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Legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en poblaci�n civil, implicaciones jur�dicas, psicol�gicas y sociol�gicas
Legalization of the carrying or possession of firearms in the civilian population, legal, psychological and sociological implications
Legaliza��o do porte ou posse de armas de fogo na popula��o civil, implica��es jur�dicas, psicol�gicas e sociol�gicas
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Correspondencia: jose.vasconez3308@utc.edu.ec
Ciencias Sociales y Pol�ticas
Art�culo de Investigaci�n
�������� *Recibido: 23 de febrero de 2023 *Aceptado: 17 de abril de 2023 * Publicado: 12 de mayo de 2023
I. Universidad T�cnica de Cotopaxi, Latacunga, Ecuador.
II. Universidad Regional Aut�noma de los Andes UNIANDES, Ambato, Ecuador.
El tema de la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil es un asunto que ha generado controversia en la sociedad. Desde el punto de vista jur�dico, existen argumentos tanto a favor como en contra de la legalizaci�n, considerando aspectos como el derecho a la autodefensa, la seguridad ciudadana, el control del tr�fico ilegal de armas y el riesgo de accidentes o uso indebido.
En cuanto a la perspectiva psicol�gica, la disponibilidad de armas de fuego en hogares o comunidades puede aumentar el riesgo de lesiones y muertes por violencia dom�stica, suicidio, homicidio y accidentes. Adem�s, los estudios sugieren que los propietarios de armas de fuego pueden estar m�s propensos a sufrir problemas de salud mental, como trastornos de estr�s postraum�tico, trastornos del �nimo y abuso de sustancias.
Desde la perspectiva sociol�gica, la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego puede tener implicaciones en la percepci�n de seguridad, la din�mica social, la violencia y la criminalidad. En algunos pa�ses, la legalizaci�n se ha relacionado con un aumento en el n�mero de homicidios y en la violencia armada.
la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil es un tema complejo y multidimensional que requiere un abordaje hol�stico, considerando las recomendaciones jur�dicas, psicol�gicas y sociol�gicas del mismo. Es esencial promover el debate informado y la investigaci�n para poder tomar decisiones fundamentales sobre este tema.
Palabras Claves: Legalizaci�n; Armas de Fuego; Implicaciones; Perspectivas.
Abstract
The issue of legalizing the carrying or possession of firearms in the civilian population is an issue that has generated controversy in society. From a legal point of view, there are arguments both for and against legalization, considering aspects such as the right to self-defense, citizen security, control of illegal arms trafficking, and the risk of accidents or misuse.
From a psychological perspective, the availability of firearms in homes or communities can increase the risk of injury and death from domestic violence, suicide, homicide, and accidents. Additionally, studies suggest that firearm owners may be more prone to mental health problems such as post-traumatic stress disorder, mood disorders, and substance abuse.
From a sociological perspective, legalizing the carrying or possession of firearms may have implications for the perception of security, social dynamics, violence, and crime. In some countries, legalization has been linked to an increase in the number of homicides and in armed violence.
The legalization of the carrying or possession of firearms in the civilian population is a complex and multidimensional issue that requires a holistic approach, considering its legal, psychological and sociological recommendations. It is essential to promote informed debate and research in order to make fundamental decisions on this issue.
Keywords: Legalization; Firearms; Implications; Perspectives.
Resumo
A quest�o da legaliza��o do porte ou posse de armas de fogo na popula��o civil � um assunto que tem gerado pol�mica na sociedade. Do ponto de vista jur�dico, h� argumentos a favor e contra a legaliza��o, considerando aspectos como o direito � leg�tima defesa, a seguran�a cidad�, o controle do tr�fico il�cito de armas e o risco de acidentes ou uso indevido.
Do ponto de vista psicol�gico, a disponibilidade de armas de fogo em resid�ncias ou comunidades pode aumentar o risco de ferimentos e morte por viol�ncia dom�stica, suic�dio, homic�dio e acidentes. Al�m disso, estudos sugerem que os propriet�rios de armas de fogo podem ser mais propensos a problemas de sa�de mental, como transtorno de estresse p�s-traum�tico, transtornos de humor e abuso de subst�ncias.
