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Proceso de atenci�n de enfermer�a en reci�n nacidos con sepsis bacteriana, seg�n Virginia Henderson: A prop�sito de un caso

 

Nursing care process in newborns with bacterial sepsis, according to Virginia Henderson: About a case

 

Processo de cuidar de enfermagem em rec�m-nascidos com sepse bacteriana, segundo Virginia Henderson: Sobre um caso

 

		Gladis Del Rocio Mora-Veintimilla III gmora@utmachala.edu.ec https://orcid.org/0000-0002-0616-1425 ���

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: garmijos10@utmachala.edu.ec

 

 

 

Ciencias de la Salud ���

Art�culo de Investigaci�n

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* Recibido: 17 de junio de 2023 *Aceptado: 20 de julio de 2023 * Publicado: �12 de agosto de 2023

 

1. Universidad T�cnica de Machala, Machala, Ecuador.
2. Universidad T�cnica de Machala, Machala, Ecuador.
3. Universidad T�cnica de Machala, Machala, Ecuador.�������

Resumen

Introducci�n: Situaci�n cl�nica derivada de la invasi�n y proliferaci�n de bacterias, virus y hongos en el torrente sangu�neo del reci�n nacido (RN) y que se manifiesta dentro de los primeros 28 d�as de vida, si bien actualmente se tiende a incluir las sepsis diagnosticadas despu�s de esta edad, en RN de muy bajo peso (RNMBP). El hemocultivo positivo confirma la sepsis, y cuando el hemocultivo es negativo, la condici�n se considera como sepsis cl�nica. Objetivo: Describir la atenci�n de enfermer�a en reci�n nacidos con sepsis neonatal basado en la teor�a de Virginia Henderson mediante la revisi�n de art�culos cient�ficos previos para determinar las necesidades b�sicas deficientes en dichos pacientes. Metodolog�a: El presente trabajo es un tipo de estudio descriptivo- cualitativo de investigaci�n, a trav�s de un estudio de caso, con enfoque cl�nico, que se realiz� mediante la revisi�n de la historia cl�nica de la paciente (reci�n nacida). El m�todo utilizado fue el inductivo-deductivo, donde se fundamenta con la b�squeda y recolecci�n de art�culos sobre la enfermedad sepsis neonatal para ejecutar este trabajo de investigaci�n. �Resultados: Se concluye que es de suma importancia evaluar al reci�n nacido de manera inmediata para valorar su estado de salud y sus signos vitales y a su vez emplear un plan de cuidados que le permita al profesional de salud brindar una atenci�n de calidad, con la finalidad de que el paciente obtenga una mejor�a en su salud y bienestar.  

Palabras claves: sepsis neonatal; atenci�n de enfermer�a; reci�n nacidos. 

 

Abstract

Introduction: Clinical situation derived from the invasion and proliferation of bacteria, viruses and fungi in the bloodstream of the newborn (NB) and that manifests itself within the first 28 days of life, although currently it tends to include sepsis diagnosed after of this age, in very low weight newborns (RNMBP). A positive blood culture confirms sepsis, and when the blood culture is negative, the condition is considered clinical sepsis. Objective: To describe nursing care for newborns with neonatal sepsis based on Virginia Henderson's theory by reviewing previous scientific articles to determine the deficient basic needs in these patients. Methodology: This work is a type of descriptive-qualitative research study, through a case study, with a clinical approach, which was carried out by reviewing the patient's (newborn) clinical history. The method used was the inductive-deductive one, where it is based on the search and collection of articles on neonatal sepsis disease to carry out this research work. Results: It is concluded that it is extremely important to evaluate the newborn immediately to assess their state of health and their vital signs and in turn use a care plan that allows the health professional to provide quality care, with the purpose of that the patient obtains an improvement in his health and well-being.

Keywords: neonatal sepsis; nursing care; newly born.

 

Resumo

Introdu��o: Situa��o cl�nica decorrente da invas�o e prolifera��o de bact�rias, v�rus e fungos na corrente sangu�nea do rec�m-nascido (RN) e que se manifesta nos primeiros 28 dias de vida, embora atualmente tenda a incluir sepse diagnosticada ap�s esta idade, em rec�m-nascidos de muito baixo peso (RNMBP). Uma hemocultura positiva confirma a sepse, e quando a hemocultura � negativa, a condi��o � considerada sepse cl�nica. Objetivo: Descrever a assist�ncia de enfermagem ao rec�m-nascido com sepse neonatal com base na teoria de Virginia Henderson, revisando artigos cient�ficos anteriores para determinar as necessidades b�sicas deficientes desses pacientes. Metodologia: Este trabalho � uma pesquisa do tipo descritivo-qualitativa, por meio de um estudo de caso, com abordagem cl�nica, que foi realizada por meio da revis�o da hist�ria cl�nica do paciente (rec�m-nascido). O m�todo utilizado foi o indutivo-dedutivo, onde se baseia na busca e coleta de artigos sobre a doen�a sepse neonatal para realizar este trabalho de pesquisa. Resultados: Conclui-se que � de extrema import�ncia avaliar o rec�m-nascido de imediato para avaliar o seu estado de sa�de e os seus sinais vitais e por sua vez utilizar um plano de cuidados que permita ao profissional de sa�de prestar cuidados de qualidade, com o objetivo de que o paciente obtenha uma melhora em sua sa�de e bem-estar.

