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Estrategia de la gesti�n de cuencas hidrogr�ficas para la mitigaci�n de inundaciones en la ciudad de Chone, Provincia de Manab�

 

Watershed management strategy for flood mitigation in the city of Chone, Province of Manab�

 

Estrat�gia de gest�o de bacias hidrogr�ficas para mitiga��o de enchentes na cidade de Chone, Prov�ncia de Manab�

 

C�sar Augusto Sol�rzano-Villegas ^I

csolorzano7594@utm.edu.ec

https://orcid.org/0000-0001-9334-3480

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Luis Santiago Quiroz-Fernandez ^II

santiago.quiroz@utm.edu.ec

https://orcid.org/0000-0002-2962-0583 �

 

Correspondencia: csolorzano7594@utm.edu.ec

 

Ciencias t�cnicas y aplicadas

Art�culo de revisi�n

 

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*Recibido: 10 de enero de 2021 *Aceptado: 15 de febrero de 2021 * Publicado: 05 de marzo de 2021

 

       I.            Ingeniero Civ�l, Estudiante de la Maestria en Hidraulica Mencion de Recursos Hidricos del Istituto de Posgrado de la Universidad T�cnica de Manab�, Portoviejo, Ecuador.

    II.            Magister en Administracion Ambiental, Doctor en Ciencias Tecnicas, Ingeniero Civil, Universidad T�cnica de Manab�, Portoviejo, Ecuador.

 

Resumen

La ubicaci�n de la ciudad de Chone aguas abajo de la confluencia de los r�os Garrapata, Grande y Mosquito, la morfolog�a de la zona, el manejo de los cursos superficiales, y las acciones de desarrollo en las zonas ribere�as expresadas en el alarmante proceso de deforestaci�n que se tiene en las cabeceras de las cuencas vertientes de los r�os mencionados, determinan en temporada de invierno por la intensidad de las precipitaciones un alto grado de riesgo frente a las fuertes inundaciones con fuertes impactos para sus habitantes; y su manejo es un desaf�o para comunidades y autoridades competentes. En respuesta a esta situaci�n se realiza la presente investigaci�n con el objetivo de analizar algunas estrategias para la gesti�n de cuencas hidrogr�ficas para la mitigaci�n de inundaciones en la ciudad de Chone, provincia de Manab�, a fin de disminuir el impacto negativo de las inundaciones y promover un nuevo marco que oriente a la comprensi�n del manejo de las mismas. Para esto se realiz� una breve caracterizaci�n de los elementos f�sico-naturales y socio econ�micos de la ciudad de Chone con el fin de conocer el problema sobre el teme de las inundaciones. De igual manera una revisi�n de la literatura sobre el manejo de inundaciones que permiti� considerar la problem�tica de forma hol�stica, teniendo en cuenta que el riesgo de inundaciones se origina por las diferentes actividades que tienen lugar en la cuenca, y que las alternativas que se propongan ser�n sostenibles s�lo si se considera la cuenca como un todo, en la que las actividades que tienen lugar en sus cuencas alta y media tienen influencia en lo que sucede en las inundaciones que se presentan aguas abajo, lo cual hace necesario la cogesti�n para el manejo y gesti�n de cuencas hidrogr�ficas.

Palabras claves: Riesgo; inundaciones; estrategias; mitigaci�n; cuenca; gesti�n.

 

Abstract

The location of the city of Chone downstream from the confluence of the Garrapata, Grande and Mosquito rivers, the morphology of the area, the management of surface courses, and the development actions in the riparian zones expressed in the alarming process of deforestation That is found in the headwaters of the river basins mentioned, determine in winter season by the intensity of the rains a high degree of risk in front of the strong floods with strong impacts for its inhabitants; and its management is a challenge for communities and competent authorities. In response to this situation, the present research is carried out with the objective of analyzing some strategies for the management of hydrographic basins for the mitigation of floods in the city of Chone, province of Manab�, in order to reduce the negative impact of floods and promote a new framework that guides the understanding of their management. For this, a brief characterization of the physical-natural and socio-economic elements of the city of Chone was carried out in order to know the problem of the fear of floods. In the same way, a review of the literature on flood management that allowed considering the problem holistically, taking into account that the risk of flooding originates from the different activities that take place in the basin, and that the proposed alternatives will be sustainable only if the basin is considered as a whole, in which the activities that take place in its upper and middle basins have an influence on what happens in the floods that occur downstream, which makes co-management necessary for management and watershed management.

Keywords: Risk; floods; strategies; mitigation; basin; management.

 

Resumo

A localiza��o da cidade de Chone a jusante da conflu�ncia dos rios Garrapata, Grande e Mosquito, a morfologia da �rea, a gest�o dos cursos de superf�cie e as a��es de desenvolvimento das zonas ribeirinhas expressas no alarmante processo de desmatamento que se constata nas cabeceiras das bacias hidrogr�ficas citadas, determinam no inverno pela intensidade das chuvas um alto grau de risco frente �s fortes enchentes com fortes impactos para seus habitantes; e sua gest�o � um desafio para as comunidades e autoridades competentes. Em resposta a esta situa��o, esta pesquisa � realizada com o objetivo de analisar algumas estrat�gias de gest�o de bacias hidrogr�ficas para a mitiga��o de inunda��es na cidade de Chone, prov�ncia de Manab�, a fim de reduzir o impacto negativo das inunda��es e promover um novo arcabou�o que orienta o entendimento de sua gest�o. Para isso, foi realizada uma breve caracteriza��o dos elementos f�sico-naturais e socioecon�micos da cidade de Chone a fim de conhecer o problema do medo de enchentes. Da mesma forma, uma revis�o da literatura sobre gest�o de cheias que permitiu considerar o problema de forma hol�stica, tendo em conta que o risco de cheias decorre das diferentes actividades que decorrem na bacia, e que as alternativas propostas s� ser�o sustent�veis ​​se a bacia � considerada como um todo, em que as atividades ocorridas em suas bacias superior e m�dia influenciam o que ocorre nas enchentes que ocorrem a jusante, o que torna o co-gerenciamento necess�rio para o manejo e gest�o da bacia.