Do ponto de vista sociol�gico, a legaliza��o do porte ou posse de armas de fogo pode ter implica��es na percep��o de seguran�a, din�mica social, viol�ncia e criminalidade. Em alguns pa�ses, a legaliza��o foi associada a um aumento no n�mero de homic�dios e na viol�ncia armada.
A legaliza��o do porte ou posse de armas de fogo na popula��o civil � uma quest�o complexa e multidimensional que requer uma abordagem hol�stica, considerando suas recomenda��es legais, psicol�gicas e sociol�gicas. � essencial promover o debate informado e a pesquisa para tomar decis�es fundamentais sobre esta quest�o.
Palavras-chave: Legaliza��o; Armas de fogo; Implica��es; Perspectivas.
Introducci�n
(Expreso, 2023) en una reciente publicaci�n manifiesta que, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, anunci� en un mensaje a la naci�n que se autorizaba la tenencia y porte de armas de uso civil para defensa personal de acuerdo con los requisitos de la ley y el reglamento.
En su alocuci�n dijo que esta medida urgente es para combatir al enemigo com�n de Ecuador, la delincuencia, el narcotr�fico y el crimen organizado.
Adem�s, dijo, se establecer�n controles y registro inform�tico de las armas y se proh�be la fabricaci�n, registro y tenencia de armas de fabricaci�n artesanal. Tambi�n anunci� la autorizaci�n del uso de aerosoles de gas pimienta para defensa personal.
Lasso indic� como otra medida m�s que, desde ahora, "los guardias de seguridad privada apoyar�n a la polic�a nacional en las labores de vigilancia y seguridad, portando sus armas en los alrededores de sus puestos de trabajo.
Abordaje psico sociol�gico
De acuerdo a la p�gina (Aminist�a-internacional, 2021) la tenencia legal de armas en la poblaci�n civil es un tema altamente controvertido en muchos pa�ses del mundo. Mientras que algunos defienden el derecho a portar armas como un derecho fundamental, otros argumentan que la posesi�n de armas en manos de civiles puede tener graves implicaciones psicol�gicas y sociol�gicas.
(Chaparro, 2021) menciona que desde una perspectiva psicol�gica, la posesi�n de armas puede tener efectos negativos en la salud mental de las personas. Las investigaciones han demostrado que la tenencia de armas puede aumentar la probabilidad de comportamientos violentos y agresivos, y puede contribuir a la depresi�n, el estr�s y la ansiedad. Adem�s, la presencia de armas en el hogar puede aumentar el riesgo de suicidio y homicidio, especialmente en casos de violencia dom�stica.
Por otro lado, la posesi�n de armas tambi�n puede influir en la percepci�n de seguridad de las personas. Los propietarios de armas pueden sentirse m�s seguros al tener una herramienta para defenderse en caso de una amenaza percibida, pero esto tambi�n puede llevar a una mentalidad de �ojo por ojo�, donde la violencia se ve como la �nica soluci�n para resolver conflictos. Adem�s, la percepci�n de seguridad que ofrece la tenencia de armas puede ser falsa, ya que las armas tambi�n pueden ser robadas o utilizadas en contra del propietario.
(Moreano, 2013) considera que en t�rminos sociol�gicos, la posesi�n de armas tambi�n puede tener implicaciones en la forma en que se desarrollan las comunidades. En pa�ses donde la tenencia de armas es com�n, como Estados Unidos, se ha observado una mayor tasa de cr�menes violentos. Tambi�n se ha demostrado que la disponibilidad de armas est� relacionada con la tasa de homicidios en pa�ses desarrollados.
Adem�s, la tenencia de armas puede tener implicaciones en la forma en que se resuelven los conflictos y se manejan las emociones. En lugar de buscar soluciones pac�ficas y dialogar para resolver conflictos, las personas pueden recurrir a la violencia f�sica cuando tienen acceso a armas.