Palavras-chave: sepse neonatal; cuidados de enfermagem; rec�m nascidos.

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Introducci�n

La sepsis es una emergencia m�dica que describe la respuesta inmunol�gica sist�mica del cuerpo a un proceso infeccioso que puede conducir a la disfunci�n org�nica y la muerte (Banch�n Alvarado, Camacho Garc�a, & Fern�ndez Saquicela, 2020). La severidad de la sepsis puede variar desde un grado leve de disfunci�n hasta un compromiso circulatorio (choque s�ptico) con alta tasa de mortalidad. Este desenlace puede ser modificado si se realiza un diagn�stico temprano y si se llevan a cabo las medidas terap�uticas necesarias (Laguado Nieto, y otros, 2019).

El t�rmino sepsis fue introducido por Hip�crates en el siglo IV antes de cristo como: un proceso por el cual se descompone la carne y las heridas se infectan. El origen del t�rmino sepsis proviene del griego s�psis, que significa putrefacci�n (Merl�n Mart�nez, Ferrer Aguilar, & Gonz�lez Morel, 2021).

La sepsis neonatal es considerada un s�ndrome cl�nico manifestada como una respuesta inflamatoria que aparece en el reci�n nacido, debido a la invasi�n y proliferaci�n de microorganismos a nivel sangu�neo, cuya sintomatolog�a se presenta tanto local como sist�mica, durante los primeros 28 d�as posteriores al nacimiento e incluso puede presentarse hasta los 90 d�as de vida del neonato. La Organizaci�n Mundial de la Salud refiere que han fallecido aproximadamente 6 millones de reci�n nacidos anualmente, donde el 98% corresponden a pa�ses en desarrollo, y de esto un 70% es causado por sepsis (Barreto Gonz�lez, Baloa Tovar, & Garc�a Le�n, 2020).

La Asociaci�n Espa�ola de Pediatr�a (AEP), se�ala que sepsis neonatal es aquella situaci�n cl�nica derivada de la invasi�n y proliferaci�n de bacterias, hongos o virus en el torrente sangu�neo del reci�n nacido (RN) y que se manifiesta dentro de los primeros 28 d�as de vida, si bien actualmente se tiende a incluir las sepsis diagnosticadas despu�s de esta edad, en reci�n nacidos de muy bajo peso (RNMBP) (Fern�ndez Colomer, L�pez Sastre, Coto Cotallo, Ramos Aparicio, & Ib��ez Fern�ndez, 2008).

A nivel mundial, esta enfermedad est� determinada como la segunda causa de muerte en neonatos.� La tasa de incidencia de sepsis neonatal en el mundo desarrollado se encuentra entre el 0,6 y el 1,2% de todos los nacidos vivos, pero en el mundo en desarrollo puede alcanzar entre el 20 y el 40% (P�rez Morales, Cruz Hern�ndez, Piovet Monz�n, & Jim�nez P�rez, 2021).

En el Reino Unido, la incidencia de SN temprana es de 0.9 casos por 1000 nacidos vivos. En los pa�ses en v�a de desarrollo, la incidencia de SN var�a entre 1-4 eventos por 1000 nacidos vivos. En Egipto se ha reportado que hasta el 50% de los pacientes de UCIN presentan SN. En Sud�frica, se han reportado tasas de fatalidad para la SN temprana y tard�a de hasta 40% y 19.7%, respectivamente, cifras similares a las de otros pa�ses en desarrollo. La incidencia de SN reportada en M�xico es de 160.9 casos por cada 1000 nacidos vivos, en Am�rica del Sur y el Caribe las cifras estuvieron entre 3.59-8.91 casos por cada 1000 nacidos vivos para el 2005. En Colombia en el a�o 2014, se registraron 7.24 muertes neonatales por 1000 nacidos vivos (Cort�s, Fern�ndez Cruz, Beltr�n Z��iga, Narv�ez, & Fonseca Becerra, 2019).