Palavras-chave: Risco; inunda��es; estrat�gias; mitiga��o; bacia; gest�o.

 

Introducci�n

Los creciente cambios en el clima, tanto por causas naturales como por causas antr�picas han puesta a un sin n�mero de comunidades (principalmente aquellas ubicadas en las planicies costeras) en una situaci�n de vulnerabilidad frente a los fen�menos hidrometeoro l�gicos, los cuales han ido en incremento en los �ltimos a�os debido al cambio clim�tico. Esta vulnerabilidad se ha manifestado en distintas ocasiones, desde hace varios siglos, y ha generado, una serie de desastres a causa de inundaciones con afectaciones en el capital econ�mico, industrial, agr�cola, as� como la vida misma de sus pobladores.

Ecuador no escapa a esta realidad, por sus condiciones naturales seg�n la Secretaria de Gesti�n de Riesgos SNGR (2014) es un pa�s que posee un alto �ndice de vulnerabilidad ante amenazas de origen natural y antr�pico; a tal punto que, durante el periodo 1900-2009 se registraron aproximadamente 65 desastres de gran magnitud, de los cuales el 60% fueron provocados por fen�menos hidrometereol�gicos, entre ellos: inundaciones, sequ�as y deslizamientos h�medos asociados con la variabilidad clim�tica que afectan extensas regiones del pa�s.; y el 40% por eventos geof�sicos, ocasionando severas perdidas econ�micas y humanas.

En el litoral ecuatoriano, las precipitaciones en las estaciones invernales generalmente se concentran entre los meses de febrero a mayo; no obstante en circunstancias especiales como por ejemplo el fen�meno �El Ni�o�, provocan lluvias extremadamente fuertes, que incluso pueden extenderse por m�s tiempo y provocar graves inundaciones en zonas aluviales de los r�os y sus tributarios. Durante estas temporadas lluviosas intensas, los da�os a la infraestructura social, vial y productiva fueron cuantiosos (Lucas, 2017).

El evento �El Ni�o� 1997 � 1998 dej� alrededor de 300 muertos y desaparecidos, una gran destrucci�n de infraestructura productiva, vial y habitacional que adem�s del dolor producido por la p�rdida de vidas humanas, los evacuados y damnificados sumaron varios miles que se vieron obligados a acudir a albergues temporales o familiares, ante la destrucci�n de sus viviendas, pueblos y cultivos (Pauker, 2008).���������

En este sentido, la provincia de Manab� es una de las provincias cuya amenaza potencial son las inundaciones, que ocurren principalmente por el desbordamiento de los r�os debido al exceso de precipitaciones. Chone cant�n ubicado en un valle al norte de la mencionada provincia, est� expuesta a una o m�s amenazas de origen natural de tipo s�smica, de movimiento en masa y de inundaciones.�

Particularmente la ciudad de Chone a lo largo de su historia, ha sido afectada por una serie de inundaciones masivas y contin�as que en su espacio geogr�fico (Provocadas por el Fen�meno de El Ni�o 1997-1998 en la estaci�n inverna ecuatoriana) perjudican su rica y productiva econom�a basada en la agricultura y ganader�a. Las incontrolables inundaciones acarrearon un sinn�mero de pestes y epidemias tropicales que han afectado a la poblaci�n consider�ndolas incluso como normales y comunes por hoy. Entre las citadas est�n el dengue, paludismo, entre otras. (Plan de Desarrollo y� Ordenamiento Territorial del Cant�n Chone 2014-2019).

Por consiguiente, el presente proyecto tiende a coadyuvar con el proceso de optimizaci�n de las capacidades operativas de las autoridades y la capacitaci�n de la poblaci�n del �rea, que enfrenta amenazas permanente a inundaciones como el caso de la comunidad de Chone, mediante� el estudios de estrategias de mitigaci�n de inundaciones, que se suceden desde la gesti�n de la inundaci�n a trav�s del control de la peligrosidad mediante la obra hidr�ulica, hacia la progresiva concepci�n del problema como un hecho territorial, dependiente del modelo de ocupaci�n del suelo.

Igualmente, se busca contribuir al desarrollo arm�nico de la comunidad de Chone, pero ante todo colaborar con los procesos de prevenci�n, mitigaci�n y control de las inundaciones que afectan potencialmente al sector agropecuario y provocan serias p�rdidas econ�micas sin descartar los impactos ambientales que requieren de un largo tiempo para lograr su restauraci�n econ�mica y social.