La tenencia legal de armas en la poblaci�n civil puede tener implicaciones graves en la salud mental, la percepci�n de seguridad, la tasa de cr�menes violentos y la forma en que se resuelven los conflictos.
Violencia en Ecuador
La violencia es un problema global que afecta a muchos pa�ses, y Ecuador no es la excepci�n.
(Flores, 2023) menciona que en los �ltimos a�os, Ecuador ha experimentado un aumento en la violencia, especialmente en las �reas urbanas. El robo y el asalto son los delitos m�s comunes, aunque tambi�n se han registrado casos de homicidio, secuestro y violencia sexual. Seg�n el Instituto Nacional de Estad�stica y Censos (INEC), en el a�o 2020 se registraron m�s de 32.000 robos y asaltos en el pa�s.
Una de las principales causas de la violencia en Ecuador es la falta de oportunidades econ�micas y sociales.�(Bravo-Grijalva, 2020) considera que muchas personas, especialmente j�venes de bajos ingresos, se ven obligados a cometer delitos para sobrevivir o mejorar sus condiciones de vida. Adem�s, la presencia del narcotr�fico en el pa�s ha contribuido a la violencia, ya que ha generado conflictos entre los grupos criminales.
Otra causa de la violencia en Ecuador es la falta de seguridad y la corrupci�n en las fuerzas policiales. (Gonz�lez, 2019) manifiesta que los ciudadanos ecuatorianos tienen poca confianza en la polic�a y en el sistema judicial, lo que a menudo impide que los delitos sean investigados y castigados adecuadamente. Esto ha llevado a un aumento en la violencia y en la sensaci�n de inseguridad en el pa�s.
Para abordar el problema de la violencia en Ecuador, se deben tomar medidas a largo y corto plazo. En el corto plazo, es necesario mejorar la seguridad p�blica y fortalecer las fuerzas policiales. Esto puede lograrse a trav�s de una mayor inversi�n en tecnolog�a, entrenamiento y equipamiento. Tambi�n es importante mejorar la coordinaci�n entre las fuerzas policiales y otras agencias gubernamentales para mejorar la seguridad en las comunidades.
A largo plazo, se deben abordar las causas fundamentales de la violencia en Ecuador. Esto incluye mejorar la educaci�n y las oportunidades econ�micas para las personas de bajos ingresos, as� como combatir la corrupci�n y el narcotr�fico.
Muertes por armas de fuego
Seg�n datos del Observatorio de la Seguridad Ciudadana del Ecuador, en el a�o 2020 se registraron un total de 1.046 muertes causadas por armas de fuego en el pa�s. Esta cifra representa una disminuci�n del 6% con respecto al a�o anterior, pero sigue siendo preocupante ya que la tasa de homicidios por arma de fuego en Ecuador sigue siendo alta en comparaci�n con otros pa�ses de la regi�n.�(Pozo, 2020)
Adem�s, seg�n el mismo informe, la mayor�a de las v�ctimas de homicidio por arma de fuego en Ecuador son hombres j�venes, con edades detectadas entre los 18 y 35 a�os, y los principales motivos de estos homicidios son los conflictos entre pandillas y el narcotr�fico.
Es importante tener en cuenta que las cifras de muertes por armas de fuego en Ecuador pueden ser a�n m�s altas, ya que muchos casos no pueden ser denunciados o investigados adecuadamente debido a la falta de confianza en el sistema judicial y la polic�a. Adem�s, tambi�n existen casos de muertes causadas por armas de fuego en contextos de violencia intrafamiliar, suicidios y accidentes, lo que a menudo no se registra en las estad�sticas oficiales.
La violencia es un problema grave en Ecuador que requiere de un enfoque multifac�tico para ser abordado.