La sepsis neonatal es la segunda causa de mortalidad neonatal en el Per� (21,77%, 2016), luego de la prematuridad (28,47%) (D�vila Aliaga, y otros, 2020). Para 2017, el Ecuador cerr� el registr� de muertes en la poblaci�n infantil menor de un (01) a�o de edad a causas de septicemias con un valor de 0,4%, sin embargo, la sepsis bacteriana en el reci�n nacido se ubic� como segunda causa de enfermedad (Tibanquiza Arreaga, Rodriguez Avil�s, Barrera Rivera, & Cede�o Caballero, 2019).

Por lo tanto, en Ecuador, el Ministerio de Salud P�blica, afirma que la sepsis neonatal es considerada la tercera causa de morbilidad, por lo que se han registrado 5.870 egresos, pero hubieron 217 neonatos fallecidos, 95 reci�n nacidos de sexo femenino y 122 de sexo masculino. En cambio, a nivel de la provincia de El Oro constan 207 neonatos fallecidos, de los cuales 88 fueron de sexo femenino y 119 sexo masculino (Instituto Ecuatoriano de Estadisticas y Censo). 

Dependiendo de la edad de inicio de la enfermedad, la sepsis neonatal se divide en sepsis neonatal temprana o sepsis de inicio tard�o. La sepsis neonatal temprana (SNT) se debe principalmente a organismos adquiridos antes y durante el parto (o infecci�n fetal materna) y la sepsis de inicio tard�o (SIT) a organismos adquiridos despu�s del parto (fuentes nosocomiales o comunitarias) (Ferrer Montoya, Jim�nez Noguera, V�zquez Estrada, & Cede�o Esturo, 2020).

Gran parte de la susceptibilidad, frecuencia y severidad de la sepsis neonatal se debe a las caracter�sticas del sistema inmune propias de la edad, explicado por importantes diferencias entre la inmunidad en neonatos y personas adultas. Debido al tiempo que necesita la maduraci�n del sistema inmune adaptativo, los mecanismos de defensa en los neonatos se fundamentan en el sistema inmune innato. Sin embargo, los RN pret�rmino con menos de 32 semanas de edad gestacional tienen su sistema inmune innato tambi�n inmaduro, lo que los hace a�n m�s vulnerables frente a procesos infecciosos. De hecho, hasta el 25% de los RN prematuros con menos de 32 semanas de gestaci�n desarrollan una infecci�n sist�mica severa dentro de su periodo neonatal (Cort�s, Fern�ndez Cruz, Beltr�n Z��iga, Narv�ez, & Fonseca Becerra, 2019).

Las Bacterias como la Escherichia coli (E coli), Listeria y algunas cepas de estreptococos, son las causas m�s frecuentes en la sepsis neonatal, pero, el estreptococo del grupo B (SGB) ha sido el causante m�s destacado de dicha afecci�n.� Ya este problema se ha vuelto menos frecuente, en vista de que, las mujeres son examinadas desde el antes del parto. Otro agente que igualmente puede causar graves infecciones es el virus del herpes simple (VHS), representando �ste una frecuencia mayor cuando la madre es quien se ha infectado recientemente.� La sepsis neonatal de inicio temprano mayormente surge dentro de las 24 a 48 horas posteriores al nacimiento, infect�ndose el reci�n nacido por contacto con la madre, antes o durante el parto (Kaneshiro & Zieve, 2021).

As� mismo, los beb�s que tienen un alto riesgo de sepsis de inicio temprano y tard�o, son aquellos que muy bajo peso al nacer (< 1.500 gr.). Existen previos estudios en los que sus resultados evidencian un predominio de organismos Gram-positivos como causa de sepsis0020de inicio tard�o y de organismos Gram-negativos como causa de sepsis de inicio temprano, no obstante, estos resultados, limitados a grandes unidades acad�micas de cuidados intensivos neonatales, pudieran no necesariamente representar los mismos resultados obtenidos en otras unidades (Tibanquiza Arreaga, Rodriguez Avil�s, Barrera Rivera, & Cede�o Caballero, 2019).

Las manifestaciones cl�nicas de la SN no son espec�ficas e incluyen rechazo al alimento, distr�s respiratorio, neumon�a, apnea, retraso del llenado capilar, frialdad de extremidades, intolerancia a la alimentaci�n, inestabilidad t�rmica, hipoton�a, convulsiones, abultamiento de la fontanela e ictericia prolongada. Las manifestaciones m�s severas son el choque, la coagulaci�n intravascular diseminada, falla multiorg�nica, entre otras. Estos hallazgos se pueden encontrar en muchas otras condiciones patol�gicas lo que dificulta el diagn�stico, sumado a que tambi�n pueden presentarse de manera tard�a, empeorando el pron�stico para el RN (Cort�s, Fern�ndez Cruz, Beltr�n Z��iga, Narv�ez, & Fonseca Becerra, 2019).