 

Materiales y M�todos

La presente investigaci�n es de car�cter descriptivo - documental con una visi�n cr�tica reflexiva de los temas que aqu� se abordan, pues a trav�s de la investigaci�n documental se busca generaci�n de nuevos conocimientos con base a otros estudios ya realizados en el mismo campo que sirvan de complemento a la que se realiza. En este sentido, se mostraran algunas consideraciones oportunas para entender y comprender el manejo sostenible de inundaciones mediante el manejo de cuencas hidrogr�ficas.

En este sentido, se seleccion� un listado de conceptos claves asociada a los objetivos como: considerar los enfoques para la gesti�n de inundaciones, la reducci�n del riesgo de desastres, abordar la visi�n ecosist�mica en la gesti�n integral de los recursos h�dricos y analizar algunos factores que contribuyen a mitigar las inundaciones.

 

An�lisis y discusi�n de los resultados

Breve Caracterizaci�n de los Elementos F�sico-Naturales y Socio Econ�micos de la Ciudad de Chone

Para la Organizaci�n Meteorol�gica Mundial (OMM, 2009),las inundaciones representan uno de los mayores peligros naturales para el desarrollo sostenible, y en Ecuador los desastres de mayor impacto se han asociado a fen�menos hidrometeorl�gicos, sismos, erupciones volc�nicas y deslizamientos. Entre los a�os 1900 y 2011, el 77% de los desastres en el mundo estuvieron relacionados con fen�menos hidrometeorol�gicos (EM-DAT, 2011).

En el Ecuador el fen�meno de las inundaciones es un problema complejo de incidencia meteorol�gica, oceanogr�fica e hidrol�gica. Inciden por ejemplo las corrientes marinas del Pac�fico oriental, debilitamiento de los vientos alisios, mayor evaporaci�n impuesta por las elevadas temperaturas y el efecto orogr�fico de los Andes, originando intensas y persistentes precipitaciones en toda la costa de pa�s. En lo hidrol�gico es un problema de mec�nica fluvial, en el que intervienen fen�menos como el desbordamiento de los r�os, acumulaci�n de aguas lluvias e influencia de las mareas (Gallardo, 1987). Pero, �Qu� son las inundaciones?

En el Centro Nacional para la Prevenci�n de Desastres � CENAPRED de M�xico (2011), definen por inundaci�n a �aquel evento que debido a la precipitaci�n, oleaje, marea de tormenta, o falla de alguna estructura hidr�ulica provoca un incremento en el nivel de la superficie libre del agua de los r�os o el mar mismo, generando invasi�n o penetraci�n de agua en sitios donde usualmente no la hay y generalmente, causan da�os en la poblaci�n, agricultura, ganader�a e infraestructura� (SNGR/ECHO/UNISDR, 2012). Por su parte, Benitez y G�mez (2015) as inundaciones constituyen amenazas naturales que se presentan ocasionalmente y provocan p�rdidas econ�micas, sociales y humanas. Para reducir sus efectos se requiere de una predicci�n r�pida, una informaci�n oportuna y acciones de prevenci�n antes de la ocurrencia del suceso. Es la ocupaci�n por el agua de zonas o �reas sensibles que en condiciones normales permaneces secas.

En este sentido, las inundaciones en el Ecuador se presentan de manera recurrente, especialmente en las cuencas bajas del Litoral Ecuatoriano, cuencas de la Amazon�a y en algunas cuencas de la regi�n Andina. Sus principales factores son: precipitaciones estacionales, lluvias de alta intensidad y corta duraci�n especialmente en cuencas altas, fen�menos clim�ticos globales como el fen�meno de El Ni�o, represamiento de los r�os, penetraciones marinas, limitada capacidad de evacuaci�n de drenajes en las ciudades, entre otros.

En el reporte hist�rico de eventos naturales - Febrero (2010-2015) se se�ala que durante los meses de febrero en los �ltimos 6 a�os, se han registrado un total de 969 eventos adversos de tipo natural, llev�ndose a cabo 79 eventos en la provincia de Manab�, causando serias afectaciones en la zona urbana del cant�n de Chone y las poblaciones de las parroquias de Santa Rita y San Antonio las cuales se ubican aguas abajo de la confluencia de los r�os Garrapata, Grande y Mosquito, situaci�n que las expone a un alto riesgo de vulnerabilidad y al embate de graves inundaciones en cada temporada invernal, por la intensidad de las precipitaciones, la morfolog�a de la zona, de la red hidrogr�fica y el acelerado proceso de deforestaci�n que se registra en las cabeceras de las cuencas vertientes de los r�os. (Secretar�a de Gesti�n de Riesgos, 2016). Mostrando en el mapa 1 la divisi�n pol�tica territorial del cant�n.