En Ecuador, los trastornos mentales son un problema de salud importante, que afecta a una gran cantidad de personas en el pa�s. Seg�n datos del Ministerio de Salud P�blica de Ecuador, en el a�o 2019, m�s de 300.000 personas fueron atendidas por problemas de salud mental en los servicios de salud del pa�s.�(MSP, 2019)
Uno de los trastornos mentales m�s comunes en Ecuador es la depresi�n. Seg�n la Encuesta Nacional de Salud y Nutrici�n (ENSANUT), realizada en el a�o 2018, el 6,8% de la poblaci�n ecuatoriana sufri� depresi�n en el �ltimo a�o, y el 3,1% sufri� depresi�n cr�nica. Adem�s, el 11,3% de la poblaci�n inform� haber experimentado s�ntomas de ansiedad en el �ltimo a�o.�(ENSANUT, 2018)
(Aguilera Mu�oz, 2019) manifiesta que otro trastorno mental que afecta a muchas personas en Ecuador es el trastorno de estr�s postraum�tico (TEPT), especialmente en aquellas personas que han sido v�ctimas de violencia, desastres naturales o conflictos armados. Seg�n un estudio realizado por la Universidad de Cuenca en el a�o 2016, el 33% de las personas que sufrieron violencia en la ciudad de Cuenca present� s�ntomas de TEPT.
(MSP, Ministerio de Salud P�blica del Ecuador, 2017) en su p�gina oficial menciona que el trastorno bipolar tambi�n es un problema importante en Ecuador. Seg�n un estudio realizado por la Universidad de Guayaquil en el a�o 2015, el 1,1% de la poblaci�n sufr�a de trastorno bipolar, y el 0,8% de la poblaci�n sufr�a de esquizofrenia.
Es importante tener en cuenta que muchos casos de trastornos mentales en Ecuador no pueden ser detectados o tratados debido a la falta de acceso a servicios de salud mental, especialmente en �reas rurales y de bajos ingresos. Adem�s, existe un estigma asociado a los trastornos mentales en muchos sectores de la sociedad ecuatoriana, lo que puede dificultar el acceso a la atenci�n y el tratamiento.
Los trastornos mentales son un problema de salud importante en Ecuador, que afecta a una gran cantidad de personas en el pa�s.
Trastornos mentales y acceso a armas de fuego
La relaci�n entre trastornos mentales y el uso de armas de fuego es un tema de gran preocupaci�n en todo el mundo. Aunque la mayor�a de las personas con trastornos mentales no representan una amenaza para la sociedad, algunas personas con ciertos trastornos mentales pueden estar en mayor riesgo de cometer actos violentos, especialmente si tienen acceso a armas de fuego.
(Antonio Medina, 2017) dice que los estudios sugieren que las personas con trastornos mentales graves, como la esquizofrenia o el trastorno bipolar, tienen un mayor riesgo de cometer actos violentos si tienen acceso a armas de fuego. Adem�s, aquellos con trastornos de personalidad antisocial ,trastornos del estado de �nimo , trastornos del control de los impulsos, como la conducta disruptiva o el trastorno explosivo intermitente, tambi�n pueden estar en mayor riesgo de violencia si tienen acceso a armas de fuego.
En Estados Unidos, un estudio realizado por el Congreso en el a�o 2018 encontr� que m�s del 30% de los tiroteos masivos en el pa�s involucraron a personas con trastornos mentales. Otros estudios han demostrado que las personas con trastornos mentales son m�s propensas a cometer suicidio utilizando armas de fuego que aquellos sin trastornos mentales. (OPS, 2022)
(Zurita, 2014) considera que es importante tener en cuenta que la gran mayor�a de las personas con trastornos mentales no cometen actos violentos, y que los trastornos mentales no son la �nica causa de la violencia con armas de fuego. Los factores sociales y culturales, como la pobreza, la discriminaci�n y la disponibilidad de armas de fuego, tambi�n juegan un papel importante.
Es esencial que se promueva un enfoque integrado y equilibrado para abordar la relaci�n entre trastornos mentales y el uso de armas de fuego. Esto incluye mejorar la detecci�n y el tratamiento de trastornos mentales, reducir el acceso a armas de fuego a personas con ciertos trastornos mentales y promover pol�ticas que reduzcan la disponibilidad de armas de fuego en la sociedad en general.