Existe concordancia entre los factores de riesgo fetales y maternos, entre ellos se destacan: nacimiento pret�rmino, asfixia neonatal, malformaciones cong�nitas y sexo masculino. El bajo peso al nacer tambi�n es considerado una condici�n predisponente de la sepsis neonatal debido a la debilidad relativa del sistema inmune. Los factores de riesgo mayores y menores seg�n las Normas nacionales para la atenci�n materno neonatal son los siguientes (Ferrer Montoya, Jim�nez Noguera, V�zquez Estrada, & Cede�o Esturo, 2020).

Factores de riesgo mayores: Colonizaci�n materna por el estreptococo del grupo B, corioamnionitis cl�nica e histol�gica, ruptura de membranas igual o mayor de 18 horas, infecci�n urinaria y/o vaginal materna en las �ltimas 2 semanas previas al parto, fiebre materna (mayor de 38� C, 24 horas previo a la terminaci�n del parto o durante el trabajo de parto) (Ferrer Montoya, Jim�nez Noguera, V�zquez Estrada, & Cede�o Esturo, 2020).

Factores de riesgo menores: Prematuridad sin causa aparente, hijo anterior con infecci�n invasiva por estreptococo β hemol�tico del grupo, parto hospitalario contaminado con heces maternas durante el nacimiento, tactos vaginales frecuentes (m�s de 4), parto prolongado: se produce cuando el parto dura aproximadamente 20 horas o m�s si es primigesta, y 14 horas o m�s en mult�paras, anemia en el embarazo: menos de 110 gr/dL, preeclampsia en la gestaci�n: estado patol�gico de la mujer caracterizado por la presencia de hipertensi�n arterial (140/90 mm/Hg), edemas, prote�nas en la orina y aumento excesivo de peso; puede preceder a una eclampsia (Ferrer Montoya, Jim�nez Noguera, V�zquez Estrada, & Cede�o Esturo, 2020).

Un diagn�stico eficaz y oportuno es la clave en este tipo de patolog�as; que se caracteriza por tener una cl�nica (frecuentemente) et�rea y un laboratorio inespec�fico, y �ste, tambi�n ligado al retardo terap�utico, resulta en un alto porcentaje de muerte y secuelas (Arias Gomescoello, Valdiviezo Romero, Espinoza Alvarado, & Morante Mendoza, 2018). El diagn�stico de sepsis es complicado, lo que predispone al uso excesivo de antibi�ticos, hospitalizaciones innecesarias, resistencia a los antibi�ticos, separaci�n de la madre y su hijo, disminuci�n de la lactancia materna exclusiva y expone al neonato a infecciones intrahospitalarias (Vega Fern�ndez & Zevallos Vargas, 2023).

Los cultivos de sangre y l�quido cefalorraqu�deo se han considerado como el est�ndar de oro para el diagn�stico de sepsis, sin embargo, la tasa de positividad es bastante baja, se reporta el 26% de cultivos positivos y el 21% tiene sepsis cl�nica con probable infecci�n. La baja positividad de los cultivos se justifica por el uso de antibi�ticos en las madres durante el periparto, el volumen peque�o de la muestra de sangre y porque la bacteriemia en los neonatos es baja o intermitente (Vega Fern�ndez & Zevallos Vargas, 2023).

Como diagn�stico diferencial se debe reconocer los signos o s�ntomas asociados a condiciones no infecciosas, como: dificultad respiratoria del reci�n nacido; taquipnea transitoria, enfermedad de membrana hialina, s�ndrome de aspiraci�n de l�quido amni�tico meconial, cardiopat�a descompensada. Deshidrataci�n. Anomal�as cong�nitas; cardiopat�a cong�nita, disritmia, hiperplasia suprarrenal cong�nita, patolog�a gastrointestinal, errores innatos del metabolismo. Letargia; trastornos metab�licos (hipoglucemia, hipocalcemia), asfixia perinatal, trauma. convulsiones; hemorragia intraventricular (Vega Fern�ndez & Zevallos Vargas, 2023).

Dentro de los ex�menes auxiliares para confirmar el diagn�stico y realizar el diagn�stico diferencial se debe solicitar: Hemocultivo� y� cultivo� de� l�quido� cefalorraqu�deo� (LCR), estudio�� de�� l�quido�� cefalorraqu�deo, prote�na C reactiva (PCR) > 10 mg/l, la procalcitonina (PCT), hemograma con recuento leucocitario, puede encontrarse plaquetopenia en la sepsis y en la NEC, an�lisis de gases arteriales (AGA), se debe� solicitar� radiograf�a� de� t�rax� para descartar� neumon�a� y� radiograf�a abdominal para diferenciar un �leo s�ptico y la NEC, urocultivo y examen de orina (Vega Fern�ndez & Zevallos Vargas, 2023).