 

Mapa 1: L�mites y divisi�n parroquial del cant�n

Fuente: Centro del Agua y Desarrollo Sustentable (2012)

 

Mapa 2: Densidad poblacional ciudad de Chone -Zona urbana

Fuente: Centro del Agua y Desarrollo Sustentable (2012)

 

En el mapa 2, muestra como el cant�n Chone se encuentra en un valle al cual aportan tres r�os principales, uno de los cuales es el r�o Chone. Este atraviesa por la cabecera urbana de la ciudad. Es el m�s extenso de la provincia de Manab� y su poblaci�n se encuentra dispersa en mayor proporci�n en la zona rural. Hist�ricamente el cant�n ha estado expuesto a constantes inundaciones y sequ�as tanto a nivel urbano como rural. Tiene una topograf�a plana, en el centro de la poblaci�n y zonas monta�osas que no pasan de los 300 metros de altura, y una superficie total de 3.570,60 km�.������

De acuerdo al censo de poblaci�n y vivienda de 2010, el cant�n de Chone tiene una poblaci�n de 126.491 habitantes distribuidos de la siguiente manera: 63.283 hombres y 63.208 mujeres. La poblaci�n se declara mayoritariamente mestiza 68,83% y montubia el 20,33%; existe un 5,62% que se declara afro ecuatoriano, un 4,11% se define como blanco, lo que suma el 98,88% de la poblaci�n el saldo 1,12% se define como mulato, ind�gena o de otros grupos. La poblaci�n durante los �ltimos 9 a�os se ha incrementado un 7,51%, lo que representa el 9,23% de la poblaci�n total de la provincia de Manab�, lo que lo convierte en el tercer cant�n m�s poblado de la provincia (Censo de Poblaci�n y Vivienda, 2010).��������������������������

A nivel cantonal la ciudad de Chone ha sufrido grandes perjuicios por efecto de las inundaciones lo que ha incidido en el incremento en los niveles de pobreza. Su econom�a depende de dos recursos b�sicos: la agricultura y la ganader�a.

En el estudio realizado por la Empresa P�blica del Agua quien lleva a cabo el desarrollo del Proyecto Prop�sito M�ltiple Chone (2019) se resalta que las inundaciones que afectan cada a�o a la ciudad de Chone son el resultado de la falta de drenaje del r�o Chone, la ausencia de un sistema eficiente de alcantarillado pluvial que permita evacuar las precipitaciones de gran intensidad que ocurren sobre la cuenca hidrogr�fica de los r�os Chone, Grande, Garrapata y Mosquito.�������������������� �������������������������������������

En el mapa 3, muestra como la red hidrogr�fica del cant�n se conforma de r�os cuyos terrenos est�n sujetos a inundaci�n debido a la presencia de esteros, charcos y lagos intermitentes. Los r�os principales cercanos a la cabecera cantonal son el r�o Grande y el r�o Rancho Viejo que alimentan al R�o Chone. El R�o Chone recorre del sur-este del cant�n al oeste, atravesando completamente la zona urbana. (Centro del Agua y Desarrollo Sustentable, 2012).

 

Mapa 3: Orograf�a e hidrograf�a del cant�n

Fuente: Centro del Agua y Desarrollo Sustentable (2012)

 

La Empresa P�blica del Agua (2019), sostiene que de acuerdo con los datos hist�ricos, la ciudad de Chone ha soportado m�s de 200 inundaciones en un per�odo de 35 a�os hasta 1998, y 16 inundaciones hasta el a�o 2003. En el a�o 2008 la ciudad soport� quiz�s una de las peores cat�strofes derivadas de las inundaciones que sumadas otros factores, sumergieron a la poblaci�n en una grave situaci�n de vulnerabilidad y riesgos de epidemias, entre otros impactos negativos. Como ejemplo de estos eventos, se puede citar que en el a�o 1983, por efecto de la influencia del Fen�meno de El Ni�o, la ciudad sufri� doce inundaciones, entre las que cabe mencionar, la registrada el 2 de mayo, en la que el r�o Grande y el Garrapata desbordaron alcanzando niveles m�ximos conocidos hasta esa fecha en las estaciones de aforo desde su instalaci�n en 1971.

Esta situaci�n ha afectado considerablemente una serie de infraestructura como la planta de agua potable, las bombas de captaci�n de agua, las lagunas de oxidaci�n, la red vial urbana agravando el desplazamiento terrestre durante las situaciones de emergencia, el terminal terrestre de pasajeros que se encuentra cerca del r�o tambi�n expuesto a las inundaciones, y la afectaci�n de extensas �reas agr�colas lo cual profundiza los problemas socio � econ�micos con la expansi�n de la ciudad, desmejora la salud p�blica, restringe el comercio, educaci�n, comunicaciones, reducci�n de la tasa de crecimiento demogr�fico, intensificaci�n del trabajo informal, incremento de la desocupaci�n, que condicionan y limitan a sus comunidades a escasas alternativas de desarrollo que les permitan alcanzar niveles de producci�n rentable y sostenible, que garanticen un relativo bienestar econ�mico mediante el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, ecol�gicos y humanos disponibles en la zona (Empresa P�blica del Agua, 2019).

Debido a los graves perjuicios causados por las inundaciones a la ciudad de Chone y su zona circundante, la preocupaci�n de los gobiernos locales, provinciales y nacionales, ha sido constante, as� como la b�squeda de soluciones mediante la realizaci�n de estudios y la ejecuci�n de obras de remediaci�n y mitigaci�n de los efectos.