Aunque la relaci�n entre trastornos mentales y el uso de armas de fuego es compleja, es importante reconocer la importancia de prevenir el acceso a armas de fuego para ciertos trastornos mentales.
Metodolog�a
La investigaci�n se llev� a cabo mediante un enfoque bibliogr�fico de tipo documental, que consisti� en una revisi�n sistem�tica de documentos cient�ficos tales como revistas de investigaci�n, tesis de grado y sitios web de organizaciones nacionales e internacionales que alcanzaron los m�s altos est�ndares acad�micos y cient�ficos. Estas investigaciones proporcionan la informaci�n necesaria para la documentaci�n del tema. La investigaci�n documental es una herramienta valiosa para la construcci�n del conocimiento, ya que permite la ampliaci�n de la informaci�n sobre el tema de investigaci�n, lo que constituye un est�mulo para futuros procesos de investigaci�n (G�mez et al., 2016).
Legalizaci�n del porte y tenencia y acrecentamiento de la violencia
La legalizaci�n de la tenencia o porte de armas en algunos pa�ses ha sido un tema de debate durante muchos a�os. Mientras que algunos defienden que es un derecho fundamental de los ciudadanos, otros argumentan que puede aumentar la violencia y el crimen. De hecho, existen varios pa�ses donde la legalizaci�n de las armas ha llevado a un aumento significativo en la violencia y el crimen.
(BBC, 2022) en una de sus publicaciones indica que uno de los pa�ses donde la legalizaci�n de las armas ha sido un problema es Estados Unidos. En este pa�s, la Segunda Enmienda de la Constituci�n cantidad garantiza el derecho a portar armas, lo que ha llevado a que sea uno de los pa�ses con mayor de armas en manos de ciudadanos en todo el mundo. Sin embargo, la tasa de homicidios y la violencia armada en Estados Unidos son significativamente m�s altas que en otros pa�ses con leyes m�s restrictivas sobre las armas.
Otro ejemplo es Brasil, donde la legalizaci�n de las armas ha llevado a un aumento en la violencia. (UNIVERSO, 2019) indica que a principios de 2019, el presidente brasile�o Jair Bolsonaro hizo un decreto que permit�a a los ciudadanos mayores de 25 a�os comprar hasta cuatro armas de fuego. Desde entonces, los �ndices de violencia en el pa�s han sospechado significativamente, incluyendo un aumento en los homicidios y la violencia policial.
(Curbet, 2007) menciona que en M�xico, la legalizaci�n de las armas ha sido tema de debate durante muchos a�os. A pesar de tener algunas de las leyes de armas m�s restrictivas del mundo, M�xico sigue siendo uno de los pa�ses con mayores �ndices de violencia y homicidios en el mundo. La facilidad con la que las armas ilegales pueden ser adquiridas en el mercado negro ha sido una de las principales razones detr�s de la persistente violencia en el pa�s.
Es importante destacar que la relaci�n entre la legalizaci�n de las armas y la violencia es compleja y multifac�tica. La cultura, la pol�tica, la econom�a y la educaci�n son solo algunos de los factores que pueden influir en la relaci�n entre el acceso a las armas y la violencia. Sin embargo, la evidencia emp�rica sugiere que en pa�ses donde se han relajado las leyes sobre armas, ha ocurrido un aumento significativo en la violencia y el crimen.
La legalizaci�n de las armas puede tener consecuencias graves en t�rminos de la violencia y el crimen. Los pa�ses que han relajado las leyes sobre armas han visto un aumento significativo en la violencia, y la evidencia sugiere que las restricciones sobre las armas pueden ser una herramienta efectiva para reducir la violencia y el crimen. Es necesario promover una cultura de la no violencia y establecer pol�ticas p�blicas que promuevan la restricci�n y control del acceso a las armas.
