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Consumo de az�cares y su relaci�n con los niveles de glicemia en estudiantes del �rea de salud de una Universidad Ecuatoriana

 

Sugar consumption and its relationship with blood glucose levels in students from the health area of ​​an Ecuadorian university

 

Consumo de a��car e sua rela��o com os n�veis glic�micos em estudantes da �rea de sa�de de uma universidade equatoriana

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Correspondencia: ramos-allison0338@unesum.edu.ec

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Art�culo de investigaci�n�

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*Recibido: 17 de abril de 2020 *Aceptado: 4 de mayo 2020 * Publicado: 26 de junio de 2020

 

       I.            Carrera de Laboratorio Cl�nico, Facultad Ciencias de la Salud, Universidad Estatal del Sur de Manab�, Jipijapa, Ecuador.

    II.            Carrera de Laboratorio Cl�nico, Facultad Ciencias de la Salud, Universidad Estatal del Sur de Manab�, Jipijapa, Ecuador.

�III.            Magister en Gerencia en Salud para el Desarrollo Local, Licenciada en Enfermer�a, Docente de la Carrera de Laboratorio Cl�nico, Facultad Ciencias de la Salud, Universidad Estatal del Sur de Manab�, Jipijapa Ecuador.

�IV.            Master Universitario en Gesti�n de la Seguridad Cl�nica del Paciente y Calidad de la Atenci�n Sanitaria, Licenciado en Enfermer�a, Docente de la Carrera de Laboratorio Cl�nico, Facultad Ciencias de la Salud, Universidad Estatal del Sur de Manab�, Jipijapa, Ecuador.

Resumen

El consumo excesivo de az�cares est� asociado con diversas patolog�as como sobrepeso, obesidad, alteraciones hep�ticas, des�rdenes del comportamiento, diabetes, enfermedad cardiovascular, h�gado graso, algunos tipos de c�ncer y caries dental. Adem�s, el consumo de az�cares puede contribuir al desarrollo de alteraciones psicol�gicas como la hiperactividad, el s�ndrome premenstrual y las enfermedades mentales. La glicemia es un indicador importante del estado metab�lico del organismo, por lo que la alteraci�n de sus valores normales es una alerta inminente de posibles fallas metab�licas.

El objetivo de esta investigaci�n fue identificar el consumo de az�cares y su relaci�n con los niveles de glicemia en estudiantes del �rea de salud de una universidad ecuatoriana. El presente es un estudio descriptivo, prospectivo, anal�tico y de corte transversal. Incluy� a un grupo conformado por 56 mujeres y 20 varones voluntarios, en los cuales se aplic� una encuesta validada y se les determin� en una muestra de suero, recolectada previo consentimiento informado, las concentraciones de glicemia en ayunas, determinadas por el m�todo de la glucosa oxidasa. Los resultados obtenidos del estudio demostraron en un rango de tres valores como: bajo de (50-69) con un porcentaje de 3,5%, normal en un rango de (70-115) con su porcentaje de 90,1% y elevado con un rango de (116-300) con porcentaje de 6,29%, lo que nos indica que la mayor�a de pacientes est�n en los valores normales. En los estudiantes, el sexo femenino predomin� con un porcentaje del 60,14% mientras que el 39,86% fue para el masculino.� La prevalencia mundial de la obesidad se duplic� con creces en la �ltima d�cada y, en ese a�o, el 11% de los varones y el 15% de las mujeres (m�s de medio bill�n de adultos) eran obesos, sin embargo, en la presente investigaci�n no se encontr� asociaci�n estad�stica alguna entre las variables en estudio en los estudiantes de universidad ecuatoriana.

Palabras clave: Az�cares; adolescente; valores de referencia; glicemia.