Por tanto, la Secretar�a Nacional de Planificaci�n y Desarrollo (SENPLADES) en el 2010 indica la necesaria puesta en marcha de proyectos que, seg�n su consideraci�n mejorar� la calidad de vida de los habitantes del cant�n Chone, provincia de Manab� mediante la dotaci�n de seguridad ante eventos h�dricos, la reducci�n de enfermedades de origen h�drico y el incremento de sus ingresos econ�micos...� Ante esta situaci�n, la Secretar�a Nacional del Agua � SENAGUA, apunta a que la mayor problem�tica son los desastres ocasionados por inundaciones y/o sequ�as de las provincias de Guayas y Manab�. Por ello, inicia con los proyectos multiprop�sito cuyo objetivo es la construcci�n de represas, para control de inundaciones en temporada lluviosa y dotar de agua a la poblaci�n (Agua Potable y Riego) en �poca de estiaje (Milagro, M�ltiple Chone, presa Las Gilses, control de inundaciones Bulubulu � Ca�ar � Naranjal, Sistema de control de inundaciones de cuenca baja del r�o Guayas). (SNGR/ECHO/UNISDR, 2012). En los actuales momentos el proyecto se encuentra en una fase de pruebas.

 

De la Gesti�n del Riesgo de Inundaci�n a la Gesti�n Integrada de las Inundaciones

La magnitud de los da�os evidenciados en p�rdidas humanas y materiales asociadas con el impacto de las inundaciones suscitadas en los �ltimos a�os ha tra�do como consecuencia una reflexi�n seria, y un �lgido debate sobre los factores ajenos a los eventos f�sicos en s�, que podr�an ayudar a explicar los niveles de destrucci�n sufrido en la econom�a, en la sociedad y el impacto ambiental. En los �ltimos a�os la tendencia dominante ha sido encontrar una explicaci�n con base a un conjunto condiciones no solo de car�cter t�cnico, sino econ�micos, sociales y ambientales existentes, en la zona de impacto.

Es por ello, que para comprender la gesti�n de riesgo de inundaci�n hay que comprender lo que significan los tres conceptos relacionados: inundaci�n, riesgo y gesti�n del riesgo. En p�rrafos anteriores definimos que una inundaci�n es el fen�meno que sucede cuando una masa de agua sobrepasa la capacidad hidr�ulica de los cauces y ocupa las m�rgenes de inundaci�n, afectando ciertas �reas por un periodo de tiempo. El riesgo es la combinaci�n de la probabilidad de que se produzca una inundaci�n y de las posibles consecuencias negativas para la salud humana, el medio ambiente, el patrimonio cultural y la actividad econ�mica, asociada a una inundaci�n.

En cuanto a la gesti�n de riesgo Naciones Unidas a trav�s de la Estrategia Internacional para la reducci�n de desastres (UNISDR, 2009), indica que la gesti�n del riesgo se constituye en el enfoque y la pr�ctica sistem�tica de gestionar la incertidumbre para minimizar los da�os y las p�rdidas potenciales. La gesti�n del riesgo abarca la evaluaci�n y el an�lisis del riesgo, al igual que la ejecuci�n de estrategias y de acciones espec�ficas para controlar, reducir y transferir el riesgo.

As� tenemos que la gesti�n del riesgo de inundaci�n es considerada por Lara (2013) como �un proceso hol�stico que busca maximizar los beneficios positivos y minimizar los efectos negativos que un anegamiento temporal produce en un determinado territorio, a trav�s de la utilizaci�n de las herramientas legales, cient�ficas, t�cnicas, administrativas y pol�ticas disponibles y orientadas a la consecuci�n del bien com�n� (p. 61).

Para este autor, la gesti�n del riesgo no trata solo de la reducci�n del riesgo en si, ya que adem�s involucra la comprensi�n que en t�rminos sociales se requiere de la participaci�n de los diversos estratos, sectores de inter�s y grupos representativos de conductas y modos de vida, para comprender como se construye un riesgo social, colectivo, con la concurrencia de los diversos sectores de una regi�n, sociedad, comunidad o localidad concreta.

De lo anterior se desprende, que la gesti�n de riego tal y como lo plantea Lavell, Narv�ez y P�rez (2009),� no se trata simplemente de minimizar la vulnerabilidad, sino que a trav�s de ella se apuesta por la comprensi�n del comportamiento de los elementos naturales y la b�squeda de acuerdos sociales para soportar o utilizar productivamente los impactos, sin eliminar la obtenci�n inmediata de beneficios.� El manejo de los recursos naturales y del ambiente, en general, debe desarrollarse en condiciones de seguridad dentro de los l�mites posibles y aceptables para la sociedad en consideraci�n. Esto significa un proceso de control sobre la construcci�n o persistencia de amenazas y vulnerabilidad.

As�, la gesti�n no puede ser reducida a la idea de una obra o una acci�n concreta como es por ejemplo, la construcci�n de un dique, una presa o una pared de retenci�n para impedir inundaciones y deslizamientos. M�s bien se refiere al proceso por medio del cual un grupo humano o individuo toman conciencia del riesgo que enfrenta, lo analiza y lo entiende, considera las opciones y prioridades en t�rminos de su reducci�n, considera los recursos disponibles para enfrentarlo, dise�a las estrategias e instrumentos necesarios para enfrentarlo, negocia su aplicaci�n y toma la decisi�n de hacerlo.

Otro aspecto a considerar en la comprensi�n en el manejo de las inundaciones es la intervenci�n antr�pica y su influencia en la ocurrencia de inundaciones, y aunque el grado de afectaci�n var�a, generalmente tienden a agravar los peligros acentuando los picos de inundaci�n. Entonces en ambientes urbanos, los peligros de inundaci�n deben ser vistos como consecuencia de factores naturales y humanos a fin de poder tener un conocimiento real del comportamiento de la cuenca y dirigir las estrategias para un verdadero control de inundaciones. Al ser consciente de que las acciones que se realizan en las cuencas tienen incidencia o afectaci�n que genera condiciones vulnerables frente las inundaciones, se puede llevar a cabo un proceso de sensibilizaci�n y la educaci�n sobre el riesgo como pilares fundamentales� en la prevenci�n y mitigaci�n del mismo (Lavell et al. 2009); es decir, comprender el riesgo y adaptarnos a convivir con �l.