Dentro del tratamiento no farmacol�gico de la sepsis neonatal depender� del estado cl�nico del paciente, mantener una temperatura corporal neutral, si se sospecha sepsis con compromiso intestinal, suspender la alimentaci�n enteral e iniciar hidrataci�n endovenosa, brindar asistencia respiratoria de ser necesario, monitorizaci�n de las funciones vitales y la glucosa s�rica. Si se trata de una sepsis intrahospitalaria y se sospecha de una infecci�n por la v�a venosa central, deber�a retirarse el cat�ter venoso central de inserci�n perif�rica. Los casos graves con choque e hipotensi�n deben tratarse de inmediato (Goel, Celyn, & Walker, 2019).

As� mismo para el tratamiento farmacol�gico lo podemos clarificar en: Antibioticoterapia emp�rica:� Considerar el uso racional de antibi�ticos, iniciar el tratamiento posterior a la toma de hemocultivo, salvo si �ste va a tardar en realizarse. Evitar el uso sistem�tico de antibi�ticos de �ltima generaci�n. Es importante monitorear din�micamente la epidemiolog�a local de sepsis neonatal y detectar g�rmenes predominantes y sensibilidad antimicrobiana para garantizar un tratamiento antibi�tico emp�rico adecuado (Shane, S�nchez, & Stoll, 2017). Antibioterapia espec�fica:� Tanto para la sepsis precoz como tard�a el tratamiento antibi�tico debe cambiarse, seg�n el germen recuperado y sensibilidad antimicrobiana (Voller & Myers, 2020).

El Proceso de Atenci�n de Enfermer�a, nos permite brindar cuidados enfermeros a partir de bases cient�ficas: al paciente, su familia y comunidad, de manera personalizada e integral como parte de la promoci�n de la salud y prevenci�n de enfermedades. Los cuidados de enfermer�a que se aplicar�n est�n basados en las Catorce Necesidades de Virginia Henderson, de forma que se logren los objetivos planteados (Yunga-Bueno, Armijos Macas, & Sotomayor Preciado, 2021).

El objetivo de este trabajo es describir la atenci�n de enfermer�a en reci�n nacidos con sepsis bacteriana basado en la teor�a de Virginia Henderson. El proceso de atenci�n de enfermer�a, consiste en brindar cuidados por parte del personal de enfermer�a, que se caracteriza por tener bases te�ricas y cient�ficas que le permitan otorgar de manera hol�stica una atenci�n �ptima hacia el paciente, familia y comunidad, se aplicar�n los cuidados de enfermer�a en base a las 14 necesidades de Virginia Henderson, para lograr los objetivos que nos hemos plateado. 

 

Descripci�n del caso 

Reci�n nacido de sexo femenino, que reside en la ciudad de Santa Rosa, de madre de 26 a�os de edad, casada, nivel de estudio secundario, con antecedentes obst�tricos un parto previo. infecci�n de v�as urinarias tratadas y curadas y fiebre por proceso gripal, parto por ces�rea de 40 semanas de gestaci�n por ecograf�a, m�s cuello no apto para inducci�n, ruptura de membranas a t�rmino, l�quido amni�tico meconial (+++) en poca cantidad, APGAR 9-9 al primer y quinto minuto de vida. 

Neonato que permanec�a en �rea de hospitalizaci�n en compa��a de su madre aliment�ndose de lactancia materna a libre demanda por succi�n a las 8 horas de vida, se le realiza ex�menes de laboratorio; prueba serol�gica para s�filis (VDRL) no reactivo, linfocitos 59.00, leucocitos 65.100, hemoglobina 13.90, hematocrito 38.50 %, plaquetas 359.000, PCR Cuantitativo 6 y reactivos de fase aguda positivos, Grupo sangu�neo A+, Bilirrubina total 9.3, por lo cual es ingresado al �rea de neonatolog�a con diagn�stico de sepsis bacteriana, incompatibilidad ABO del feto y del reci�n nacido. Al ingreso se procede a controlar el peso 3.885 gr y talla 51 cm, signos vitales: frecuencia cardiaca 136 1pm, frecuencia respiratoria 54 rpm, saturaci�n de ox�geno 99%, temperatura 37�C, presi�n arterial 58/23 (36) mm/hg. 

