una representaci�n m�nima, con solo un participante en cada uno de ellos. Estos resultados sugieren que la mayor�a de los participantes tienen un grado de formaci�n acad�mica en licenciatura o tecnolog�a con un 66%, seguidos por aquellos con bachillerato con un 30%, mientras que la presencia de participantes con educaci�n secundaria y maestr�a es mucho menos frecuente en la muestra con un 2% cada una.

 

 

 

 

Gr�fico 3. Formaci�n acad�mica

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el gr�fico 4 presenta los resultados del cuestionario SEAPsI aplicado a los 50 participantes, en el cual se observa a los rasgos de personalidad ananc�stico siendo el 28%, y el histri�nico, tambi�n con un 28%, como los rasgos que predominan de entre los dem�s en los participantes. Los 14 participantes que cuentan con el rasgo de personalidad anac�stico suelen demostrar la necesidad de control en las personas donde predomina este rasgo, el tatuaje puede servir para estas personas como una forma de control sobre su cuerpo. Por otro lado, el tatuaje podr�a manifestarse como se�ales de esa lucha interna, al ser personas que se muestran demasiado correctas ante las normas sociales, pero por dentro sufren una frustraci�n por factores que abandonan por encajar como funcional o responsable.

Con respecto a los 14 participantes en los cuales predomina el rasgo de personalidad histri�nico, el tatuaje puede significar una manera llamar la atenci�n de los dem�s o de agregar factores a su vida que puedan impresionar a las dem�s personas o incluso como una manera de encajar en alg�n grupo donde el tatuaje signifique una se�al de pertenencia.

El tipo de personalidad ananc�stico ocasiona un debate interno dentro de la persona ya que este busca siempre encajar en los c�rculos sociales como alguien provechoso, seg�n Brice�o (2016) �se esfuerza por encontrar un lugar en la sociedad que sea responsable y productivo desde el punto de vista de los otros� (p35). Pero, en realidad, la persona solo siente esto como una obligaci�n ocultando su verdadera frustraci�n ante esta imagen falsa que demuestra ante los dem�s, como menciona Brice�o (2016) �se enfrenta a una lucha interna en la cual cuanto mejor es la adaptaci�n, mayores son la ira y el resentimiento que siente por lo renunciado por s� mismo� (p35).

De la misma manera, el control sobre el cuerpo que demuestra el tatuaje se puede manifestar como una caracter�stica de la personalidad anac�stica, de este modo el individuo trata de tomar control sobre su cuerpo desde su decisi�n de modificarlo, como menciona Unzueta, (2003) �el sujeto nace con un organismo, pero no con un cuerpo, el cuerpo se construye y se organiza en la relaci�n con el significante� (p1)

La personalidad histri�nica se caracteriza por una necesidad de obtener la atenci�n de las dem�s personas, por esta raz�n los tatuajes pueden significar una estrategia de seducci�n, seg�n Brice�o (2016) �les gusta ser el centro de atenci�n y cuando lo consiguen aprovechan de la situaci�n� (p33). El tatuaje adem�s sirve como una manera de encajar en diferentes grupos sociales, �dotar al individuo de un sentido de pertenencia a un grupo determinado� (Hern�ndez, 2016, p53).

 

Gr�fico 4. Rasgos predominantes de personalidad

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En el gr�fico 5 presenta los resultados del cuestionario SEAPsI aplicado a los 50 participantes, en el cual se observa al de personalidad ciclot�mico como el rasgo que predomina de entre los dem�s en los participantes. En el gr�fico se observa al rasgo cicl�t�mico secundario que sigue en los resultados con un 28%. Para los 14 participantes donde este rasgo se presenta como el secundario, el tatuaje puede ser una manera de demostrar algo ante las personas que pueden abandonarle, sea un detalle, una se�al de complacencia, etc. El tatuaje tambi�n podr�a manifestarse como una salida o impulso en un momento de inestabilidad emocional de la persona.

Al ser el rasgo secundario que se present� en los participantes, las razones que puedan motivar no ser�n tan influyentes como los rasgos predominantes, no obstante, la naturaleza cambiante e inestable de la personalidad ciclot�mica, se establece como actitudes perfectas para realizarse un tatuaje por impulso, como menciona Brice�o (2016) �son personas espontaneas a las que no les amedrenta nada: buscadores de riesgo y poseedores de un significado diferente de diversi�n� (p40).