De ah� que la gesti�n de riesgo de inundaci�n es un proceso que debe ser asumido por todos los sectores de la sociedad y no como suele interpretarse, �nicamente por el gobierno o el Estado como garante de la seguridad de la poblaci�n, ya que sin la participaci�n comunitaria, sin la activaci�n de los actores locales, en el proceso del manejo del riesgo, no estamos en presencia de una experiencia real, transformadora de las condiciones de vulnerabilidad.

En s�ntesis la Gesti�n integral de riesgo de inundaciones debe verse como un componente �ntegro e integral y funcional del proceso de gesti�n del desarrollo en todos los �mbitos� y a diferente escala: global, sectorial, territorial, urbano, local, comunitario o familiar; y de la gesti�n ambiental, en b�squeda de la sostenibilidad. Un eje integrador que debe atravesar horizontalmente todas las fases del ciclo de los desastres. Es decir, no se reduce �a�, ni sustituye la idea y pr�ctica de la llamada prevenci�n y mitigaci�n de desastres. M�s bien, es un enfoque hol�stico y pr�ctico que orienta estas actividades, adem�s de los preparativos, la respuesta de emergencia, la rehabilitaci�n y la reconstrucci�n. Un todo Integral.

 

Estrategias para el Control de Inundaciones

Tradicionalmente el manejo de inundaciones en nuestro pa�s ha estado enfocado a medidas de respuesta, recuperaci�n y rehabilitaci�n de los desastres, pasando por alto medidas preventivas y de mitigaci�n. De igual manera, su responsabilidad por muchos a�os, ha estado delegada solo en las instituciones del Estado, descartando la participaci�n de las comunidades en todos los momentos del proceso. Sin embargo, en los �ltimos a�os, a nivel global se ha venido dando un cambio significativo frente a esta realidad.

Las medidas se orientaban, principalmente, a intentar controlar el fen�meno, donde la construcci�n de infraestructuras de defensa era la principal, era lo que se conoc�a como el enfoque de control de inundaciones donde la ingenier�a plasmaba, a trav�s de la obra hidr�ulica (canalizaciones, construcci�n de diques, muros de defensas, represas), su incuestionable protagonismo. No obstante, desde la segunda mitad del siglo XX se hab�a iniciado de manera reducida un cuestionamiento a esa realidad vigente. Se inici� as� la discusi�n sobre la necesidad de mejorar el enfoque basado en el control, que propiciaba la obra hidr�ulica, complement�ndolo con medidas de acci�n que consideraran tanto los aspectos hidrometeorol�gicos como los procesos sociales. A la pr�ctica, ello implicaba el desarrollo de un sofisticado conjunto de acciones que combinan las medidas de car�cter estructural con las de car�cter no estructural (Lara, 2013).

En este sentido autores como Ollero (2015); plantea que el manejo del riesgo de inundaciones requiere un desarrollo hol�stico, de estrategias a mediano y largo plazo, con un enfoque participativo en el que se involucren tanto las instituciones como la comunidad afectada por las inundaciones, multi-disciplinario y transparente para la toma de decisiones. Una estrategia integrada que requiere no solo del uso de soluciones estructurales y no estructurales, que adem�s de da�ar gravemente los ecosistemas fluviales con impactos que permanecen en el tiempo, han resultado caros, poco eficaces y muchas veces contraproducentes, prolongando los tiempos de inundaci�n.

Para este autor, estas medidas no han reducido el riesgo, sino todo lo contrario, al generar falsa seguridad, favoreciendo excesos de confianza que han catapulta crecientes ocupaciones humanas del espacio fluvial. Es evidente que en todas las cuencas los da�os por las inundaciones est�n aumentando por una mala gesti�n del territorio.

En este sentido, Sedano (2012), plantea que la ingenier�a debe ir m�s all� de trasladar la inundaci�n de un lugar a otro en la cuenca, de retener los vol�menes de escorrent�a pluvial, de movilizar r�pidamente los flujos de agua o aumentar la capacidad de transporte de los cauces, sobre todo porque las proyecciones muestran una tendencia hacia la desertificaci�n en las �reas donde las lluvias extremas est�n produciendo inundaciones catastr�ficas.

Las nuevas tendencias en el an�lisis de cuencas deben procurar desarrollos t�cnicos que se adapten mejor a las condiciones ambientales del lugar, pues una vez realizada la caracterizaci�n de la ciudad de Chrone se observa que las regiones hoy amenazadas por eventos extremos de inundaci�n, en el futuro son amenazadas por las sequ�as. Esto significa que la gesti�n integrada de las inundaciones no puede enfocarse solo en grandes obras estructurales, sino en el estudio del territorio y gesti�n integral del riesgo. Aunque el dise�o tradicional funcion� antes para disminuir el riesgo de inundaciones, en la actualidad se vienen presentado fallos debidos al impacto ambiental, a su corta sostenibilidad y a los costos de su manejo y cuidado.�

Aunado a esto, los �ltimos estudios sobre los efectos potenciales del cambio clim�tico hacen necesaria una revisi�n de las estrategias de gesti�n del riesgo de inundaciones a largo plazo y plantean un gran desaf�o que est� sacudiendo los cimientos de la hip�tesis que sustenta que la normalidad del pasado es el espejo para el futuro cada vez mas incierto (WMOa, 2009).