 

Metodolog�a

El presente trabajo es un tipo de estudio descriptivo- cualitativo de investigaci�n, a trav�s de un estudio de caso, con enfoque cl�nico, que se realiz� mediante la revisi�n de la historia cl�nica de la paciente (reci�n nacida). Apoy�ndose en los cuidados de enfermer�a especialmente en la Teor�a de Virginia Henderson y de esta manera explicar c�mo se aplic� los cuidados en dicha paciente, con el fin de brindar una atenci�n digna orientada a las enfermedades que se pueden presentar en los reci�n nacidos enfoc�ndonos en las necesidades deficientes que presenta la paciente. El m�todo utilizado fue el inductivo-deductivo, donde se fundamenta con la b�squeda y recolecci�n de art�culos sobre la enfermedad sepsis neonatal para ejecutar este trabajo de investigaci�n, adem�s para cumplir con los principios de bio�tica se solicit� al familiar del paciente mediante un consentimiento informado se nos permita recolectar informaci�n necesaria del paciente con la debida confidencialidad de los datos personales.

Recursos materiales: Historia cl�nica del paciente, consentimiento informado, computadoras, celulares, art�culos de bases de datos, internet, libros, transporte.

Recursos humanos: Tutora de investigaci�n, investigadoras, paciente u objeto de estudio.

 

Resultados

Paciente en cuidados intermedios neonatales, en condiciones inestables, recibi� tratamiento farmacol�gico: dextrosa al 10%, pasar a 11.6 gotas, y antibi�ticos de primera l�nea: ampicilina 388 mg por v�a intravenosa cada 12 horas, amikacina 58.2 mg cada 24 horas por v�a intravenosa, gluconato de calcio 388 mg cada 8 horas por v�a intravenosa, se coloca sonda orog�strica por la cual recibe 5 mililitros de leche materna cada 3 horas. 

Nuevamente se le realizaron ex�menes de laboratorio de control: leucocitos 14.12, linfocitos 38.00, hemoglobina 13.00, hematocrito 37.30, plaquetas 277.00, hemocultivo negativo, se cumpli� el esquema de antibi�tico con control de reactantes de fase agua. Las actividades que realiz� el personal de enfermer�a durante su hospitalizaci�n, fueron las siguientes; colocar al reci�n nacido en termocuna abierta con calor radiante, para que reciba la fototerapia con protecci�n ocular y genital, as� mismo realizando los cambios de posici�n y rotaci�n de sensores, brindar educaci�n a la madre sobre la forma adecuada de como manipular a su reci�n nacido cuando ingrese al �rea de neonatolog�a y sobre los beneficios de la lactancia materna que debe recibir, monitoreo continuo de signos vitales, es decir cada 3 horas, control de balance h�drico, revisar constantemente que la v�a perif�rica se encuentre permeable, pesar y ba�ar diariamente, limpieza del cord�n umbilical, administrar el tratamiento indicado por el m�dico, as� mismo verificar que el reci�n nacido tenga buen reflejo de succi�n y degluci�n, aliment�ndose de seno materno y leche de f�rmula con tomas de 70-75 ml cada tres horas. 

La evoluci�n cl�nica del reci�n nacido fue favorable, en cuanto a resultados de laboratorio, PCR negativo, por esta raz�n m�dico tratante decide alta m�dica, por lo que se brinda a mama y papa varias indicaciones acerca del ba�o diario, limpieza de cord�n umbilical, lactancia materna exclusiva, revisar constantemente si hay signos de alarma como cambios en el color de la piel, si presenta fiebre, malestar general y dificultad respiratoria, y a su vez educar a ambos padres para que otorguen un buen cuidado en su hogar. 

En relaci�n a la teor�a de Virginia Henderson, se basa fundamentalmente en satisfacer las necesidades b�sicas del individuo sano o enfermo, utilizando un m�todo sist�mico como el proceso de atenci�n de enfermer�a, valorando el grado de dependencia e independencia del neonato en relaci�n a cada una de las siguientes necesidades. 

Necesidad 1: Respirar con normalidad: No se encuentra afectada, respiraciones espont�neas.  

Necesidad 2: Comer y bebe adecuadamente: Dependencia, se alimenta por sonda orog�strica 5ml cada 3h.  

Necesidad 3: Eliminaci�n normal de desechos corporales: Independencia, mantiene diuresis de 4 ml/kg/h y de 3-4 deposiciones en 24h. 

Necesidad 4: Movilidad y posturas adecuadas: Independencia, se encuentra activo reactivo a la manipulaci�n, en posici�n dec�bito dorsal y dec�bito prono. 

Necesidad 5: Dormir y descansar: Dependencia, debido al tratamiento y cambios posturales. 

Necesidad 6: Vestirse y desvestirse con normalidad: Dependencia, se encuentra con fototerapia por lo que no es posible arroparlo. 