Al ser un momento de inestabilidad la persona puede tratar de perpetuar alg�n momento o simplemente hacerlo sin pensar en la consecuencia, seg�n Ulloa (2018) �una manera de perennizar la intensidad de la experiencia vivida como recordatorio al saber que el tatuaje es para siempre� (p60)

 

Gr�fico 5. Rasgos secundarios de personalidad

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Discusi�n

De acuerdo a los resultados, de los 50 participantes que decidieron realizar el cuestionario y colaborar en la investigaci�n, 35 (70%) son de g�nero masculino y 15 (30%) del g�nero femenino. De todos estos j�venes tatuados, el 90% de los participantes son solteros, el 8% viven en uni�n libre y el 2% son divorciado/as. Con respecto a los rangos de edad predomin� el rango de entre 26 y 28 a�os, siendo 16 (32%) participantes que tienen esta edad, luego se encuentra el rango de 23 a 25 a�os con 15 (30%) participantes en este rango de edad. Por otro lado, el rango de edad de 29 a 30 a�os con 10 (20%) participantes. Por �ltimo, el rango de 20 a 22 a�os presenta la menor representaci�n en la muestra siendo 9 (18%) participantes los m�s j�venes. De acuerdo a la formaci�n acad�mica se observa que el mayor n�mero de participantes se encuentra en el grupo de licenciatura o tecnolog�a, es decir, 34 (66%) de los 50 participantes tienen este nivel educativo. A continuaci�n, se encuentra el grupo de bachillerato, que cuenta con 14 (30%) participantes. Por otro lado, los grupos de educaci�n secundaria (2%) y maestr�a (2%) muestran una representaci�n m�nima, con solo un participante en cada uno de ellos. En cuanto a la cantidad de tatuajes se observa que el mayor n�mero de participantes se encuentra en el rango de 1 a 3 tatuajes, lo que indica que 23 (46%) participantes han optado por un n�mero limitado de tatuajes. A continuaci�n, se encuentra el grupo de 15 (30%) participantes que ha realizado entre 4 y 10 tatuajes, adem�s, se identifica un grupo de 7 (14%) participantes con entre 11 y 15 tatuajes, por �ltimo, se encuentra un grupo de 5 (10%) participantes que se han realizado 16 tatuajes o m�s, siendo esta la categor�a con la menor representaci�n en la muestra.

De acuerdo a los rasgos de personalidad bajo el modelo integrativo focalizado en la personalidad, los predominantes en el estudio de acuerdo al g�nero de los participantes fueron; con respecto al g�nero femenino, predomin� el rasgo ananc�stico de la personalidad histrionica con 6 (40%) participantes y la personalidad ananc�stica, tambi�n con 6 (40%) participantes. El rasgo histrionico demuestra una necesidad de llamar la atenci�n a trav�s del tatuaje, como menciona Brice�o (2016) �el estilo histrionico siente temor a ser ignorado y necesita ser el centro de atenci�n de los dem�s� (p33). Con respecto al g�nero masculino, 12 (40%) participantes, obtuvieron en sus resultados el rasgo de personalidad ananc�stico, que tiene como una de sus caracter�sticas un debate interno por la frustraci�n al complacer a los dem�s, demostrado a trav�s del tatuaje, seg�n Brice�o (2016) �se considera al estilo ananc�stico como conflictivo� (p35). En cuanto a los rasgos secundarios, 10 (33%) participantes varones obtuvieron resultados en el rasgo de personalidad ciclot�mico, considerado un rasgo de personalidad impulsivo, una de las razones por las cuales muchas personas se deciden tatuar, como menciona Villacr�s (2016) �Que tal vez en ese momento no les haga pensar con claridad, tatuarse un nombre o algo moment�neo, o algo que no tiene relaci�n verdadera con su interior sino por sus propios impulsos" (p20) , mientras que las 5 (33%) participantes mujeres obtuvieron el rasgo ananc�stico.

Los resultados globales del estudio demuestran al rasgo ananc�stico y al rasgo histrionico como predominantes, con 14 (28%) participantes por cada rasgo. El rasgo histrionico se caracteriza por ser expresivo, el tatuaje es un medio para expresar los sentimientos internos a trav�s de marca de tinta en la piel, seg�n Brice�o (2016) �demuestran abiertamente sus sentimientos, dejando sus emociones a la vista de todo el mundo� (p34). Por otro lado, el rasgo de personalidad ananc�stico se caracteriza por la necesidad de control, el tatuaje al ser un compromiso f�sico se muestra como ese medio de control total sobre el propio cuerpo, como menciona Priego (2022) �por medio de ellos hacen uso de sus cuerpos como instrumento de expresi�n personal� (p3). Con respecto a los rasgos de personalidad secundarios, de los 50 participantes 14 (28%), tuvieron un resultado en el rasgo ciclot�mico, relacionado a la inestabilidad emocional, lo cual puede motivar a realizarse un tatuaje en un impulso, seg�n Brice�o (2016) �su principal caracter�stica es la intensidad y la variabilidad de estados de �nimo� (p 39).

 

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