A partir de estas realidades cambiantes y complejas, se hace necesario interpretar el comportamiento de la cuenca y de los factores que intervienen en ella, as� como la necesaria consideraci�n del comportamiento de los sistemas clim�ticos, a fin de analizar la vigencia de tales m�todos. A continuaci�n se presenta una tabla, en donde se muestran las medidas estructurales, no estructurales y� los sistemas de drenaje de aguas superficiales (SUDES) considerados en el manejo de inundaciones.

 

Tabla 1: Medidas estructurales, no estructurales y SUDS en el manejo de inundaciones

Fuente: Castrill�n,� (2014)

 

En p�rrafos anteriores, se enunciaba la necesidad de comprender el riesgo y adaptarnos a convivir con �l. Este proceso de comprensi�n del riesgo requiere de un cambio cultural en las organizaciones e individuos involucrados, que impulsen la capacidad de aceptar puntos de vista diferentes relativos al riesgo, permitan modificar las pr�cticas existentes y utilizar alternativas innovadoras para su reducci�n (Ashley, Blanskby y Newman, 2012).

Al respecto, Ollero (2015) plantea que en los �ltimos a�os el consenso cient�fico es absoluto sobre la necesidad de una nueva estrategia de gesti�n de inundaciones basada en la restauraci�n fluvial, el ordenamiento territorial y urban�stico y la reducci�n de la exposici�n en las �reas inundables. �Hay que pensar en el futuro, convivir con las crecidas, adaptarnos al r�o. Es m�s barato y m�s inteligente. Unos r�os en buen estado, con un territorio fluvial extenso, el adecuado, nos dar�n mucho y no nos quitar�n nada�. (p.4).

Para este autor, mediante la restauraci�n fluvial como una medida de mitigaci�n frente a las inundaciones, es posible obtener un r�o sano, que funciona adecuadamente, que autorregule sus crecidas eficientemente y que con la ayuda de la herramienta de la ordenaci�n del territorio se reducir�an muy notablemente los da�os. Todo ello mediante la eliminaci�n o el retranqueo de diques, la demolici�n de obst�culos antr�picos que alteran los procesos de desbordamiento y la naturalizaci�n de los cauces. Esto permite que los procesos hidrogeomorfol�gicos sean m�s eficientes en un territorio fluvial m�s extenso.

Esta estrategia, es una estrategia de adaptaci�n, que consiste en favorecer el trajo del r�o, trabajar con el r�o y no contra �l. Por eso es efectiva y sostenible y ha sido refrendada por la Directiva europea de Gesti�n de Riesgos de Inundaci�n de 2007. (Ollero, 2015)

Sin duda alguna, las estrategias de mitigaci�n de inundaciones para el cant�n de Chone debe estar orientada a preservar el curso de agua en el mayor estado natural posible; desarrollar la capacidad de las sub-cuencas como elemento representativo del medio natural, para articular los valores naturales, culturales y simb�licos; evitar la ocupaci�n de m�rgenes, planicies de inundaci�n y otras �reas inundables vacantes, mediante la aplicaci�n de medidas de restricci�n, en cuyo cumplimiento el tratamiento del espacio abierto desempe�a un papel relevante; generar proyectos de paisaje fluvial de calidad, con continuidad a lo largo del curso, desde las �reas rurales pasando por las urbanas, y hasta su desembocadura, mediante la mejora en la calidad del agua y la asignaci�n de actividades compatibles.

Todo esto de la mano con el contexto comunitario, en donde necesariamente tal y como se mencion� en p�rrafos anteriores, la comunidad debe tomar conciencia del riesgo que enfrenta, lo analiza y lo entiende, considera las opciones y prioridades en t�rminos de su reducci�n, considera los recursos disponibles para enfrentarlo, dise�a las estrategias e instrumentos necesarios para enfrentarlo, negocia su aplicaci�n y toma la decisi�n de hacerlo. Si esto �ltimo no se cumple, no estar�amos hablando de una gesti�n integral de riesgo.

En consecuencia, una estrategia eficiente de mitigaci�n de inundaciones debe estar vinculada� con la aplicaci�n de una gesti�n integrada de cuencas, con las pol�ticas de buen uso del territorio, que evite en gran escala el desarrollo de obras de infraestructura y promuevan un uso respetable del suelo en las zonas locales de alta inestabilidad. De igual manera, una buena estrategia debe estar enmarcada en el desarrollo de planes de prevenci�n y respuestas elaborados con las comunidades, ya que al final ellas son quienes conocen su territorio, sus din�micas, sus necesidades� y fortalezas. �

 

Discusi�n de los Resultados

Las inundaciones como otros eventos naturales son parte del ciclo natural de los ecosistemas, siempre han existido y las comunidades han aprovechado sus beneficios dada la fertilidad de sus suelos y la biodiversidad de los ecosistemas presentes. No obstante, con el paso del tiempo, el desarrollo y la ocupaci�n desmedida del territorio hacen que las inundaciones se asocien a eventos catastr�ficos, y aunque en algunos casos juega un papel importante la variabilidad clim�tica, tambi�n es cierto que el ser humano frente a estas realidades busca dominar la naturaleza en vez de convivir con ella.