 

Abstract

The excessive consumption of sugars is associated with various pathologies such as overweight, obesity, liver disorders, behavioral disorders, diabetes, cardiovascular disease, fatty liver, some types of cancer and dental caries. In addition, the consumption of sugars can contribute to the development of psychological disorders such as hyperactivity, premenstrual syndrome and mental illnesses. Glycemia is an important indicator of the body's metabolic status, so the alteration of its normal values is an imminent alert of possible metabolic failures. The objective of this research was to identify the consumption of sugars and its relationship with blood glucose levels in students from the health area of an Ecuadorian university. This is a descriptive, prospective, analytical and cross-sectional study. It included a group made up of 56 women and 20 male volunteers, in which a validated survey was applied and determined in a serum sample, collected with prior informed consent, the fasting glycemia concentrations, determined by the glucose oxidase method. The results obtained from the study showed a range of three values as: low of (50-69) with a percentage of 3.5%, normal in a range of (70-115) with a percentage of 90.1% and high with a range of (116-300) with a percentage of 6.29%, which indicates that the majority of patients are within normal values. In students, the female sex predominated with a percentage of 60.14% while 39.86% was for the male. The global prevalence of obesity more than doubled in the last decade and, in that year, 11% of men and 15% of women (more than half a billion adults) were obese, yet today The investigation did not find any statistical association between the variables under study in Ecuadorian university students.

Keywords: Sugars; adolescent; reference values; glycemia.

 

Resumo

O consumo excessivo de a��cares est� associado a v�rias patologias como sobrepeso, obesidade, dist�rbios hep�ticos, dist�rbios comportamentais, diabetes, doen�as cardiovasculares, f�gado gorduroso, alguns tipos de c�ncer e c�ries dent�rias. Al�m disso, o consumo de a��cares pode contribuir para o desenvolvimento de dist�rbios psicol�gicos, como hiperatividade, s�ndrome pr�-menstrual e doen�as mentais. A glicemia � um importante indicador do estado metab�lico do organismo, portanto a altera��o de seus valores normais � um alerta iminente de poss�veis falhas metab�licas.

O objetivo desta pesquisa foi identificar o consumo de a��cares e sua rela��o com a glicemia em estudantes da �rea de sa�de de uma universidade equatoriana. Este � um estudo descritivo, prospectivo, anal�tico e transversal. Incluiu um grupo composto por 56 mulheres e 20 volunt�rios do sexo masculino, no qual foi aplicado inqu�rito validado e as concentra��es de glicemia de jejum, determinadas pelo m�todo da glicose, foram determinadas em amostra de soro coletada com consentimento pr�vio informado. Os resultados obtidos no estudo mostraram um intervalo de tr�s valores como: baixo de (50-69) com um percentual de 3,5%, normal em um intervalo de (70-115) com um percentual de 90,1% e alto com um faixa de (116-300) com um percentual de 6,29%, o que indica que a maioria dos pacientes est� dentro dos valores normais. Nos estudantes, o sexo feminino predominou com um percentual de 60,14% enquanto 39,86% foi para o masculino. A preval�ncia global de obesidade mais que dobrou na �ltima d�cada e, naquele ano, 11% dos homens e 15% das mulheres (mais de meio bilh�o de adultos) eram obesos, ainda hoje A investiga��o n�o encontrou nenhuma associa��o estat�stica entre os vari�veis ​​em estudo em estudantes universit�rios equatorianos

Palavras-chave: A��cares; Adolescente; valores de refer�ncia; glicemia.

 

Introducci�n

En la actualidad, las enfermedades cr�nicas no transmisibles (ECNT) son la principal causa de mortalidad de la poblaci�n a nivel mundial, especialmente de la poblaci�n perteneciente a pa�ses con ingresos econ�micos medianos y bajos donde se registran alrededor de 28 millones (75%) de muertes por esta causa (1). Tanto adultos como ni�os son vulnerables a los factores de riesgo que favorecen la aparici�n de estas enfermedades (2). Una dieta inadecuada, el sedentarismo, el consumo excesivo de alcohol y la exposici�n al humo del tabaco son algunos de los factores de riesgo conocidos (3).

Para mantener el control de los niveles de az�car, es importante saber exactamente la cantidad de az�car que hay en los alimentos que consumimos (4). El contenido de az�car de numerosos alimentos de consumo diario, tanto los procesados como naturales (5).

Un estudio reciente de la OPS/OMS en 12 pa�ses latinoamericanos revela que el consumo de alimentos procesados y las bebidas azucaradas aumentaron en casi un tercio en promedio entre 1999 y 2013, y en tres de los pa�ses (Bolivia, Per� y Uruguay), el consumo super� el doble (6). Este estudio tambi�n revel� que el �ndice de masa corporal (IMC) se increment� en los 12 pa�ses durante el mismo per�odo y que los aumentos de IMC estaban correlacionados positivamente con los aumentos de ventas anuales per c�pita de productos procesados (7).