Tenencia de armas y la constitucional nacional
La Carta magna nacional del Ecuador desde el a�o 2008 presenta el axioma constitucional de la Vida en Plenitud como forma jur�dico social de cumplimiento operativo de garant�as y derechos constitucionales.� Entre los preceptos m�s representativos se puede evidenciar el Art. 3 numeral 8 el cual muy claramente establece 8. Garantizar a sus habitantes el derecho a una cultura de paz, a la seguridad integral y a vivir en una sociedad democr�tica y libre de corrupci�n. Ante el presente contexto la cultura de paz encierra una gran esfera multidimensional que cohabita simbi�ticamente con el Sumak Kawsay constitucional, empero se debe resaltar que la mencionada cultura pacifico contempla el cuidado de la vida establecido claramente en el Art. 66 numeral 1, por lo tanto aunque la carta fundamental ecuatoriano no establece directamente la prohibici�n del uso y porte de las armas en el Ecuador, el Art. 427 de la misma dispone: Art. 427.- Las normas constitucionales se interpretar�n por el tenor literal que m�s se ajuste a la Constituci�n en su integralidad. En caso de duda, se interpretar�n en el sentido que m�s favorezca a la plena vigencia de los derechos y que mejor respete la voluntad del constituyente, y de acuerdo con los principios generales de la interpretaci�n constitucional. En tal sentido el poder Legislativo nacional, con la erogaci�n de la LEY ORG�NICA REFORMATORIA A VARIOS CUERPOS LEGALES PARA EL FORTALECIMIENTO DE LAS CAPACIDADES INSTITUCIONALES Y LA SEGURIDAD INTEGRAL de fecha mi�rcoles 29 de marzo de 2023, la cual establece:
Art�culo 53.- Sustit�yase el art�culo 360 del C�digo Org�nico Integral Penal,
por el siguiente:
�Art. 360.- Tenencia y porte no autorizado de armas.- La tenencia consiste en la posesi�n de un arma de uso civil adquirida l�citamente con fines de defensa personal, deportivo o de colecci�n, que puede estar en determinado lugar, direcci�n particular, domiciliaria o lugar de trabajo, para lo cual se requiere autorizaci�n de la autoridad competente del Estado. La persona que, adquiriendo de manera l�cita un arma, tenga o posea armas de uso civil sin autorizaci�n de la autoridad competente del Estado ser� sancionada con pena privativa de libertad de seis meses a un a�o.
El porte consiste en llevar consigo o a su alcance un arma permanentemente dentro de una jurisdicci�n definida, para lo cual se requiere autorizaci�n de la autoridad competente del Estado. La persona que porte armas de fuego sin autorizaci�n ser� sancionada con pena privativa de libertad de tres a cinco a�os.
Al generar el control de constitucionalidad el presente Art. 360 reformado del C�digo Org�nico integral Penal COIP (Nacional, C�digo Org�nico Integral Penal , 2023), se puede inferir situaciones que devienen en claramente en inconstitucional:
1.- En el ac�pite inicial de la reforma se estipula la posesi�n de un arma de uso civil adquirida l�citamente con fines de "defensa", lo cual contradice y se contrapone a lo establecido en la Constituci�n Nacional�� Art. 163.- La Polic�a Nacional es una instituci�n estatal de car�cter civil, armada, t�cnica, jerarquizada, disciplinada, profesional y altamente especializada, cuya misi�n es atender la seguridad ciudadana y el orden p�blico, y proteger el libre ejercicio de los derechos y la seguridad de las personas dentro del territorio nacional.
Los miembros de la Polic�a Nacional tendr�n una formaci�n basada en derechos humanos, investigaci�n especializada, prevenci�n, control y prevenci�n del delito y utilizaci�n de medios de disuasi�n y conciliaci�n como alternativas al uso de la fuerza.