Necesidad 7: Mantener la temperatura del cuerpo en los rangos normales: Dependencia, permanece en termocuna con calor radiante, con temperatura de 36.1C-36, 9C. Higiene y protecci�n de la piel: Dependencia, ba�o diario, limpieza de cord�n umbilical. 

Necesidad 8: Mantener una buena higiene corporal: Dependencia, expuesto a riesgos intrahospitalarios, lesiones d�rmicas, ca�das, infecci�n. 

Necesidad 9: Evitar los peligros en el entorno y evitar poner en peligro a otros: Dependencia, debido a que se trata de un RN no pod�a estar solo por mucho rato, ya que se mov�a, cambi�ndose de posici�n y corr�a el riesgo de lesionar alguna parte de su cuerpo.

Necesidad 10: Comunicar emociones, necesidades, temores y opiniones: No aplica en neonato. 

Necesidad 11: Actuar o reaccionar de acuerdo con las propias creencias: No aplica en neonato 

Necesidad 12: Desarrollarse de manera que exista un sentido de logro: No aplica en neonato. 

Necesidad 13: Participar en actividades recreativas o juegos: Independencia, activo reactivo, extremidades con tono y fuerza muscular conservada. 

Necesidad 14: Aprender, descubrir o satisfacer la curiosidad personal: Dependencia en el binomio madre - hijo.

Los cuidados de enfermer�a se basaron en: Valoraci�n de estado general, control constante de signos vitales, control de glicemia capilar seg�n prescripci�n m�dica, colocaci�n y cuidado de v�a perif�rica, supervisi�n constante sobre la alimentaci�n (alimentaci�n cada 3 horas por sonda nasog�strica), control de balance h�drico, colocaci�n y cuidados de sonda nasog�strica, cambios posturales cada 2 horas, administraci�n de medicamentos prescritos por el m�dico, cuidados de la piel para evitar deterioro de la integridad cut�nea, brindar seguridad al paciente, prevenir riesgo de ca�das como mantener termocuna cerrada y puesto los frenos, educaci�n al familiar sobre los cuidados del RN.

 

Discusi�n

Este estudio estuvo orientado a determinar los cuidados integrales de enfermer�a a un paciente reci�n nacido con diagn�stico de sepsis neonatal para mejorar la calidad de vida y evitar complicaciones en base a la teor�a de Virginia Henderson, enfocando este objetivo a lograr cumplir las necesidades alteradas del paciente y as� aplicar los cuidados de manera asistencial mediante un cuidador o un profesional de enfermer�a, mejorando su desarrollo y bienestar (Montoya Arenas, Garz�n Giraldo, Correa L�pez, & Carvajal Castrill�n, 2019).

La teor�a de las necesidades b�sicas de Virginia Henderson valora al paciente como un individuo que requiere ayuda para lograr la independencia, la plenitud de la mente y cuerpo, compuesta por 14 necesidades primordiales que representa las superficies en las que tienen la posibilidad de manifestarse alg�n inconveniente en la salud. Esta lista encierra los elementos del cuidado de enfermer�a, considerados como funcionalidades de competencia �nica de las enfermeras, quienes son las encargadas de favorecer al sujeto ya sea que est� enfermo o sano (Lopes Nunes, Alvarez, & Valcarenghi Valcarenghi, 2021). Estos pueden describirse como: respiraci�n, alimentaci�n, eliminaci�n, movimiento, sue�o y descanso, vestimenta, temperatura corporal, higiene, control ambiental, comunicaci�n, pr�ctica religiosa, trabajo, ocio y aprendizaje (Rodr�guez L�pez, S�nchez Tuy�, & M�ndez Dom�nguez, 2021).

En su estudio unieron la teor�a de las 14 necesidades de Virginia Henderson con el proceso de atenci�n de enfermer�a compuesto por la taxonom�a, como m�todo para la gesti�n y administraci�n de los cuidados, con el prop�sito de aplicar una visi�n fundamentada por la disciplina. Pastu�a y Jara en su investigaci�n tienen una mirada relacionada, describe que, desde la perspectiva del modelo de Henderson los profesionales reconocen a un ser integral con valores culturales, creencias y convicciones en la cual el cuidado est� enfocado en la capacidad de llevar a cubrir las necesidades del paciente, familiar o comunidad (Pastu�a Doicela & Jara Concha, 2020).

Belles et. Al, nos indican que las acciones de enfermer�a se distinguen por ser polivalentes y multidisciplinarias proponiendo varios cuidados como: fomentar el autoestima y apoyo al paciente, estimular la movilidad, ejercitar posturas de cabeza y cuello, ejercicios para fortalecer los m�sculos de degluci�n, fomentar el autocuidado, dietas saludables, dispositivos de adaptaci�n para prevenir lesiones o ca�das, ejercicios de habla, entre otras. La reci�n nacida tuvo un abordaje desde la multidisciplinariedad, ya que fueron varios profesionales de la salud que intervinieron en su atenci�n, claro est� todo esto se realiz� bajo la coordinaci�n del profesional de enfermer�a (Bell�s Aranda, y otros, 2021).