Dentro del proceso de producci�n y refinado, debemos tener en cuenta que el az�car ni siquiera es de color blanco (8). En este proceso, se hace pasar di�xido de azufre a trav�s del jugo de ca�a, se lo somete a altas temperaturas (comprometiendo su estructura qu�mica de modo irreversible), se lo mezcla con sustancias qu�micas que, luego de todo el proceso, adquiere su textura arenosa, su color blanco y su sabor intensamente dulce. (9). Cuando se habla de eliminar las �impurezas� se est� hablando de eliminar vitaminas, fibras y sales minerales, beneficiosas para el organismo (10).

La glicemia o el alto nivel de az�car en sangre es un indicador para la determinaci�n de la diabetes mellitus (11). Este tipo de az�car contribuye a la principal fuente de energ�a en el cuerpo (12). Podemos encontrar dentro de la glicemia rangos para poder as� diferenciarla en sus distintas fases estas son la hiperglicemia o nivel alto de az�car e hipoglucemia o nivel de az�car (13).

La ingesta de az�car es particularmente importante, porque permite incrementar y reponer los dep�sitos de gluc�geno, tanto en el m�sculo como en el h�gado (14). Tanto si la actividad laboral es f�sica como intelectual, el consumo de az�car sigue siendo aconsejable en la edad adulta (15).

La principal funci�n del az�car es proporcionar la energ�a que nuestro organismo necesita para el funcionamiento de los diferentes �rganos, como el cerebro y los m�sculos, funcionalidad esencial a lo largo de la vida y situaciones fisiol�gicas (16). S�lo el cerebro es responsable del 20% del consumo de energ�a procedente de la glucosa, aunque tambi�n es necesaria como fuente de energ�a para todos los tejidos del organismo (17).

El desayuno debe aportar la energ�a necesaria para iniciar nuestra actividad diaria, ya que en ese momento nuestro nivel de az�car es m�s bajo (18). La evidencia cient�fica, se�ala que en el desayuno se debe tomar la cuarta parte de la energ�a y nutrientes del d�a (19). El consumo de az�car en este grupo de poblaci�n produce una mayor satisfacci�n a la hora de comer (20).� Es muy importante conocer el beneficio que el consumo de az�car implica para el buen desarrollo de la dieta (21). El consumo excesivo de az�cares est� asociado con diversas patolog�as como sobrepeso, obesidad, alteraciones hep�ticas, des�rdenes del comportamiento, diabetes, enfermedad cardiovascular, h�gado graso, algunos tipos de c�ncer y caries dental. Adem�s, el consumo de az�cares puede contribuir al desarrollo de alteraciones psicol�gicas como la hiperactividad, el s�ndrome premenstrual y las enfermedades mentales. La glicemia es un indicador importante del estado metab�lico del organismo, por lo que la alteraci�n de sus valores normales es una alerta inminente de posibles fallas metab�licas. El objetivo de esta investigaci�n fue identificar el consumo de az�cares y su relaci�n con los niveles de glicemia en estudiantes del �rea de salud de una universidad ecuatoriana.

 

Materiales y m�todos

De una poblaci�n 100 estudiantes de un nivel en la universidad ecuatoriana, se calcul� una muestra utilizando la f�rmula para poblaciones finitas arrojando un numero de 76 estudiantes, los cuales fueron seleccionados al azar probabil�sticamente, seg�n criterios de inclusi�n y previo a lo cual se aplic� un consentimiento informado, para asegurar la voluntariedad de participar y las consideraciones �ticas del caso.� Se procedi� a eliminar a los que no cumpl�an los criterios de inclusi�n, no tener todos los datos completos en la encuesta realizada y por presentar una muestra hemolizada.�

La investigaci�n es de dise�o descriptivo, de tipo prospectivo, anal�tico y de corte transversal. Se utiliz� el consentimiento informado, para todas las personas que decidieron participar en el estudio, apoyado en una encuesta validada, donde se realiz� una serie de preguntas para complementar la base de datos con la informaci�n seleccionada, adem�s las t�cnicas de laboratorio para la realizaci�n del an�lisis de los niveles de glicemia en muestras sangu�nea, para su recolecci�n se utiliz� tubo est�ril sin aditivos con gel separador, siguiendo los procedimientos de bioseguridad pertinentes en la obtenci�n de las muestras sangu�neas y posterior a lo cual el suero, el cual fue procesado de inmediato para la determinaci�n de las concentraciones de glicemia.�

La prueba bioqu�mica de glucosa consisti� en el principio de la glucosa oxidasa, utilizando en este caso el reactivo de glucosa de la casa comercial cromatest, y se utiliz� un espectrofot�metro HumaLyzer Primus, ba�o mar�a y su respectivo est�ndar, los mismos permitieron describir los resultados.

 

Resultados

En comparaci�n a cu�ntas cucharadas de az�car utilizan para endulzar sus comidas los estudiantes de universidad ecuatoriana, se estableci� que el 50% consume al menos una cucharada, el 35,53 % corresponde a que ingieren dos cucharadas, Por Consiguiente, se puede evidenciar que la mayor�a se de los habitantes consumen al menos de una a dos cucharadas.

 

Tabla 1: Cucharadas de az�car que consumen los estudiantes de una Universidad Ecuatoriana

Se determin� los estados de glucosa divididos en tres categor�as como bajo con un 1,32% causando hipoglucemia, normal con 94,74% manteni�ndose en los valores normales de la glicemia y elevado con un porcentaje de 3,95% provocando hiperglucemia en los pacientes.

 

Tabla 2: Niveles de glucosa en los estudiantes de una Universidad Ecuatoriana

 

Mediante la t�cnica de Chi Cuadrado con un RR= 1.39, se pudo comprobar que la relaci�n entre la variables dependiente e independiente result� no significativa desde el punto de vista estad�stico.

 

Tabla 3: Cucharadas de Az�car Vs Estado de Glucosa

 

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Discusi�n

Seg�n los resultados obtenidos, se encontr� que el consumo de azucares est� asociada con los niveles de glicemia, debido a que la poblaci�n que se estudi� no tiene acceso a los diferentes tipos de azucares que causan enfermedades cr�nicas no transmisible. Debido, a los escasos recursos econ�micos y a la lejan�a de las zonas urbanas, en donde no es f�cil para los habitantes el acceso a estos, por lo que la mayor parte de las personas no consumen este tipo de azucares y sus acciones diarias requieren de actividad f�sica, esta es una de las razones por las que la mayor�a de los participantes no son sedentarias (22).

Hay que tomar en cuenta que los resultados que se obtuvieron se los hizo de acuerdo a las encuestas modificada de la OMS, en la cual no se especific� con qu� frecuencia se consum�a azucares refinados, ya que en las encuestas no constaba una pregunta que indicara cuantas veces a la semana consum�an este prototipo de azucares. Con el m�todo de chi cuadrado se estableci� que existe una relaci�n d�bil y estad�sticamente no significativa entre la ingesta de azucares refinados y los niveles de glucosa, con este evidenci� que con un rango de (50-69) siendo los bajos niveles de glucosa con un porcentaje de 1,32%, rango de (70-115) correspondiente a los niveles normales de glucosa y con un porcentaje de 94,74%, representando el 3,49%, entre el rango de (116-300) siendo elevado (23).

La OMS formula recomendaciones condicionales incluso cuando la calidad de las pruebas no es elevada sobre cuestiones que revisten importancia para la salud p�blica (24). Se habla de recomendaci�n condicional cuando los efectos deseables de su cumplimiento probablemente compensan los efectos indeseables, aunque la proporci�n de unos y otros no se puede establecer con precisi�n; por tanto, es preciso entablar di�logos y consultas con las partes interesadas antes de plasmar la recomendaci�n en una pol�tica (25).