En este sentido, es necesario replantear, en la medida de lo posible soluciones de ingenier�a que respeten el espacio de los cursos de agua, y restaurar a condiciones m�s parecidas a las naturales permitiendo que se den mecanismos de autorregulaci�n de las crecidas, es decir, frente a un escenario complejo se demanda acciones sist�micas integradas, tanto estructurales como no estructurales en un contexto de gesti�n de riesgo de la cuenca.

Los sistemas de alerta temprana, son de igual manera herramientas eficaces para prevenir y a mitigar los da�os causados por las inundaciones. El buen uso de los instrumentos y tecnolog�as facilitan el seguimiento continuo de las condiciones meteorol�gicas e hidrol�gicas, y ayudan a una r�pida comunicaci�n con la poblaci�n, lo que les permite estar mejor preparada y emprender oportunamente la evacuaci�n en caso de las crecidas de sus r�os.

De igual manera, se hace estrictamente necesario replantear la visi�n de los gobernantes sobre la gesti�n integral de las inundaciones, la importancia de los programas emprendidos para fortalecer las capacidades de adaptaci�n ante desastres y la necesidad de adecuar el marco legal e institucional; especialmente en nuestro pa�s, en donde se hace completamente� necesario fortalecer la gesti�n integrada de riesgos en el manejo del territorio y de los recursos h�dricos.

 

Algunas consideraciones finales

La gesti�n de cuencas es compleja y requiere una instancia fiable y capaz de aglutinar a los grupos de actores que intervienen en el proceso. En este sentido, en la comunidad de Chone se deben fomentar actividades y acciones en torno a la gesti�n p�blica y comunitaria del manejo de cuencas para garantizar el bienestar social y ambiental. En tales actividades, la participaci�n debe ser esencial, activa y llegar hasta el nivel de poderes de decisi�n delegados. Los ciudadanos no son simples espectadores de las labores de prevenci�n. Su rol dentro del proceso debe ser m�s activo que ser solo beneficiarios (por supuesto, su participaci�n debe estar orientada en un modelo de prevenci�n y mitigaci�n del riesgo a la inundaci�n).

De igual manera la gesti�n integrada de inundaciones entendida como un componente de la gesti�n y cogesti�n de cuencas, planteada a partir de la gobernanza local, busca nuevos escenarios para el desarrollo de acuerdos institucionales, mayor educaci�n y capacitaci�n a los usuarios y actores locales y, principalmente, demanda cambios en la relaci�n entre Estado y sociedad, ya que supone la uni�n de fuerzas por el bien com�n.

Los derechos y obligaciones relacionados con la conservaci�n y protecci�n ambiental no s�lo corresponden al Estado y sus instituciones, sino tambi�n a otros actores que conviven en la comunidad como empresas p�blicas y privadas, poblaci�n urbana y rural, instancias de cooperaci�n t�cnica, comunidades campesinas y pueblos ind�genas. Esto implica no solo empoderamiento local en aspectos de manejo, control e interacci�n entre actores y organismos p�blicos, sino tambi�n capacitaci�n consensuada y apta para el ejercicio de una nueva cultura sustentable de preservaci�n de cuencas.

Una buena estrategia de gesti�n en cuencas se sustenta en la participaci�n de todos los actores y en la toma de decisiones compartidas basadas en la generaci�n de conocimiento, informaci�n, investigaci�n y comunicaci�n, como un todo entrelazado e inseparable.

Este proceso de generaci�n de conocimiento se debe fundamentar en un enfoque integral, sist�mico e innovador que permita crear y desarrollar liderazgo, capacidad gerencial y t�cnica. Para ello es fundamental: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser, aprender a emprender y aprender a convivir con nuestros iguales y con nuestro entorno.

El efecto de la variabilidad clim�tica, combinado con el acelerado aumento de la urbanizaci�n no planificada sobre �reas con riesgo de inundaci�n y la deficiente gesti�n del uso del suelo son las principales causas de transformaci�n de las inundaciones en desastres socio-naturales. Por ello, se hace imperante una pol�tica de ordenamiento territorial que de una mirada integral e integradora a la problem�tica presente en las cuencas, en donde se consideren las din�micas sociales emergentes y los imponentes cambios clim�ticos, lo cual exige la revisi�n del enfoque tradicional de dise�o que solo analiza eventos independientes y aislados, a otros m�s modernos centrados en: el an�lisis de eventos recurrentes que consideren la combinaci�n de amenazas, las condiciones antecedentes y el estudio de sistemas h�dricos completos en condiciones cr�ticas, entre otros aspectos.

Esto implica modificar el enfoque tradicional de la gesti�n de inundaciones y pasar de estar a salvo a una idea m�s flexible y con mayor capacidad de adaptaci�n para aprender a vivir con el riesgo de inundaciones, o ante cualquier evento f�sico natural o antr�pico, ya que los cambios en el clima generan impactos en la producci�n agropecuaria y en las planicies de inundaci�n urbanizadas; y porque el futuro crecimiento de la poblaci�n ejercer� todav�a m�s presi�n sobre los recursos naturales existentes..

 

Referencias

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�2020 por los autores. Este art�culo es de acceso abierto y distribuido seg�n los t�rminos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribuci�n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0)

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