Para el desarrollo de sus tareas la Polic�a Nacional coordinar� sus funciones con los diferentes niveles de gobiernos aut�nomos descentralizados.� Con lo anteriormente expuesto de acuerdo al Art. 1 de la Carta Constitucional el pueblo m�ximo soberano entrega la obligaci�n de su defensa interna a la �Polic�a nacional de acuerdo al Art. 163, la cual deber� cumplir por tanto no resulta la defensa un argumento t�cnico ni constitucional para haberlo viabilizado su tenencia y uso. (Nacional, 2008)
Lo anteriormente se�alado se ratifica en lo contemplado en el Art. 393 ibidem. - El Estado garantizar� la seguridad humana a trav�s de pol�ticas y acciones integradas, para asegurar la convivencia pac�fica de las personas, promover una cultura de paz y prevenir las formas de violencia y discriminaci�n y la comisi�n de infracciones y delitos. La planificaci�n y aplicaci�n de estas pol�ticas se encargar� a �rganos especializados en los diferentes niveles de gobierno, como es el caso espec�fico de la polic�a nacional para la seguridad ciudadana interna y el ej�rcito ecuatoriano para la defensa fronteriza.
Por otro lado, de acuerdo a Art. 66 numeral 1 de la Carta Fundamental mediante el cual es Estado se all� obligado a precautelar la vida en todas sus formas, el presentar la caser�a animal como "deporte" resulta un completo descontexto constitucional con la norma infra, lo que perjudica gravemente el aparato constitucional de la concepci�n del buen vivir o Sumak Kawsay Constitucional.
En abril 2023 el actual ministro del Interior Mayor SP. Juan Zapata emite declaraciones en medios de comunicaci�n nacionales indicando que la mencionada LEY ORG�NICA QUE REGULA EL USO LEG�TIMO DE LA FUERZA aprobada en agosto 2022 posterior a los eventos de protesta social de junio del mismo a�o, no otorga el suficiente rango de acci�n a los efectivos policiales. Tomado en cuenta que en Chile su parlamento mediante ley otorg� al cuerpo de Carabineros la posibilidad de acci�n e intervenci�n inmediata mediante uso de la fuerza al primer atisbo de amenaza percibida de parte de los efectivos policiales en contra de los delincuentes. (Expreso, 2023)
La academia y los movimientos sociales no desean que nuestro pa�s se convierta en un territorio con violencia oficial como resulta reconocible en Norte Am�rica en donde personas pierden la vida por excesos policiales. A lo largo del a�o 2022 solo hubo doce d�as en los que no se registraron muertes violentas a manos de los cuerpos policiales en Estados Unidos. Seg�n los datos preliminares la cifra puede aumentar por las causas forenses en curso e indican que en 2022 se produjo un nuevo r�cord desde que hay registros: son 1.183 muertes, seg�n los datos del observatorio: Mapping Police Violence, en constante actualizaci�n y recogidas por el portal creative commons Truthout.
Solo en un 31% de los casos los homicidios de produjeron durante o despu�s de una situaci�n violenta, en otro tercio de los casos el homicidio sucedi� a un momento de huida por parte de la v�ctima. En un 10% de los casos est� demostrado que la v�ctima no ten�a ning�n arma. La combinaci�n de homicidios a personas con problemas mentales, por discusiones de tr�fico y conflictos no violentos supera a los casos de violencia mientras se comet�a un delito. (OPS, 2022)
El arma m�s com�n que lleva la v�ctima de un tiroteo policial mortal es una pistola. En 2022, 613 personas que portaban un arma fueron abatidas por la polic�a del pa�s, cuya triste tendencia lamentablemente ha adoptado el hermano pa�s chileno seg�n nuestro ministro Zapata, y que adicional lastimosamente con la aplicaci�n de tales tipos de leyes que promueven el uso de la fuerza: la violencia y la delincuencia al contrario de desaparecer, aumenta mucho m�s de manera exponencial.�
Se comprende de una manera muy preocupante las grav�simas connotaciones operativas de la legalizaci�n de la tenencia y porte de armas en el Ecuador conjuntamente con la vigencia y aplicaci�n de la Ley que regula el uso leg�timo de la fuerza en un posible escenario de protesta social, en donde la poblaci�n haciendo uso leg�timo de su derecho constitucional a la resistencia y con la posibilidad legal de portar armas se van enfrentado a la fuerza p�blica en este caso a los efectivos de la polic�a nacional en cumplimiento de ordenes espec�ficas. Cuyo hipot�tico escenario trastoca de una forma inconmensurable toda la cultura de paz y el cuidado de la vida establecido entre los derechos de libertad conteplados en el Art. 66 de Carta Fundamental, como mandados constitucionales de cumplimiento obligatorio para el Estado nacional en consonancia con las pol�ticas aplicadas del gobierno de turno. (Nacional, 2008)
Resultados y discusi�n
La revisi�n bibliogr�fica realizada revela que la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil es un tema complejo y pol�mico que necesita ser abordado de manera integral. Los aspectos jur�dicos del tema pueden ser evaluados a favor o en contra, dependiendo de factores como el derecho a la autodefensa, la seguridad ciudadana, el control del tr�fico ilegal de armas, y el riesgo de accidentes o uso inapropiado. Desde una perspectiva psicol�gica, la disponibilidad de armas de fuego en hogares o comunidades puede incrementar el riesgo de lesiones y muertes por violencia dom�stica, suicidio, homicidio y accidentes. Asimismo, los propietarios de armas de fuego pueden estar m�s propensos a sufrir abuso de trastornos de salud mental, tales como trastornos de estr�s postraum�tico, trastornos del �nimo y de sustancias.