Reconociendo las demandas de las necesidades de salud del reci�n nacido se revela como una posibilidad para el cuidado de enfermer�a mejorar a este segmento de la poblaci�n con el fin de promover el mantenimiento de la capacidad funcional, preservando la autonom�a y la independencia, en el presente estudio, se identificaron en la paciente reci�n nacida con sepsis neonatal las necesidades identificadas que est�n alteradas, son 7 en las cuales el neonato necesitaba depender de un profesional de enfermer�a las cuales est�n relacionadas con alimentaci�n, dormir y descansar, vestir y elegir la ropa adecuada, mantener la temperatura adecuada, higiene corporal, evitar peligros del entorno, aprender y satisfacer la curiosidad, estando alteradas el 50% de sus necesidades B�sicas, interpret�ndose como una alta necesidad de cuidados en relaci�n a la asistencia directa, que debe ser asumida por la Enfermera en el escenario hospitalario (Naranjo Hern�ndez, Jim�nez Machado, & Gonz�lez Meneses, 2018).

Los mecanismos de inmunidad en un reci�n nacido son muy deficientes debido a la inmadurez del sistema inmune, esto contribuye en la vulnerabilidad a infecciones graves, todo esto contribuye a la vulnerabilidad a infecciones graves bacterianas, f�ngicas y virales. lo cual se asocia con el presente estudio, donde el reci�n nacido permaneci� en termocuna y adem�s de eso se le realizaba cambios posturales para evitar que la piel se lesione y adquiera alguna infecci�n nosocomial (Garc�s Vera, y otros, 2019).

Rubio en su estudio indico que los cuidados de enfermer�a que se deben realizar en los reci�n nacidos con sepsis esta la desinfecci�n de la incubadora diariamente con agua est�ril por la zona interna y con alcohol 76% por la parte exterior, ubicar al reci�n nacido en la incubadora para darle un ambiente t�rmico neutro y aislarlo, evitar que dentro de la incubadora haya humedad ya que favorecer�a el crecimiento de g�rmenes, usar s�lo el tiempo necesario aquellos dispositivos como cat�teres o sondas que puedan erosionar la piel del ni�o. Estas acciones son parecidas a las aplicadas en nuestro paciente, el cual tuvo que permanecer en una incubadora para controlar as� su temperatura corporal y evitar infecciones (Rubio G�mez & Rojas �lvarez, 2018).

De la misma manera V�zquez, se�ala en su estudio que, los principales cuidados que se deben ofrecer son los siguientes: �Monitorizaci�n general de los signos vitales: TA, FC, FR, Sat. O2, utilizar la incubadora, extraer anal�tica general y microbiolog�a, canalizar, preferentemente, una v�a venosa central, administrar antibi�ticos de forma precoz, vigilar diuresis, realizar control radiol�gico, normalmente de t�rax y abdomen, controlar el aporte h�drico. Coincidiendo as� con nuestro caso en el cual al reci�n nacido se le brindo cuidados como la monitorizaci�n continua de signos vitales, adem�s de la colocaci�n de antibi�ticos que es una de las actividades mas importantes para restaurar la salud del reci�n nacido, en el presente caso se administro antibioticoterapia a base de antibi�ticos de primera l�nea como: ampicilina y amikacina por v�a venosa, por lo cual el RN permaneci� con v�a perif�rica permeable (V�zquez P�rez, Aljama Noguera, & Dom�nguez Campos, 2018).

 

Conclusiones

La sepsis neonatal se define como un s�ndrome cl�nico caracterizado por signos y s�ntomas de infecci�n sist�mica, que se confirma al aislarse en hemocultivos o cultivo de l�quido cefalorraqu�deo (LCR), bacterias, hongos o virus y que se manifiesta dentro de los primeros 28 d�as de vida. Por este motivo es importante conocer la evoluci�n cient�fica de enfermer�a bas�ndonos en las 14 necesidades de Virginia Henderson la misma que hemos analizado y aplicado en nuestra paciente teniendo como resultado 7 necesidades alteradas de 14, es decir 50% de sus funciones est�n alteradas, interpret�ndose como una alta necesidad de cuidados en relaci�n a la asistencia directa, se puso en pr�ctica los cuidados de enfermer�a , para as� tener una mejor�a de la calidad de vida, asumiendo con responsabilidad el liderazgo de la gesti�n de atenci�n del paciente con este tipo de diagn�stico.

 

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