Actualización sobre encefalopatía hipóxica isquémica secundaria a asfixia perinatal
Resumen
Los eventos hipóxico-isquémicos intraparto que generalmente se presentan son el desprendimiento de placenta, ruptura uterina, prolapso del cordón umbilical, parto obstruido, el mal uso de oxitocina y la infección fetal, lo que da como resultado una mala oxigenación y perfusión de órganos vitales en el feto y el recién nacido. La asfixia perinatal se caracteriza por hipoxia, hipercapnia y acidosis metabólica, particularmente hipoxia e isquemia con daño a los órganos vitales. Lesión hipóxico-isquémica de órganos como el piel, riñones, hígado y corazón suele ser reversible. Sin embargo, la lesión cerebral puede conducir a un deterioro neurológico permanente. Un evento hipóxico puede causar daño de manera inmediata en el caso de la necrosis de las células, o de forma tardía en el caso de la apoptosis de las células neuronales, la misma que es responsable de una cantidad sustancial del daño cerebral permanente después de la asfixia perinatal. La muerte celular retardada por apoptosis puede ser reducida con intervenciones terapéuticas, el tratamiento actual para la Encefalopatía Hipóxica Isquémica (EHI) principalmente comprende la hipotermia terapéutica para limitar la falla energética secundaria. La hipotermia terapéutica ha mejorado drásticamente los resultados de los lactantes con EHI, a pesar de esto, en la actualidad un número considerable de bebés todavía mueren o sufren una lesión cerebral grave. Por lo que es necesario el estudio y la investigación continua y precisa de actualizaciones y estrategias neuroprotectoras adicionales.