 

Conclusi�n

La relaci�n entre el consumo de azucares y la glicemia esta, no es significativa, es decir que no existe relaci�n alguna entre las variables de los niveles de glucosa y el consumo de azucares. Es considerado que los efectos pueden tener sobre la salud y la y los niveles de az�cares, ya que se requieren medidas de alto impacto que favorezcan con el control de las enfermedades cr�nicas, la cual se relacionan con el consumo de estos az�cares, que son las m�s comunes en los j�venes y adultos mayores.

Este art�culo fue generado como requisito aprobatorio de la asignatura Redacci�n Cient�fica del sexto semestre de la Carrera de Laboratorio Cl�nico de la Facultad de Ciencias de la Salud. Universidad Estatal del Sur de Manab�.

 

Referencias

1.           Teresa Partearroyo, Elena S�nchez Campayo y Gregorio Varela Moreiras. scielo. [En l�nea] 2013. [Citado el: 12 de diciembre de 2018.] http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112013001000005.

2.           Los alimentos como fuente de mono y disac�ridos: aspectos bioqu�micos y metab�licos. Plaza-D�az, Julio. 4, Madrid� : SciELO, 2013, Vol. 28. 1699-5198.

3.           Araneda, J., Bustos, P., Cerecera, F., & Amigo, H. Ingesta de bebidas azucaradas OMS. [En l�nea] 2015. [Citado el: 28 de 11 de 2019.]

4.           Barclay AW, Brand-Miller J. PUBMED. [En l�nea] 2011. [Citado el: 19 de diciembre de 2018.] https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22254107.

5.           CV, Felix. Salud y Nutricion. [En l�nea] 12 de Diciembre de 2018. [Citado el: 20 de 12 de 2019.] https://www.fisioterapia-online.com/infografias/azucar-refinada-un-veneno-blanco-alimentos-y-cantidad-de-azucar.

6.           Fundamentos de alimentaci�n saludable. . G., Vel�squez. Medell�n: : Editorial Universidad de Antioquia, 2006.

7.           Ecuador, OPS. [En l�nea] 2019. https://www.paho.org/ecu/index.php?option=com_content&view=article&id=1523:la-ops-y-oms-instan-a-reducir-consumo-azucares-en-adultos-y-ninos&Itemid=360.

8.           Bioquimica. . 0. Pe�a-D�az A, Arroyo-Begovich A, G�mez-Puyou A, TapiaIbarg�engoytia R, G�mez-Eichelman C. M�xico, : Linusa, S.A, 2004.

9.           Niveles gluc�micos en m�dicos-docentes. Ch�vez, Luis Manuel Castillo. 227, Madrid : Medicina y Seguridad del Trabajo, 2012, Vol. 58. 1989-7790.

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11.       American Physicological society . APS. [En l�nea] 2010. [Citado el: 12 de diciembre de 2018.] https://www.physiology.org/doi/full/10.1152/physrev.00019.2009.

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13.       Cubaahora. [En l�nea] 2017. http://www.cubahora.cu/blogs/consultas-medicas/la-glicemia-y-la-diabetes.

14.       La densidad energ�tica y la calidad nutricional de la dieta en funci�n de su contenido en az�cares. �lvarez, Jes�s Rom�n Mart�nez. 25, Espa�a : Nutricion Hospitalaria, 2013, Vol. 4. 0212-1611.

15.       Ingesta de az�cares libres y exceso de peso en edades tempranas. . Cristina Jard�, N�ria Aranda, Cristina Bedmar. 3, Espa�a : ScienceDirect, 2019, Vol. 90. 165-172.

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22.       Encuesta Nacional de la Situaci�n Nutricional. �lvarez MC, Correa JM, Deossa GC, Estrada A, Forero Y,. Colombia : ENSIN., 2005.

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24.       MH., Williams. Nutrici�n: para la salud, la condici�n f�sica y deporte. Barcelona : McGraw-Hill, 2002.

25.       Asociaci�n entre la adherencia a las recomendaciones internacionales para ingesta diaria de azucares a�adidos y el estado nutricional en sujetos residentes en �reas urbanas de la Sierra y Costa del Ecuador. Y�pez Martha, Manuel Alejandro. Quito : Universidad San Francisco de Quito, 2018, Vol. 29.

 

 

 

 

 

�2020 por los autores. Este art�culo es de acceso abierto y distribuido seg�n los t�rminos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribuci�n-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0) (https://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/).