Por lo tanto, la revisi�n bibliogr�fica sugiere la necesidad de un enfoque multidisciplinario para abordar la cuesti�n de la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil. Es fundamental que los debates y decisiones al respecto se basen en informaci�n precisa y confiable, considerando no solo los aspectos jur�dicos, sino tambi�n los psicol�gicos y sociol�gicos. Adem�s, se requieren m�s investigaciones sobre las consecuencias de la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil, a fin de tomar decisiones m�s informadas y bien fundamentadas acerca de este tema.
Conclusiones
La legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en poblaci�n civil es un tema complejo que necesita ser abordado de manera integral. Se requiere un enfoque multidisciplinario que considere aspectos jur�dicos, psicol�gicos y sociol�gicos.
Desde una perspectiva psicol�gica, la disponibilidad de armas de fuego puede incrementar el riesgo de lesiones y muertes por violencia dom�stica, suicidio, homicidio y accidentes, y los propietarios de armas de fuego pueden estar m�s propensos a sufrir trastornos de salud mental.
Desde una perspectiva sociol�gica, la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego puede tener implicaciones en la percepci�n de seguridad, la din�mica social, la violencia y la criminalidad.
Desde el �mbito de la correcta aplicaci�n y observancia de los derechos y garant�as de primera generaci�n establecidos en el marco de la convencionalidad ratificados por el Ecuador, presenta muchos matices de inconstitucionalidad, violenta la progresividad de derechos ciudadanos en cuanto a la obligatoriedad de un ambiente de paz como pol�tica de estado y gubernamental, trastoca la posibilidad de operatividad del derecho constitucional de la resistencia. Paralelamente con la vigencia de la ley de uso leg�timo de fuerza se constituye en un caldo de cultivo para potenciar o solo la violencia delictiva, sino seguramente degenerando en la posibilidad de excesos policiales derivados del porte de armas de las personas civiles. De lo anteriormente descrito se toma como antecedente las tristemente c�lebres muertes en norte Am�rica ocasionadas por el personal policial, derivados de la reducci�n de derechos ciudadanos presentados por la vigencia del �Acta Patriota" como respuesta a los atentados terrositas del 11 de septiembre del 2001.
Tanto la ley de uso leg�timo de la fuerza como la legalizaci�n modificatoria al COIP, para la tenencia y porte de armas se reconoce como una manera de estado y sociedad facticos en donde la fuerza predomina sobre los derechos constitucionales y derechos humanos.
La revisi�n bibliogr�fica sugiere la necesidad de m�s investigaciones sobre las consecuencias de la legalizaci�n del porte o tenencia de armas de fuego en la poblaci�n civil, a fin de tomar decisiones m�s informadas y bien fundamentadas acerca de este tema.
Referencias
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� 2023 por los autores. Este art�culo es de acceso abierto y distribuido seg�n los t�rminos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribuci�n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0)
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